Saturday, December 18, 2010
“Breve” respuesta al gobernador
Gobernador, ya que no quiero ser acusado de violento o censurado, ni te digo “querido” ni te digo “odiado”. Voy a tratar de imponer mi serenidad y si tengo el rostro encapuchado es porque escribo en mi computadora desde lejos. Tengo nombre y apellido y no tengo miedo a que lo sepas, pero tampoco quiero adjudicar nombre sino ser solo una voz más que te responde con un mínimo grado de respeto, aun cuando tú me has faltado al respeto varias veces con discursos que menosprecian que tengo un cerebro y no soy un mero animal para menear el rabo cada vez que hablas, pero tú crees que eso es el pueblo, una manada de gente ignorante fácil de manipular. ¿No fue así que ganaste tan abrumadoramente? ¿No fue con un partido que se impuso detener toda forma de gobierno en el 2004 con tal de resultar triunfador en el 2008? Claro, en aquel entonces era tu jefe el del plan, y tú jugaste a las relaciones públicas para luego disfrutar de lo que sembrara el partido antes. Ese es tu estilo ¿no? Te haces de la vista larga y luego das la estacada final. ¿Ves? No todos nos olvidamos. Yo sé que no es que tú crees lo que dices ni que eres un…corderito, sino que tienes una agenda y que desde el día #1 moviste tus fichas para cumplirla y de paso devolverle el favor a todos los que dieron sus millones en la campaña. No, no todos nos olvidamos, y aun cuando ignoras lo que representa la UPR para nosotros (y Puerto Rico), sabes muy bien lo que haces en tu plan de perseguir a cierto sector de la UPR (ya hasta comenzaron las expulsiones) y redefinir lo que la UPR significa de acuerdo a tu agenda y tus caprichos, como cualquier dictador hace. No es casualidad que dijeras que se acabó la politización del sector de izquierda en la UPR, olvidando todos los sectores que hacen política en la UPR de derecha, pero esos responden a tu agenda así que esos no son un problema. Son los otros, esos a los que llamas “los huelguistas violentos” y que acusas de politizar la UPR, cosa irónica, viniendo de un político que sentó una administración en la universidad de los que te gustan, de esos que te menean al rabo y van tras los huesos que les tiras. Sin embargo, aun cuando yo sé que tú sabes y lo que buscas es manipular al que no sabe, te quiero contestar ciertos puntos, así de pasada, cómo parece que te escribieron el mensaje que leíste hace unos días. "Los huelguistas violentos" cómo les llamas, no son los que han convertido la UPR en un lugar cerrado situado con el estado policial, obligando al todo el que entra a tener ID como en las dictaduras (¿Cuántas veces no hubiera podido entrar al campus así? ¿Cuánta gente no pudiera ver el campus solo por eso, incluyendo a los americanos? ¿De cuándo acá gente expulsada en la UPR no puede entrar o pena de arresto? ¿Es eso democrático en la “universidad del pueblo”?). No son “los huelguistas violentos” los que se niegan a resolver la crisis con alternativas a la cuota (te han dado varias y te has negado a contestarlas), no fueron ellos los que arrebataron los portones con un costo de casi dos millones para convertir al campus en tierra de nadie, derrochando más dinero de una administración que llamas “responsable”. Tu excusa de que la “universidad es para todos” y por eso había que sacar los portones no concuerda con la realidad de Río Piedras y su alta criminalidad. Por otro lado, tu comparación con universidades de USA está fuera de contexto ya que, por un lado, allá no hay tales niveles de criminalidad en los llamados “college-towns” (peor record de la historia, pero poco hablas de eso porque son los “huelguistas violentos” los que siembran el caos en la isla…que cortina de humo más conveniente ante el fracaso rotundo de tu administración con la criminalidad), y las universidades del “estado” cuestan tanto que casi nadie puede estudiar o necesitan embrollarse, que es lo que tú persigues con los préstamos…. ¡Y deja de compararte o compararnos con ese país inferior! Ese no es un país que goza de grandes privilegios cuando la salud y la educación son un negocio. Mejor compara a la UPR con universidades del estado en otros países, desde Europa hasta Latinoamérica, como en Argentina, donde la universidad del estado es gratuita. Sabemos que estamos lejos de que esto suceda, pero basta de que cada descalabro económico de la UPR sea pagado por el bolsillo de los estudiantes, cerrando cada vez más posibilidades de que gente sin recursos pueda estudiar. Ahora, según tú, se trata de una crisis de la que “todos hemos tenido que pagar” (menos los tuyos y los de tu partido), y por eso se debe la “sensible” proposición de la cuota. Al parecer y de repente, todo es culpa de la crisis cuando antes era culpa de los populares…oh, perdona, que mencionaste que es la anterior administración la que “no tomó las medidas necesarias” para ajustarse a la crisis. En eso estamos de acuerdo, pero tampoco esa crisis se debe meramente a ellos, sino a años de descuidos y reducción presupuestaria. Sin embargo, no fue aquella administración la que despilfarra el dinero en seguridad privada, remoción de portones, y anuncios de página entera en los principales medios rotativos para imponer tu propaganda insultante a cualquier persona con dos dedos en la frente. Para eso sí hay dinero. Con todo el dinero que la administración se ha gastado en empujarnos la cuota (no queda otra palabra), se hubiera podido al menos reajustar el presupuesto para evitar la cuota. Por otro lado, SÍ son los estudiantes en protesta una mayoría que gana toda asamblea y que va por encima de los egoístas que solo quieren terminar su carrera sin importarles la institución. Son esos estudiantes los que saben lo que es una educación y lo que es la UPR, no tú, y en eso sí eres un ignorante, que nunca cursaste estudios en ella por ser “privilegiado” y que aun mandas a tus hijos a universidades de USA (¿Qué rayos sabes tú entonces de la UPR?? ¿Quién te da el derecho de hablar por nosotros los estudiantes? Los que cursamos en ella, los que cursan en ella y los que cursarán en ella)... ¡“La agenda desestabilizadora” a la que te refieres la impusiste TÚ con toda esta confrontación! TÚ fuiste el que mandó a la policía a entrarle a macanas a un solo estudiante en la avenida universidad antes que pasara un año de tu mandato, TÚ fuiste el que impusiste a agentes a dar palos y a intimidar a estudiantes-diciendo por nombre y apellido quiénes eran y qué hacían-para plantar el miedo de estar siendo “velados” en cada uno de ellos. TÚ el que permitió que tus legisladores y tu superintendente entraran a golpes a todo el que se pusiera en el camino de las macanas y los tiros en el Capitolio, desde los estudiantes hasta la prensa. TÚ eres ahora el violento al prostituir a la UPR, meter a la policía, intimidar y perseguir con TUS encapuchados. TÚ el violento que, en lugar de resolver esta situación, insistes en la intransigencia, en la fuerza, y en el tono de confrontación en lugar de ofrecer una solución que no signifique más fondos federales y más embrollo (¡claro! ¡Seamos todos como los americanos! Que si no son de cuna azul como tú terminan debiendo sobre 100,000 al terminar un bachillerato que no sirve para mucho ya… ! ¡esa es la gran solución!) Tú definición de educación no es educar, es adoctrinar, es obligar a los estudiantes a mirar las cosas solo desde tu punto de vista, sin debates, sin preguntas, como en las dictaduras. Por eso quieres que se acabe la politización de cierto sector, sin mencionar nada de los sectores que comparten tu agenda. Yo entiendo, para la gente como tú no les convienen los cuestionamientos ni las preguntas. Como a un buen dictador, tu poder requiere del obedecer sin cuestionar, del ser sumisos, de la obediencia y de la ignorancia. En ella se basó tu gran triunfo y en ella se basa el respaldo que gozas en sectores que, como poco, están enajenados a los que pasa en la UPR o lo que significa una universidad, que se diferencia de un colegio vocacional, lo que te gustaría hacer de ella (y lo que también quería AAV hacer de ella). Como mucho, esos grupos que aplauden tus esfuerzos, más allá de los que tienen agendas claras a favor de tu imposición (sí, totalmente político, como tú acusas a los estudiantes), resienten el hecho de que ellos asisten a universidades privadas, ignorando la diferencia entre una universidad privada y los diferentes niveles que éstas tienen, y una pública. Y por eso, te conviene perpetuar esa ignorancia a la fuerza, usando a los peones del estado para imponerte, ignorando la historia que demuestra la sangre que se ha derramado entre puertorriqueños por tener a la policía en el campus, manipulando y usando el miedo de perder la acreditación sin mencionar que la preocupación de la “middle states” para acreditar no eran los estudiantes, sino la politización del campus, del que se ha subrayado su matiz al mandar a la fuerza por órdenes TUYAS (tu batata de presidente dijo al otro día que fue él quien pidió tal fuerza luego de haber sigo regada la información de que TÚ estabas con el principal atropellador de fuerzas civiles dando instrucciones para meterse en el campus). Podría no haber huelga e igual se pierde la acreditación con el mero hecho de tener a la policía en el campus. Eso no lo dices, pero sí buscas manipular a los estudiantes, meterles miedo, e imponerte, hasta el punto de usar al Supremo para violar los derechos constitucionales y devolver los favores que les hiciste al sentarlos allí….y de paso acusar a “los huelguistas violentos”. Si eso no es una dictadura, un total asalto y toma de poder en todas sus ramas, ignoro la definición de tal término que con facilidad has usado para nombrar a otros gobernantes que tampoco comparten tu ideología asimiladora. No con mucha esperanza, espero que fracases en tus objetivos ya que, sí lo logras, por medio de la fuerza y la propaganda, la verdadera educación universitaria habrá muerto para siempre en la isla…y no quiero pensar los resultados en una isla donde el poco espacio que quedaba para la formación del intelecto deje de existir (en primer lugar, yo no estaría aquí, sino que estaría moviendo el rabo…). Ese sería el verdadero caos, esa la estacada final que dieras al pueblo que juraste defender.
Monday, December 13, 2010
El ensimismamiento de la desconexión
Los otros días sostuve una conversación en la que me reprochaban estar pendiente a las cosas que pasan en la isla cuando estoy en Buenos Aires. Al parecer, se supone que parte de la experiencia de “sumergirme” en la cultura de otro lugar es el cortar todo vínculo con la isla y “vivir” la gran experiencia de la otra ciudad.
Si bien es cierto que, al vivir en otra ciudad, uno se vuelve un tanto extraterrestre -como habitante entre mundos- no me parece que eso signifique que uno deba cortar con la tierra en donde, para citar a una amiga, uno tuvo el accidente de nacer. De hecho, si esto fuera así, y si el hecho de haberse ido y hasta seguirse moviendo de país en país significa una inserción entera en esa cultura, la experiencia del viaje se vuelve empobrecedora en lugar de enriquecedora. Y es que se supone que uno viaja y vive en otros lugares pare expandir su conocimiento y entendimiento sobre cómo vive el ser humano. Sin embargo, uno no puede aprender y sentir vivencias nuevas si olvida lo que uno es y de dónde vino. ¿De qué sirve entonces? ¿De estar en una especie de viaje enmascarado por la enajenación?
Pues sí, de eso se trataría si el irse significa cortar todo vínculo con la tierra en que nacimos. Por un lado, se convertiría en un ejercicio de ensimismamiento en donde la experiencia del estar fuera de lugar se basa en conocer a gente nueva, tener sexo con gente “exótica”, ver lugares nunca antes imaginados, y así por el estilo. Sería muy parecido a jugar un ‘role-playing’ de Carmen Electra para adultos. No que nada de eso esté mal, y de hecho, es parte del viajar, pero cuándo es lo único que se busca, experimentar se vuelve un acto masturbatorio sin ningún sentido más que olvidar, como si se tratara de la nueva droga de los despatriados: la desconexión, el olvidar el ‘nostos’. Ni siquiera Odiseo se dio ese lujo aun cuando Dante lo condenara al continuo viaje. Por otro lado, el “no querer saber” de la tierra en donde uno nació se vuelve problemático en cuanto a la experiencia del ser extranjero se trata, no por conocer al nuevo lugar y su gente, sino el quererse sumergir a un punto en el que se quiere “hacer pasar por”, o sea, ya yo no tengo nada que ver con aquello, ahora soy parte de esta comunidad X. Eso, si me preguntan, suena a complejo y a idolatría de la otra cultura. Y no se trata de nacionalismos románticos, yo soy creyente que cada persona debe tener la oportunidad de conocer a otros pueblos para poder reflexionar sobre su condición como humano y su propia comunidad, pero por más pos-nacional que uno quiera ser, no hay viaje ni idea que borre el hecho de nuestra procedencia, procedencia de la que uno debe defender y sentirse orgulloso como accidente del que su vida forma parte y del que se basa su identidad (aun el que odie a su patria construye su identidad a partir de ese complejo o rechazo). Solo teniendo en cuenta el lugar de donde vinimos se puede uno enriquecer como individuo, con esa riqueza que da el exponerse a otras costumbres, otros lugares, otros pueblos. De lo contrario, de nada sirve el viajar y se habrá perdido el tiempo. Para masturbarse no hacen falta pasaportes.
Si bien es cierto que, al vivir en otra ciudad, uno se vuelve un tanto extraterrestre -como habitante entre mundos- no me parece que eso signifique que uno deba cortar con la tierra en donde, para citar a una amiga, uno tuvo el accidente de nacer. De hecho, si esto fuera así, y si el hecho de haberse ido y hasta seguirse moviendo de país en país significa una inserción entera en esa cultura, la experiencia del viaje se vuelve empobrecedora en lugar de enriquecedora. Y es que se supone que uno viaja y vive en otros lugares pare expandir su conocimiento y entendimiento sobre cómo vive el ser humano. Sin embargo, uno no puede aprender y sentir vivencias nuevas si olvida lo que uno es y de dónde vino. ¿De qué sirve entonces? ¿De estar en una especie de viaje enmascarado por la enajenación?
Pues sí, de eso se trataría si el irse significa cortar todo vínculo con la tierra en que nacimos. Por un lado, se convertiría en un ejercicio de ensimismamiento en donde la experiencia del estar fuera de lugar se basa en conocer a gente nueva, tener sexo con gente “exótica”, ver lugares nunca antes imaginados, y así por el estilo. Sería muy parecido a jugar un ‘role-playing’ de Carmen Electra para adultos. No que nada de eso esté mal, y de hecho, es parte del viajar, pero cuándo es lo único que se busca, experimentar se vuelve un acto masturbatorio sin ningún sentido más que olvidar, como si se tratara de la nueva droga de los despatriados: la desconexión, el olvidar el ‘nostos’. Ni siquiera Odiseo se dio ese lujo aun cuando Dante lo condenara al continuo viaje. Por otro lado, el “no querer saber” de la tierra en donde uno nació se vuelve problemático en cuanto a la experiencia del ser extranjero se trata, no por conocer al nuevo lugar y su gente, sino el quererse sumergir a un punto en el que se quiere “hacer pasar por”, o sea, ya yo no tengo nada que ver con aquello, ahora soy parte de esta comunidad X. Eso, si me preguntan, suena a complejo y a idolatría de la otra cultura. Y no se trata de nacionalismos románticos, yo soy creyente que cada persona debe tener la oportunidad de conocer a otros pueblos para poder reflexionar sobre su condición como humano y su propia comunidad, pero por más pos-nacional que uno quiera ser, no hay viaje ni idea que borre el hecho de nuestra procedencia, procedencia de la que uno debe defender y sentirse orgulloso como accidente del que su vida forma parte y del que se basa su identidad (aun el que odie a su patria construye su identidad a partir de ese complejo o rechazo). Solo teniendo en cuenta el lugar de donde vinimos se puede uno enriquecer como individuo, con esa riqueza que da el exponerse a otras costumbres, otros lugares, otros pueblos. De lo contrario, de nada sirve el viajar y se habrá perdido el tiempo. Para masturbarse no hacen falta pasaportes.
Monday, December 06, 2010
Vive!
“Nada se sabe, todo se imagina.
Circúndate de rosas, ama, bebe,
Y calla. El resto es nada.”
-Fernando Pessoa
(Antología, Austral, 228)
Circúndate de rosas, ama, bebe,
Y calla. El resto es nada.”
-Fernando Pessoa
(Antología, Austral, 228)
Monday, November 29, 2010
Crónicas del Sur: Primera Parte
Creo que se me ha pasado el tiempo para escribir un poco sobre mis aventuras del sur. ¡Ya llevo tres meses aquí! Después de ese tiempo se empiezan a juntar las experiencias a un nivel en el que se hace más difícil contar las cosas cándidamente. Oficialmente, Buenos Aires es la ciudad en la que más tiempo he estado fuera de mi país natal y de South Bend. Ya con eso tendrá siempre un rincón en mí y un amor que llevaré hasta los últimos días. He vivido más en Baires que en mi querida Habana, la gran Bogotá, y Madrid...y cada una de estas ciudades aun guarda gratos recuerdos en mi.
¿Y qué se puede decir de Baires?? ¡Protestas! En realidad se pueden decir muchas cosas, pero me pude dar cuenta rápidamente de la constante militancia del pueblo aquí. A cada rato hay marchas y protestas a las que se une mucha gente. A la primera que fui fue a la “marcha por la seguridad” o algo así. De hecho, llegué por puro accidente. Era jueves en la plaza de mayo y yo llegué hasta ese lugar esperando a las famosas madres de la plaza cuyo nombre marca el mes de mi nacimiento. Nunca llegaron. En su lugar, centenares de personas se fueron congregando poco a poco en la plaza. Eran las 6:00 PM y ya yo estaba por irme porque las madres nos estaban por todo eso….sin embargo, algo me impedía alzar vuelo ya que había esta energía en la plaza, algo que anunciaba lo que estaba por pasar. Fue esa energía la que impidió que me fuera. Yo veía una que otra persona que tenían cartelones medio escondidos con nombres, y reporteros que, en lugar de irse, seguían instalando cámaras de TV. Pues resultaba que las madres no llegarían ese día por la dichosa marcha. Esos centenares que siguieron llegando, se unían con pancartas y nombres de víctimas de la alza del crimen en la ciudad. La pasión argentina era evidente. Yo, novato, parecía sorprendido de las “peleas” de ellos en plena plaza, pero al escuchar con detenimiento, me di cuenta que debatían ideas y soluciones con tono enérgico, que protestaban la falta de apoyo, que sugerían ideas. No, no estaban peleando ni se indultaban, pero tal es la pasión porteña, donde el habla y el contacto físico son rameras y dadas por contado. Para alguien que acababa de llegar del norte y cuatro años en Gringolandia, parecían peleas, pero la historia era otra. Y luego, fascinado, pude recostarme de un poste en la plaza y preguntarme cómo sería posible importar esta militancia a mi Puerto Rico. O sea, ¡no me jodan! Por más que haya un incremento en el crimen de la ciudad, no es nada con el crimen en San Juan y Puerto Rico, pero, ¿quién protesta allá? Que hagan caso o no a las protestas es otra historia, pero conocemos la fuerza de las protestas en un país que hizo remitir al presidente en el 2001, eso no se puede pasar por alto.
Tampoco se puede pasar por alto un nacionalismo aberrante pero que parece funcionar. En todos lados hay una “celeste” (la bandera argentina). Son muchos los balcones que tienen ese adorno y todavía ignoro si se debe al bicentenario, a la pasada copa mundial, a ambas, o a un hecho cotidiano. Me toca preguntar. Sin embargo, apuesto por cierto sentido unitario de comunidad que va más allá de la bandera. De lo contrario, la militancia sería imposible…pero esa es mi teoría de extranjero observando.
También me toca preguntar… ¿Dónde está el cambio en este país? Acabando de llegar, la que se suponía me vendiera un boleto para el “Subte” (metro) me pidió diez centavos. Los únicos centavos que yo tenía en el bolsillo eran de Estados Unidos….me toqué y toqué los bolsillos buscando en vano alguna moneda que satisficiera sus deseos, pero nada. Con resignación y hasta encogido de hombros le dije “no tengo”, con este acento que ni es argentino ni pasa por boricua, una mezcla prostituta para tratar de que me entiendan sin imitar un acento que nunca será mío. Pasó lo que pareció una eternidad con esta tipa mirándome cómo si me deseara la muerte para luego lanzar al aire un “me lo debés”, lo que logró que yo estallara en una carcajada que se burlaba tanto de ella como de mí. Sí pendeja, te lo pago en la otra vida…!acaba y dame el boleto y no jodas más! Bienvenido a Buenos Aires David. Y eso es en la ciudad. ¿En Mendoza? Allí sí que, o tienes menudo, o no compras nada. Los billetes son remendados con un tape más tecato que el que usan en PR para pegar los dólares medio rotos y pareciera que aquellos pesos los fabricara San Martín mismo cuando instauró la república. ¡De museo!
De Mendoza y los Andes me llevé ese sabor a calor, a desierto, y a planicie mayormente. Excepto en los Andes mismos, cuyo paisaje es uno de los más impresionantes que he visto. Y es que, ¿a quién no le impresionan las montañas? Son fascinantes precisamente porque te hacen sentir tan pequeño, tan insignificante. Y los Andes son las MONTAÑAS…y luego ese viento helado que me hacía bailar la piel y esa colonia de vendedores en medio de la nada, preguntando mi procedencia y contándome de las suyas, de los pasos que los llevaron a esos lugares tan altos.
El viaje de regreso fue a través de la Pampa…una planicie sin fin. Mas nunca vi tantas estrellas en la ciudad. Y son otras estrellas, desde otro ángulo, como es otra luna. Las manchas de la luna llena son otras a las que se ven desde el caribe o el norte. En un principio pensé que el color era igual a la luna del caribe, pero con más detenimiento, y gracias a los señalamientos de Michelle, puede apreciar que no, que las manchas eran diferentes, porque las veía desde otro lugar.
También tuve la oportunidad de escaparme un par de días a Uruguay, que me pareció hermoso, especialmente Colonia, donde por primera vez pude ver los cuerpos de agua. No es que no haya visto al majestuoso río la Plata en Baires, pero allá fue desde el edificio de la Biblioteca Nacional…o ya en el barco para ir a Uruguay. Sin embargo, en Colonia estuve frente a frente sus aguas, marrones, rosas, profundas como el mar, mentirosas. Y en Montevideo, sin mapa, llegué al centro de la ciudad, a la 18 de julio…y caminé hasta la bahía, donde me encontré con el mar, mi amante….precisamente el Atlántico, a quién no veía desde que estuve en San Juan. Que deliciosa fue la bofetada a salitre en mi rostro…tanto, que dejó cicatrizada una sonrisa en el mismo.
Son tantas las historias que han ido sumándose que ya es difícil contarlas todas con cierta coherencia. Como la vez que una gitana me robó en Mendoza, o yo caminado por San Rafael con una mochila super pesada cuando la podía dejar en el terminal, o las miles de obras teatrales, películas, caminatas, y buenos momentos que ya he tenido en esta ciudad. O ayer, cuando un policía me detuvo y me dejó ir porque era de Puerto Rico, pero no dejó ir a los argentinos para decirles…sabrá dios qué. Podría tratar de juntar todas las experiencias con un tango. Yo, extranjero en el puerto, con un sombrero ridículo, caminando pasos que se suman en un baile. Demás está que prometo un romance con la milonga, y unas lágrimas tipo Gardel cuando me tenga que ir por un tiempo, como tantos otros milongueros, como tantos otros que siguen saltando de puerto en puerto.
¿Y qué se puede decir de Baires?? ¡Protestas! En realidad se pueden decir muchas cosas, pero me pude dar cuenta rápidamente de la constante militancia del pueblo aquí. A cada rato hay marchas y protestas a las que se une mucha gente. A la primera que fui fue a la “marcha por la seguridad” o algo así. De hecho, llegué por puro accidente. Era jueves en la plaza de mayo y yo llegué hasta ese lugar esperando a las famosas madres de la plaza cuyo nombre marca el mes de mi nacimiento. Nunca llegaron. En su lugar, centenares de personas se fueron congregando poco a poco en la plaza. Eran las 6:00 PM y ya yo estaba por irme porque las madres nos estaban por todo eso….sin embargo, algo me impedía alzar vuelo ya que había esta energía en la plaza, algo que anunciaba lo que estaba por pasar. Fue esa energía la que impidió que me fuera. Yo veía una que otra persona que tenían cartelones medio escondidos con nombres, y reporteros que, en lugar de irse, seguían instalando cámaras de TV. Pues resultaba que las madres no llegarían ese día por la dichosa marcha. Esos centenares que siguieron llegando, se unían con pancartas y nombres de víctimas de la alza del crimen en la ciudad. La pasión argentina era evidente. Yo, novato, parecía sorprendido de las “peleas” de ellos en plena plaza, pero al escuchar con detenimiento, me di cuenta que debatían ideas y soluciones con tono enérgico, que protestaban la falta de apoyo, que sugerían ideas. No, no estaban peleando ni se indultaban, pero tal es la pasión porteña, donde el habla y el contacto físico son rameras y dadas por contado. Para alguien que acababa de llegar del norte y cuatro años en Gringolandia, parecían peleas, pero la historia era otra. Y luego, fascinado, pude recostarme de un poste en la plaza y preguntarme cómo sería posible importar esta militancia a mi Puerto Rico. O sea, ¡no me jodan! Por más que haya un incremento en el crimen de la ciudad, no es nada con el crimen en San Juan y Puerto Rico, pero, ¿quién protesta allá? Que hagan caso o no a las protestas es otra historia, pero conocemos la fuerza de las protestas en un país que hizo remitir al presidente en el 2001, eso no se puede pasar por alto.
Tampoco se puede pasar por alto un nacionalismo aberrante pero que parece funcionar. En todos lados hay una “celeste” (la bandera argentina). Son muchos los balcones que tienen ese adorno y todavía ignoro si se debe al bicentenario, a la pasada copa mundial, a ambas, o a un hecho cotidiano. Me toca preguntar. Sin embargo, apuesto por cierto sentido unitario de comunidad que va más allá de la bandera. De lo contrario, la militancia sería imposible…pero esa es mi teoría de extranjero observando.
También me toca preguntar… ¿Dónde está el cambio en este país? Acabando de llegar, la que se suponía me vendiera un boleto para el “Subte” (metro) me pidió diez centavos. Los únicos centavos que yo tenía en el bolsillo eran de Estados Unidos….me toqué y toqué los bolsillos buscando en vano alguna moneda que satisficiera sus deseos, pero nada. Con resignación y hasta encogido de hombros le dije “no tengo”, con este acento que ni es argentino ni pasa por boricua, una mezcla prostituta para tratar de que me entiendan sin imitar un acento que nunca será mío. Pasó lo que pareció una eternidad con esta tipa mirándome cómo si me deseara la muerte para luego lanzar al aire un “me lo debés”, lo que logró que yo estallara en una carcajada que se burlaba tanto de ella como de mí. Sí pendeja, te lo pago en la otra vida…!acaba y dame el boleto y no jodas más! Bienvenido a Buenos Aires David. Y eso es en la ciudad. ¿En Mendoza? Allí sí que, o tienes menudo, o no compras nada. Los billetes son remendados con un tape más tecato que el que usan en PR para pegar los dólares medio rotos y pareciera que aquellos pesos los fabricara San Martín mismo cuando instauró la república. ¡De museo!
De Mendoza y los Andes me llevé ese sabor a calor, a desierto, y a planicie mayormente. Excepto en los Andes mismos, cuyo paisaje es uno de los más impresionantes que he visto. Y es que, ¿a quién no le impresionan las montañas? Son fascinantes precisamente porque te hacen sentir tan pequeño, tan insignificante. Y los Andes son las MONTAÑAS…y luego ese viento helado que me hacía bailar la piel y esa colonia de vendedores en medio de la nada, preguntando mi procedencia y contándome de las suyas, de los pasos que los llevaron a esos lugares tan altos.
El viaje de regreso fue a través de la Pampa…una planicie sin fin. Mas nunca vi tantas estrellas en la ciudad. Y son otras estrellas, desde otro ángulo, como es otra luna. Las manchas de la luna llena son otras a las que se ven desde el caribe o el norte. En un principio pensé que el color era igual a la luna del caribe, pero con más detenimiento, y gracias a los señalamientos de Michelle, puede apreciar que no, que las manchas eran diferentes, porque las veía desde otro lugar.
También tuve la oportunidad de escaparme un par de días a Uruguay, que me pareció hermoso, especialmente Colonia, donde por primera vez pude ver los cuerpos de agua. No es que no haya visto al majestuoso río la Plata en Baires, pero allá fue desde el edificio de la Biblioteca Nacional…o ya en el barco para ir a Uruguay. Sin embargo, en Colonia estuve frente a frente sus aguas, marrones, rosas, profundas como el mar, mentirosas. Y en Montevideo, sin mapa, llegué al centro de la ciudad, a la 18 de julio…y caminé hasta la bahía, donde me encontré con el mar, mi amante….precisamente el Atlántico, a quién no veía desde que estuve en San Juan. Que deliciosa fue la bofetada a salitre en mi rostro…tanto, que dejó cicatrizada una sonrisa en el mismo.
Son tantas las historias que han ido sumándose que ya es difícil contarlas todas con cierta coherencia. Como la vez que una gitana me robó en Mendoza, o yo caminado por San Rafael con una mochila super pesada cuando la podía dejar en el terminal, o las miles de obras teatrales, películas, caminatas, y buenos momentos que ya he tenido en esta ciudad. O ayer, cuando un policía me detuvo y me dejó ir porque era de Puerto Rico, pero no dejó ir a los argentinos para decirles…sabrá dios qué. Podría tratar de juntar todas las experiencias con un tango. Yo, extranjero en el puerto, con un sombrero ridículo, caminando pasos que se suman en un baile. Demás está que prometo un romance con la milonga, y unas lágrimas tipo Gardel cuando me tenga que ir por un tiempo, como tantos otros milongueros, como tantos otros que siguen saltando de puerto en puerto.
Sunday, November 21, 2010
El imperialismo
“El imperialismo es una línea política, una línea estructural que encarna la voluntad de expansión del Estado-nación, ya sea desde el punto de vista de la ocupación territorial, sea desde el punto de vista de la extensión de la influencia comercial, o bien desde la imposición de modelos políticos y linguísticos.”
-Antonio Negri
(Diálogo sobre la globalización, Paidós, 45)
-Antonio Negri
(Diálogo sobre la globalización, Paidós, 45)
Monday, November 15, 2010
a ser revolucionarios de veras!
“El núcleo de un pensamiento que se quiera revolucionario debe ser un pensamiento de la crisis, de la ruptura de esta experiencia.”
-Antonio Negri
(Diálogo sobre la globalización, Paidós, 42)
-Antonio Negri
(Diálogo sobre la globalización, Paidós, 42)
Monday, November 08, 2010
¿Y después del 2012…?
Mucho se habla en Puerto Rico sobre el 2012, sobre el descontento del pueblo, sobre la “traición” de Fortuño, sobre los candidatos del Partido Popular y sobre el inminente triunfo de éste en las próximas elecciones. Los que han leído mis reacciones anteriores sobre lo que está pasando en la isla saben que creo que hemos llegado al fin de la soga, que no estira más y que no podemos conformarnos con el cambia-cambia de siempre. Vivimos en momentos cruciales, únicos, donde nos jugamos el todo por el todo o perdemos la isla para siempre (será otra isla del caribe en donde o eres taxista, o trabajas en para el turismo, o te tienes que ir). Sí, sé que sueno fatalista, pero solo cabe repasar la esfera política en la última década para corroborar esta noción. La economía se ha estancado, el costo de vida aumentó, el crimen aumentó y, si vamos a decir la verdad, nunca ha bajado (desde finales de los 80 ha estado en sobre 600 asesinatos por año), la mala educación sigue institucionalizada, las cárceles abarrotadas y sin un sistema rehabilitador imperante, las ideas de la gente en el poder parecen agotadas, y mucha gente se ha largado de acuerdo al último censo (incluyéndome). Para colmo, de los que se han largado muchos son grandes y nuevos talentos que no encontraron oportunidad en la isla, y más de la mitad no piensa regresar más que de vacaciones. ¿Por qué? Porque nunca vieron la oportunidad, nadie les dio un momento pa’ probar de qué estaban hechos, porque se cansaron de que toda cosa mala se responda culpando al partidismo de mierda y que las cosas se sigan haciendo como siempre. Muchos también se han cansado del piti-yanquismo, esa fantasía que solo existe en la cabeza de muchos puertorriqueños, donde el americano es este ser dadivoso, progresivo, liberal y democrático, y se fueron a otros lados del mundo. Claro, para muchos de los piti-yanquis, de esos que se sienten ofendidos cuando le llaman a la bandera imperial “la pecosa”, su noción del americano es un viaje a Disney en la meca boricua (Orlando). Tan sincera es su percepción del anglosajón como las que tienen ellos del resto del mundo á-la-Disney. Y vamos, muchos se van buscando más blin-blin…pero esos se iban como quiera (las putas siempre se van con el mejor postor). Mas el problema, que viene en crecendo, es que llevamos años apostando por la misma simplonería, las respuestas pre-fabricadas, los azules y rojos…o verdes (la misma mierda), el ELA o estadidad, la cocolería o el rock, el rock o el reguetón, en este ciclo de mangle baboso del que, bendito Zeno Gandía…!te quedaste corto en “La charca”!
Supongamos por un momento que estoy pecando de paranoico y miremos al PPD como alternativa al neo-fascismo imperante con los penepés. Miremos como nuevos emblemas de “cambio” a los Alejandros (¡Ay que liiiindo!), a los Ferrer (¡Ay que calvo!...pero ha trabaja’o…), al Pollito (éste buscón siempre sigue sonando pero fuera de ser príncipe azul… ¿qué aporta?), o al regreso del “malentendido” de Aníbal (mis disculpas Bobby Capó). La idea de cualquiera de ellos en estos meses ha sonado a hueso para perro, con sus fanáticos babeándose y saltando, y con el resto esperando por una cara que le dé la fuerza divina de mandar pa’l carajo a aquel por quién tanto fió apenas dos años atrás. Pero, fuera de la discusión del ¿queeee pasará? …. ¿hemos escuchado alguna idea? ¿Alguna propuesta? ¿Algo???
Bueno, para ser justos, Aníbal ha escrito par de cosas con sentido desde su facebook, pero por más brillantes que suenen, sabemos por dónde cojea y que, si bien es verdad tuvo una legislatura que le hizo la vida imposible, él cagó muchas cosas por sí solito. No es la simplonería de Rivera Schatz de que Aníbal fue el que trajo el desastre actual porque el que crea eso tiene que correr a una biblioteca o simplemente ponerse a leer lo que pasa en el resto del mundo, al igual de enterarse de cómo la deuda en la isla fue incrementando drásticamente desde Rosselló. Pero eso no exime al exgobernador de nada. La huelga de la UPR tuvo sus semillas durante la administración de Acevedo Vilá, aun cuando él ahora se canta defensor de los estudiantes (el muy cabrón), el sales tax empezó con él (porque él cuadraba con los azules cuando era para joder al pueblo), fue defensor de la quinta hasta que trató de exprimir el voto melón (para hablar de soberanía…“que no es lo mismo que independencia”….y todavía no sabemos…entonces… ¿qué carajos es? ¡Te faltaron cojones tipo!) y ni hablemos de los casitos (fuera de que hayan sido utilizados como montajes políticos o no).
Pero antes de que digan que soy penepé por tirarle al exgobe, que a mi entender se le queda corto al actual gobernador y peor gobernador en nuestra corta historia “democrática” (¿nos permites elegir un gobernador papito Yanqui?), retomemos el tema. Fuera de Aníbal y sus escritos como quien no quiere la cosa por Facebook, ¿dónde están las grandes propuestas de los otros candidatos mesiánicos? Aquí me hago eco del licenciado Rafael Cox Alomar, en su columna del 6 de agosto de 2010 en El nuevo día. Su columna se titulaba “¿Y después del 2012 qué?”. ¡ESA es la pregunta mi gente! ¿Después del 2012 qué…puñeta? Y es que, como ya he sugerido y el licenciado argumentaba, no hay NINGUNA propuesta de los populares. Ninguna. N-I-N-G-U-N-A. Como dice en la columna…”las candidaturas sin proyecto se las lleva el viento.” ¿No fue así que eligieron al gobernador actual? La lógica era votar por quien sea con tal de sacar a Aníbal y… !ahora les lleva la bruja! ¿Qué? ¿Acaso no vamos a aprender de los errores? ¿Tenemos que imitar a los gringos hasta en eso??
Repasemos…Aníbal= bull-shit. Ferrer= el cabrón sacó lo único que tiene valor de la supuesta reforma contributiva de pedir más dinero a las empresas que vienen a sacarnos dinero para decir que eso es maloo…el tipo más arrodillao’ no puede ser. José Alfredo= pasemos por alto que se ha zapateado dirigir al partido o ser parte importante al menos dos veces, sus propuestas suenan a…si Ferrer está de rodillas, éste se tira al piso. Alejandro= sigue escuchando al pueblo…pero al parecer se quedó como los marineros con el canto de sirena porque todavía es la hora que no ha propuesto nada. Ninguno de ellos ofrece ningún otro cambio que no sea lo mismo que hemos vivido desde los 80 y que NO HA FUNCIONADO. Y claro, quedarse con Fortuño sería nefasto. Este hombre ha demostrado que lo que le interesa es defender los intereses de sus amigotes y el resto “such is life”….peor aun, sospecho que lo que busca es acumular puntos para una carrera política en donde él se considera hijo legítimo, los Estados Unidos (arropado con la pecosa-lo dije representante pendejo que no voy a molestar en nombrar…y me la paso por el culo también- como si fuera Rocky después de ganarla al ruso en la cuarta parte). Pero fuera de la enajenación de este lobo vestido de cordero y de lo peor que son sus sucesores, no basta “elegir al menos malo”. No ha funcionado antes, ¿por qué va a funcionar ahora?
Imagino quien dirá que uno rojo era mejor que tal azul o viceversa, pero al final de cuentas, entre los dos (y los verdes comiéndose dietas en la legislatura), nos han engatusao’ con el juego del “me quiere no me quiere”, mientras acaban de deshojar a la pobre isla.
El partidismo no pare más. Hay que acabar con esas alternativas de siempre o esperar favores por ser de éste u aquel partido. Eso no nos lleva a nada. La isla no es de un partido, es de todos. Escoger al menos malo también nos queda corto porque el menos malo no sabe qué carajos hacer tampoco, no tiene un plan concreto para cambiar el rumbo de una isla que parece irse al fondo del caribe. Y esto no es raro, ya hay al menos dos nuevas propuestas de partidos políticos porque la gente está cansada de la misma mierda. Incluso el PPR casi queda inscrito la última vez aun cuando nada de lo que decía Rogelio tenía ningún sentido (excepto que el mismo ciclo de colores sólo servía para pintar tu vida en los anuncios del cine). ¿Por qué? ¡Porque muchos votaban por cualquier cosa menos lo mismo! ¡Lo que sea!
Pero no hay que votar por cualquier cosa. Hay que tomar acción ciudadana. La huelga de la UPR apenas nos dio un somero ejemplo de cómo organizarse sin juramentos políticos y buscando el espejismo de un proyecto en común. Un proyecto en común nos dividiría, especialmente con el asunto del status a cuestas, pero la insatisfacción y la acción ciudadana pueden ser demostradas como alternativa real a los problemas que nos aquejan, desde allí, podemos empezar a pensar un proyecto en común para levantarnos poco a poco. Yo sé que con tanto calor, jode salir de la casa, pero no se puede estar sentados viendo TV, votar cada cuatro años, y quejarse entre medio desde la comodidad del hogar. Hay que hacer algo antes de que no haya tal cosa como nuestro hogar y de eso se trata la verdadera democracia. Dejen de estar masturbándose con la idea de un gringo que solo existe en sus cuartos oscuros y empecemos a actuar lo que es una democracia, que no es solo votar, sino exigir y presionar a nuestros líderes para representar al pueblo, y, del mismo modo, hacer lo nuestro para ir resolviendo lo que nos aqueja. No nos resignemos al menos malo. Apostemos por el bueno. Construyámoslo. Debatamos ideas, compartamos otras. Eduquémonos. Hagamos un cambio de verdad que demuestre a los políticos de mierda que nosotros los ponemos allí para que nos sirvan y no al revés. Solo así tendremos una respuesta más allá del 2012…es más, ni siquiera tendremos que mirar a esa fecha con tanta atención. Nosotros decidiremos cuándo, cómo, y quiénes.
Supongamos por un momento que estoy pecando de paranoico y miremos al PPD como alternativa al neo-fascismo imperante con los penepés. Miremos como nuevos emblemas de “cambio” a los Alejandros (¡Ay que liiiindo!), a los Ferrer (¡Ay que calvo!...pero ha trabaja’o…), al Pollito (éste buscón siempre sigue sonando pero fuera de ser príncipe azul… ¿qué aporta?), o al regreso del “malentendido” de Aníbal (mis disculpas Bobby Capó). La idea de cualquiera de ellos en estos meses ha sonado a hueso para perro, con sus fanáticos babeándose y saltando, y con el resto esperando por una cara que le dé la fuerza divina de mandar pa’l carajo a aquel por quién tanto fió apenas dos años atrás. Pero, fuera de la discusión del ¿queeee pasará? …. ¿hemos escuchado alguna idea? ¿Alguna propuesta? ¿Algo???
Bueno, para ser justos, Aníbal ha escrito par de cosas con sentido desde su facebook, pero por más brillantes que suenen, sabemos por dónde cojea y que, si bien es verdad tuvo una legislatura que le hizo la vida imposible, él cagó muchas cosas por sí solito. No es la simplonería de Rivera Schatz de que Aníbal fue el que trajo el desastre actual porque el que crea eso tiene que correr a una biblioteca o simplemente ponerse a leer lo que pasa en el resto del mundo, al igual de enterarse de cómo la deuda en la isla fue incrementando drásticamente desde Rosselló. Pero eso no exime al exgobernador de nada. La huelga de la UPR tuvo sus semillas durante la administración de Acevedo Vilá, aun cuando él ahora se canta defensor de los estudiantes (el muy cabrón), el sales tax empezó con él (porque él cuadraba con los azules cuando era para joder al pueblo), fue defensor de la quinta hasta que trató de exprimir el voto melón (para hablar de soberanía…“que no es lo mismo que independencia”….y todavía no sabemos…entonces… ¿qué carajos es? ¡Te faltaron cojones tipo!) y ni hablemos de los casitos (fuera de que hayan sido utilizados como montajes políticos o no).
Pero antes de que digan que soy penepé por tirarle al exgobe, que a mi entender se le queda corto al actual gobernador y peor gobernador en nuestra corta historia “democrática” (¿nos permites elegir un gobernador papito Yanqui?), retomemos el tema. Fuera de Aníbal y sus escritos como quien no quiere la cosa por Facebook, ¿dónde están las grandes propuestas de los otros candidatos mesiánicos? Aquí me hago eco del licenciado Rafael Cox Alomar, en su columna del 6 de agosto de 2010 en El nuevo día. Su columna se titulaba “¿Y después del 2012 qué?”. ¡ESA es la pregunta mi gente! ¿Después del 2012 qué…puñeta? Y es que, como ya he sugerido y el licenciado argumentaba, no hay NINGUNA propuesta de los populares. Ninguna. N-I-N-G-U-N-A. Como dice en la columna…”las candidaturas sin proyecto se las lleva el viento.” ¿No fue así que eligieron al gobernador actual? La lógica era votar por quien sea con tal de sacar a Aníbal y… !ahora les lleva la bruja! ¿Qué? ¿Acaso no vamos a aprender de los errores? ¿Tenemos que imitar a los gringos hasta en eso??
Repasemos…Aníbal= bull-shit. Ferrer= el cabrón sacó lo único que tiene valor de la supuesta reforma contributiva de pedir más dinero a las empresas que vienen a sacarnos dinero para decir que eso es maloo…el tipo más arrodillao’ no puede ser. José Alfredo= pasemos por alto que se ha zapateado dirigir al partido o ser parte importante al menos dos veces, sus propuestas suenan a…si Ferrer está de rodillas, éste se tira al piso. Alejandro= sigue escuchando al pueblo…pero al parecer se quedó como los marineros con el canto de sirena porque todavía es la hora que no ha propuesto nada. Ninguno de ellos ofrece ningún otro cambio que no sea lo mismo que hemos vivido desde los 80 y que NO HA FUNCIONADO. Y claro, quedarse con Fortuño sería nefasto. Este hombre ha demostrado que lo que le interesa es defender los intereses de sus amigotes y el resto “such is life”….peor aun, sospecho que lo que busca es acumular puntos para una carrera política en donde él se considera hijo legítimo, los Estados Unidos (arropado con la pecosa-lo dije representante pendejo que no voy a molestar en nombrar…y me la paso por el culo también- como si fuera Rocky después de ganarla al ruso en la cuarta parte). Pero fuera de la enajenación de este lobo vestido de cordero y de lo peor que son sus sucesores, no basta “elegir al menos malo”. No ha funcionado antes, ¿por qué va a funcionar ahora?
Imagino quien dirá que uno rojo era mejor que tal azul o viceversa, pero al final de cuentas, entre los dos (y los verdes comiéndose dietas en la legislatura), nos han engatusao’ con el juego del “me quiere no me quiere”, mientras acaban de deshojar a la pobre isla.
El partidismo no pare más. Hay que acabar con esas alternativas de siempre o esperar favores por ser de éste u aquel partido. Eso no nos lleva a nada. La isla no es de un partido, es de todos. Escoger al menos malo también nos queda corto porque el menos malo no sabe qué carajos hacer tampoco, no tiene un plan concreto para cambiar el rumbo de una isla que parece irse al fondo del caribe. Y esto no es raro, ya hay al menos dos nuevas propuestas de partidos políticos porque la gente está cansada de la misma mierda. Incluso el PPR casi queda inscrito la última vez aun cuando nada de lo que decía Rogelio tenía ningún sentido (excepto que el mismo ciclo de colores sólo servía para pintar tu vida en los anuncios del cine). ¿Por qué? ¡Porque muchos votaban por cualquier cosa menos lo mismo! ¡Lo que sea!
Pero no hay que votar por cualquier cosa. Hay que tomar acción ciudadana. La huelga de la UPR apenas nos dio un somero ejemplo de cómo organizarse sin juramentos políticos y buscando el espejismo de un proyecto en común. Un proyecto en común nos dividiría, especialmente con el asunto del status a cuestas, pero la insatisfacción y la acción ciudadana pueden ser demostradas como alternativa real a los problemas que nos aquejan, desde allí, podemos empezar a pensar un proyecto en común para levantarnos poco a poco. Yo sé que con tanto calor, jode salir de la casa, pero no se puede estar sentados viendo TV, votar cada cuatro años, y quejarse entre medio desde la comodidad del hogar. Hay que hacer algo antes de que no haya tal cosa como nuestro hogar y de eso se trata la verdadera democracia. Dejen de estar masturbándose con la idea de un gringo que solo existe en sus cuartos oscuros y empecemos a actuar lo que es una democracia, que no es solo votar, sino exigir y presionar a nuestros líderes para representar al pueblo, y, del mismo modo, hacer lo nuestro para ir resolviendo lo que nos aqueja. No nos resignemos al menos malo. Apostemos por el bueno. Construyámoslo. Debatamos ideas, compartamos otras. Eduquémonos. Hagamos un cambio de verdad que demuestre a los políticos de mierda que nosotros los ponemos allí para que nos sirvan y no al revés. Solo así tendremos una respuesta más allá del 2012…es más, ni siquiera tendremos que mirar a esa fecha con tanta atención. Nosotros decidiremos cuándo, cómo, y quiénes.
Monday, November 01, 2010
nada se lleva...
“Lo que llevamos de esta vida inútil
tanto vale si es
gloria, fama o amor, o ciencia o vida,
como si apenas fuese
la memoria de un juego bien jugado
que supimos ganar
a un jugador más hábil […]
La gloria pasa como un fardo rico,
la fama como fiebre,
cansa el amor, porque es en serio y busca;
a ciencia nunca encuentra,
pasa la vida y duele, pues lo sabe…”
Fernando Pessoa
(Antología, Austral, 224)
tanto vale si es
gloria, fama o amor, o ciencia o vida,
como si apenas fuese
la memoria de un juego bien jugado
que supimos ganar
a un jugador más hábil […]
La gloria pasa como un fardo rico,
la fama como fiebre,
cansa el amor, porque es en serio y busca;
a ciencia nunca encuentra,
pasa la vida y duele, pues lo sabe…”
Fernando Pessoa
(Antología, Austral, 224)
Thursday, October 28, 2010
¡Kirchner Presente!
“Oh, oh, oh…yo soy argentino! Soy un soldado del pingüino!”
Así cantaban los primeros cantos que me recibieron en la Plaza de mayo. Apenas subí del “subte” en Catedral, me ubiqué gracias el sonido del gentío al que yo le daba la espalda cuando subí la escalera. Me volví, y efectivamente, miles se iban congregando en la plaza, a eso de las 20:00, cuando se improvisó una manifestación por la muerte del ex-presidente argentino Néstor Kirchner y en apoyo a su viuda esposa, la actual presidenta Cristina Kirchner. Era impresionante ver toda la gente que caminaba por la avenida de la Plaza de mayo para congregarse…¡y seguían llegando! Habían banderas, banderas y banderas, las siempre presentes batucadas, cartelones agradeciendo la gestión a Néstor y deseando “fuerza” a la presidenta, pibes encaramados arriba de los hombros de sus padres para ver a toda la gente, y banderas, banderas, banderas. Había una bandera de Venezuela por allí, otra de Colombia por allá, y una de Chile más allá, ofreciendo tímidamente sentimientos de hermandad ante la pérdida de Argentina. Y banderas, banderas. Todo el mundo comentaba de cuando se enteró, o llamaban por celular a amigos y familiares informándoles el lugar donde se encontraban. Yo andaba solo, así que poco a poco me fui colando entre la gente. Eran como las 20:15 cuando me comenzaba a adentrar al medio de la plaza, donde se arrinconaba un mar de gente…¡y seguían llegando! Cuanto grupo peronista había, cuanto pingüino había (seguidores de los Kirchner), y hasta el Partido Comunista -que me parecen son los únicos de extrema izquierda que los apoyan- estaba en una esquina. Había una mujer con la nariz tupida y aun con los residuos de las lágrimas que habían salido de sus ojos un poco antes…y por supuesto, la gente compartiendo mate.
Yo había perdido la noción del tiempo entre la gente cuando pasé de largo a una eterna cola en donde se reunían con una flor para dejarla en la casa rosada. Poco sabían los pobres lo que yo me enteré una vez puede llegar hasta los portones; no estaban dejando pasar a nadie. En el medio del camino vi también a un hombre llorando, y de la nada un pelú salió gritando: “¡Compañero Néstor Kirchner!” y la gente contestaba “¡Presente!” De vez en cuando gritaban “Anacocó, la puta que te parió” (así sonaba fonéticamente, no tengo puta idea de qué o quién sea Anacocó’?’), o comenzaban a saltar mientras gritaban “El que no salte es un traidor”. De momento otra persona gritó “¡Viva la Argentina!” Alguien encendió una luz de bengala en la estatua de la plaza, muy cerca de donde flotaba un globo inflable de la presidenta con un lazo negro en el pecho, que no hubo quien confundiera con Eva Perón (si acá Eva es como Martí para los cubanos, sale en todos lados). De vez en cuando la gente estallaba en aplausos, o volvían a saltar…y hasta cantaron el himno nacional…”para el pueblo argentino salud”. Muchos fumaban en una esquina. Otros se encontraban en medio de la muchedumbre. Otros aprovechaban el momento y vendían flores o banderas. Los reporteros tomaban cámara y cuanta foto….y no solo reporteros, todo el que tuviera cámara o celular tomaba fotos, hasta yo mismo. Otros se sentaban con sus amigos en el césped. Padres, hijos, rubios, morochos, pobres, nativos, gente de las provincias…y hasta una anciana con el pañuelo de las madres se abría espacio entre la muchedumbre.
Sí, la muerte de un ex-presidente y político los había unido como hace décadas ningún otro político lo había hecho. Había cartelones que agradecían a Néstor, que pese a la crítica de los que dicen que no hicieron suficiente durante la dictadura, fue el primer presidente en decir que terminaba el encubrimiento, mandó a quitar las pinturas de los dictadores, promovió la recuperación a la memoria de los centros de detención clandestina, y promovió el enjuiciamiento de los culpables y torturadores de la dictadura. Néstor, quien ha utilizado y creado una masa popular para movilizar su agenda, probándose como político astuto, y quien dejara a su esposa el legado para ir a ser líder de la esperanzadora UNASUR, que sigue cobrando fuerza. Néstor que apoyó en todo momento la agenda de su esposa, entre la lucha de la ciudad contra el campo, la legalidad del matrimonio gay, y la guerra a los monopolios mediáticos, aun cuando esta última siempre es peligrosa ante la opinión pública. Néstor que junto a su esposa ha ido sacando al país del atolladero económico en el que se encontraba hace una década gracias a la agenda neoliberal. Néstor quien fuera pionero en promover lo que ahora parece como el modelo a seguir entre los gobiernos de centro-izquierda; el capitalismo nacional. Néstor quien en cuanto supo que el Presidente Correa en Ecuador estaba en tremendo atolladero y en medio de un atentado, censuró el acto y envió a Cristina a una convocación de todos los presidentes de Suramérica en repudio a lo que pareciera un golpe de estado. Néstor, al que por estas pocas cosas que yo sé, como recién llegado a este país, fui a homenajear, no por lo que ha hecho, sino por lo que simbolizaba. El que tenga dudas o sea escéptico pensado que era un mediocre o lo que fuera, solo tenía que estar conmigo en esa plaza y se iba a tener que comer las palabras. Los Kirchner serán lo que serán, como políticos al fin, pero ahí estaba la gente conglomerada en homenaje no al ex-presidente, sino a lo que simbolizaba y ahora más que nunca va a simbolizar. No por nada se les atribuye a ellos el legado del peronismo.
Al final, pasadas las 22:15, decidí irme. Ya la gente se iba dando cuenta de que no iban a poder pasar por hoy. Muchos planificaron para regresar mañana, cuando se vele el cuerpo. Otros decían a los cuatro vientos “¡Pero mirá cuánta gente vino!”…otros seguían tomando fotos de las pancartas que leían “¡Gracias Néstor! ¡Fuerza Cristina!”. Yo miraba hacia atrás cómo la muchedumbre se iba dispersando y cómo muchos seguían por la Saenz Peña como yo, en el mismo medio de la avenida. Parecía que me estaba siguiendo. No tardé mucho antes de estar cruzando el obelisco, y vi a gente que iba en dirección contraria, hacia la Plaza de mayo, abrazados en la celeste. También vi a uno que tenía una camiseta que leía “YO SOY mierda oficialista”, usando el insulto peyorativo de la oposición para reafirmar el apoyo al gobierno. Esos confirmaban que aun cuando muchos nos íbamos regresando, ¡Todavía seguían llegando!
No cabe duda que mañana será igual, y muchos serán los que darán homenaje al esposo de la presidenta. Néstor ex-presidente, Néstor líder y Néstor la idea. Lo que vi esta noche, y lo que seguirá ocurriendo en estos tres días de luto confirman lo que gritaba aquel pelú “Compañero Néstor Kirchner”
-¡Presente!
Así contestó la gente...hasta al final concluir con “¡Presente
…¡AHORA Y SIEMPRE!”
Tuesday, October 19, 2010
It’s worth it
There are a lot of people who talk about how fuck things are. Actually, Coronel Friggs of American Beauty used to say “This world is going to hell!”. Of course, that was an imitation of many people who thinks and talks like him: we were better off in the past, our moral values have gone to hell, the end is near, is not worth it to bring more kids into the world, things go worse every day, etc, etc. As much as a fan I am of pessimism, I cannot agree. I cannot believe that all is lost, that there is no future and all is lost, or the pop version, the apocalypses or the “end of times” is near; “judgment day” or “the second coming” is ahead (Yeah, I wish! The second one is always better!), or whatever you want to call it. Oh yeah, the God who never cared will suddenly have a conscience attack and even do something as a judge figure! If you ask me I’ll say that’s a lot of Hollywood crap. Of course, we were raise in a continuous OD of Hollywood so, what else could we expect but a grand finale? Now in 3-D and Blue Disc!!
I refuse to think in those terms. In fact, anyone who agrees is taking away any reason to be here, to live, to form part of this diverse community we call humanity (agency….for all you postmodern academics). What else do we have then? The final judgement? Let’s assume that is so. Ok, on what grounds? Judged for what exactly? We have only begun to screw things up! Or maybe we have already screwed up a lot, but not so much that we are the ones to get to pay the check! What? Are we supposed to pay for an entire humanity of fuck-ups? If that is so, THAT’s why this is fucked-up!
But I am missing the point, according to these people, the world is fucked right here and now, so that means the end is near, right? We see it every day; guys killing their family members, dark wars because of drugs, thieves, child abuse, child prostitution, prostitution, incest, corruption, imperialism, murders, rapes and the list goes on and on. And I ask, is that new?! When was it that things were not as fucked?! Stop fooling yourself, those good old days are just a fragment of your imagination, something that never existed. If we know of all our wrong doings, is because of mass-media. Today we have so much information (and disinformation) at our disposal that in they need in the US a number of screens within the TV screen to bombard the audience with, well, “information”. However, there’s a reality inside all that info; it’s not that we are approaching the end of times, we are just aware about our actions. In fact, we have done shitty things since the start of what we so wrong called civilization. If you are one of those who think that the world is worst than ever, ask yourself if that idea is not itself a product of excess of information instead of the reality that…we have always been as capable of doing “bad” things, as well as “good” things (that division remains totally arbitrary because, who can define what is good and bad?). Is the fucking yin-yan baby! Oh, you don’t buy it? Do me a favor and read The Iliad so you learn or remember about when we have bloody wars for the sake of a lady, where the carriages slipped among human parts and a bunch of blood. Read any Greek tragedy, where sons fucked their mommies and took out their eyes out of their sockets afterwards. What the fuck?! Go and read The Bible! There you will not only find how the “son of god” is lynched because his daddy wanted so (awesome family values in that book!), but women and children massacred by divine order, whipping out entire groups. Remember the millenary Crusades war, where thousands of human were massacred because of religion, or the witch hunting in America, where if you were accuse as such, it was burn, baby burn for you! Remember the Holocaust, or the Spanish Civil War, or the Nuclear Bomb in Japan where millions died with no reason, and among them, children, mothers, fathers, everything but cockroaches….it wasn’t until the Vietnam War that we got to see our horrors live in TV. Since then, everyone likes to repeat everything is going worse and worse every day.
I’m not one of those who will say to you “technology will set us free”. This is no not a sci-fi novel. On the contrary, I think this entire technology disable us to a certain point. Being bombarded with so much “info” means we are distracted of doing anything about it. In fact, the possibility of doing something seems something of a sci-fi novel itself; so far way from us, as far as that galaxy from Star Wars, that it’s easier to say that the end is near than to do something about it.
However, we forget that that among our grotesque nature (no, we are not pure and good because those are moral values created by humans) and how fuck-up we have left the planet to please the indulgence of one or two millionaires, we have made some progress. So the bad shit is not something new, but know we know more about it, which didn’t happened before unless you could read (and they are a lot of people who can’t read even today) or was entertained in the times of oral epics. Even when it’s true that many people who could have change something didn’t, that doesn’t mean we are doomed and that there’s nothing to be done, or even all that crap about the end of the world. Yes, the world will end someday, but not because someone is coming. Face it, the planet has an expiration date after all. Even if that day finally comes or if we rush that end, is entirely up to us, but let us not settle with a “this is fuck-up and there’s nothing to be done”…let’s do something.
I refuse to think in those terms. In fact, anyone who agrees is taking away any reason to be here, to live, to form part of this diverse community we call humanity (agency….for all you postmodern academics). What else do we have then? The final judgement? Let’s assume that is so. Ok, on what grounds? Judged for what exactly? We have only begun to screw things up! Or maybe we have already screwed up a lot, but not so much that we are the ones to get to pay the check! What? Are we supposed to pay for an entire humanity of fuck-ups? If that is so, THAT’s why this is fucked-up!
But I am missing the point, according to these people, the world is fucked right here and now, so that means the end is near, right? We see it every day; guys killing their family members, dark wars because of drugs, thieves, child abuse, child prostitution, prostitution, incest, corruption, imperialism, murders, rapes and the list goes on and on. And I ask, is that new?! When was it that things were not as fucked?! Stop fooling yourself, those good old days are just a fragment of your imagination, something that never existed. If we know of all our wrong doings, is because of mass-media. Today we have so much information (and disinformation) at our disposal that in they need in the US a number of screens within the TV screen to bombard the audience with, well, “information”. However, there’s a reality inside all that info; it’s not that we are approaching the end of times, we are just aware about our actions. In fact, we have done shitty things since the start of what we so wrong called civilization. If you are one of those who think that the world is worst than ever, ask yourself if that idea is not itself a product of excess of information instead of the reality that…we have always been as capable of doing “bad” things, as well as “good” things (that division remains totally arbitrary because, who can define what is good and bad?). Is the fucking yin-yan baby! Oh, you don’t buy it? Do me a favor and read The Iliad so you learn or remember about when we have bloody wars for the sake of a lady, where the carriages slipped among human parts and a bunch of blood. Read any Greek tragedy, where sons fucked their mommies and took out their eyes out of their sockets afterwards. What the fuck?! Go and read The Bible! There you will not only find how the “son of god” is lynched because his daddy wanted so (awesome family values in that book!), but women and children massacred by divine order, whipping out entire groups. Remember the millenary Crusades war, where thousands of human were massacred because of religion, or the witch hunting in America, where if you were accuse as such, it was burn, baby burn for you! Remember the Holocaust, or the Spanish Civil War, or the Nuclear Bomb in Japan where millions died with no reason, and among them, children, mothers, fathers, everything but cockroaches….it wasn’t until the Vietnam War that we got to see our horrors live in TV. Since then, everyone likes to repeat everything is going worse and worse every day.
I’m not one of those who will say to you “technology will set us free”. This is no not a sci-fi novel. On the contrary, I think this entire technology disable us to a certain point. Being bombarded with so much “info” means we are distracted of doing anything about it. In fact, the possibility of doing something seems something of a sci-fi novel itself; so far way from us, as far as that galaxy from Star Wars, that it’s easier to say that the end is near than to do something about it.
However, we forget that that among our grotesque nature (no, we are not pure and good because those are moral values created by humans) and how fuck-up we have left the planet to please the indulgence of one or two millionaires, we have made some progress. So the bad shit is not something new, but know we know more about it, which didn’t happened before unless you could read (and they are a lot of people who can’t read even today) or was entertained in the times of oral epics. Even when it’s true that many people who could have change something didn’t, that doesn’t mean we are doomed and that there’s nothing to be done, or even all that crap about the end of the world. Yes, the world will end someday, but not because someone is coming. Face it, the planet has an expiration date after all. Even if that day finally comes or if we rush that end, is entirely up to us, but let us not settle with a “this is fuck-up and there’s nothing to be done”…let’s do something.
Monday, October 11, 2010
Sunday, October 10, 2010
dicen que me fui...
“Alguien dijo que me fui de mi barrio, pero cuándo…cuándo si siempre estoy llegando.”
-Aníbal Troilo
-Aníbal Troilo
Monday, September 27, 2010
Vale la pena
Mucha gente habla de lo malo que están las cosas. Muchos dicen que antes era mejor, otros que se acerca el fin, que esto está jodio’, que ya no se puede traer niños al mundo, que las cosas van de mal a peor. Yo no pienso escribir mucho de esto porque no quiero que mi pesimismo-hermano gemelo que compartió mi mismo lecho de entrada y se arropó con la misma sangre-me contradiga luego. Pero, si es cierto que las cosas están jodidas (¿no me paso quejándome todo el tiempo?) no quiero creer que no hay salvación, que todo está perdido, o la más pop, que el Apocalipsis-ehem!- “el fin de los tiempos”, “el juicio final”, “la segunda venida” (ojala fuera esa, siempre es mejor que la primera) o lo que quieran llamarle en sentido judeo-cristiano- se acerca. ¡Ya viene al dios al que nunca le importó la humanidad para tomar juicio sobre ella! Suena a Hollywood pero ¿qué se le va a hacer? Fuimos amamantados por Hollywood y ese GRAN final…o simplemente nos gusta esta vaina del FIN y por eso Hollywood nos las devolvió con SFX y ¡ahora en Blue Disc y 3-D!
Yo me niego a pensar en esos términos porque, entonces, ¿qué tenemos que hacer aquí? ¿Ser juzgados? Y si fuera así, ¿juzgados por qué y de qué? Si nosotros apenas empezamos a meter las patas. Quizás ya las hemos metido bastante pero ni tanto para que sea a nosotros que nos vengan a joder. ¿Qué? ¿Esto está jodido porque tenemos que pagar por una humanidad entera de desastres sin dios algunos que nos ampare? ¡¿En serio?!
Ah no, es que olvidaba que ahora las cosas están más malas. Ahora los tipos matan a su familia, o la misma madre mata a sus hijos y luego intenta quemarse con ellos, y hay guerras macabras por drogas, y robos, sexo infantil, prostitución, incesto, corrupción, imperialismo, asesinatos, violaciones, y la lista no acaba. Y pregunto yo, ¡¿eso es nuevo?! ¡¿Cuándo es que las cosas no han estado así de jodias’?! Déjense de engañar en la melancolía de un pasado que no existió. Si sabemos de tantos abusos y violencia, es porque tenemos más información disponible, tanta, que en EEUU se necesitan varias pantallas para seguir anestesiando a las masas con información. Sin embargo, dentro de ese bombardeo se encuentra la realidad de que, no es que lleguemos al fin del mundo, pero es que las cosas las hemos hecho mal desde que esa cosa que tan malamente le llamaron civilización dejó sus primeras marcas. Si tú eres de los que cree esa cosa de que el mundo está peor que antes, pregúntate si esa percepción no se debe al mismo bombardeo de información más que a la realidad de que hemos sido siempre tan violentos como amorosos y las dos cosas han ido siempre a la par. Si no me crees, ve y lee La Íliada para que te enteres o recuerdes que había guerras sangrientas desde los griegos, donde los carruajes patinaban en escombros de seres humanos desmembrados y los baches rellenados por su sangre. Lee cualquier tragedia griega, donde hijos se clavaban a su mai y luego se sacaban los ojos. ¡Qué carajos! Lee La Biblia misma, donde no solo se masacran al “hijo de dios” (tremendos valores familiares en el librito ese), pero donde el mismo dios mandaba a masacrar razas enteras, haciendo hincapié en mujeres y niños (para que no se reproduzcan). Recuerden la guerra milenaria de las cruzadas donde miles de humanos se masacraban por la religión, o las cacerías de brujas donde gente era acusada de serlo y eran enviadas a la hoguera. Recuerden el famoso holocausto, la guerra civil española y la bomba nuclear en Japón, donde millones murieron sin razón aparente, y sí, millones de inocentes: niños, madres, padres….no fue hasta Vietnam que empezaron a salir nuestros horrores como humanos y la mal llamada civilización en la comodidad de nuestra sala, y desde entonces, a muchos les gusta decir que esto de va de mal en peor.
Y no es que yo sea de los que diga que la tecnología, desde la TV hasta el media interactivo, nos va a liberar de algo y nos va a salvar como en novela de ciencia ficción. Al contrario, creo que nos incapacita en cierto punto, al ser bombardeados de tanta información. De hecho, ya la acción (el hacer algo) parece lejana, tan lejana como Homero, y es más fácil decir que el fin se acerca y no hay nada más que hacer gracias a eso (y por eso).
Sin embargo, dentro de eso, nos olvidamos que dentro de nuestra grotesca naturaleza y lo mal que hemos dejado al mundo por salvar el capricho de dos o tres millonarios. No se trata de algo nuevo sino de que ahora muchos sabemos de ello, cosa que antes, a menos que pudieras leer (cosa que todavía muchos no pueden) o ser entretenido en aquellos tiempos de la oralidad occidental, no era posible. Y si bien es cierto que muchos de los que pudieron cambiar algo decidieron no hacerlo, eso no significa que estamos condenados a ello o que no podemos hacer nada, o todas esas changerías del fin del mundo. Sí, el fin del mundo llegará en algún momento, pero no porque nadie viene, sino porque el planeta en que estamos tiene fecha de expiración y, o llegamos a ella, o la adelantamos, si es que nos conformamos con decir que esto está jodio.
No vivamos en un pasado que no existe ni existió. Siempre hemos sido así de dañinos, no solo para nosotros mismos como seres humanos, sino para todo ser vivo en el planeta y para el planeta mismo. Sin embargo, gracias a que muchos se dieron cuenta de ello y pusieron su grano de arena, hoy tenemos derechos civiles, negros mano a mano con blancos, presidentes aborígenes, mujeres presidentas y jefas de familia, matrimonios de personas del mismo sexo porque se aman, niños adoptados, reciclaje, productos orgánicos, y así, muchas cosas que apenas 50 años atrás no existían. Gente, hace menos de cien años la gente moría en el trabajo y no tenían compensación alguna, no habían derecho de vacaciones, no había mínimo de edad para explotar a niños. Y no digo que estas cosas no sigan pasando aun en algunas regiones del mundo, pero antes ocurría en todas. Así que, las cosas no están más jodidas que nunca, estuvieron jodidas siempre y hemos logrado ciertos avances poco a poco. Claro, lo que nos parece tan horroroso es señal de que el mundo sigue igual, dirigido por unos pocos y los demás a consumir. Pero dentro de eso hay pequeños huecos por donde empezar a cambiar las cosas para que vayamos mejorando todo, antes de que, como les encanta decir, el mundo se acabe de joder. Nada de esto cambia la realidad de que los recursos se estén acabando, pero sí podemos cambiar la realidad de que eso finalmente suceda.
Y muchos pensarán, ¿qué carajo puedo hacer yo? Claro, es un mundo tan grande que qué carajos. Pero uno hace lo que puede, desde repartir papeles, pasar info en Feisbuk, ser más activo en la comunidad, o simplemente tratando de no seguir jodiendo la cosa, de buscar más información, de leer al respecto y pasar la voz sobre las desigualdades e injusticias que todavía nos aquejan, o sea, de poder de tu parte, con eso, ya se está logrando un avance. Los cambios pueden ser pequeños, o tan pequeños como los que lograron personas como Malcolm X, Luisa Capetillo, o Simón Bolívar, pero siempre tienen sus pequeños efectos que, aunque a veces no los vemos en vida, después de un tiempo los verán otras generaciones. Al final de todo, nuestra vida es solo una cosa insignificante comparado con la historia de todos como parte de la raza humana, y esos pequeños cambios tendrán su efecto, como parte de ese vasto conglomerado de universos. Al final del día, si hay generaciones que gocen de los cambios positivos, como nosotros hoy podemos gozar de los pequeños avances de nuestros antepasados, valió la pena.
Yo me niego a pensar en esos términos porque, entonces, ¿qué tenemos que hacer aquí? ¿Ser juzgados? Y si fuera así, ¿juzgados por qué y de qué? Si nosotros apenas empezamos a meter las patas. Quizás ya las hemos metido bastante pero ni tanto para que sea a nosotros que nos vengan a joder. ¿Qué? ¿Esto está jodido porque tenemos que pagar por una humanidad entera de desastres sin dios algunos que nos ampare? ¡¿En serio?!
Ah no, es que olvidaba que ahora las cosas están más malas. Ahora los tipos matan a su familia, o la misma madre mata a sus hijos y luego intenta quemarse con ellos, y hay guerras macabras por drogas, y robos, sexo infantil, prostitución, incesto, corrupción, imperialismo, asesinatos, violaciones, y la lista no acaba. Y pregunto yo, ¡¿eso es nuevo?! ¡¿Cuándo es que las cosas no han estado así de jodias’?! Déjense de engañar en la melancolía de un pasado que no existió. Si sabemos de tantos abusos y violencia, es porque tenemos más información disponible, tanta, que en EEUU se necesitan varias pantallas para seguir anestesiando a las masas con información. Sin embargo, dentro de ese bombardeo se encuentra la realidad de que, no es que lleguemos al fin del mundo, pero es que las cosas las hemos hecho mal desde que esa cosa que tan malamente le llamaron civilización dejó sus primeras marcas. Si tú eres de los que cree esa cosa de que el mundo está peor que antes, pregúntate si esa percepción no se debe al mismo bombardeo de información más que a la realidad de que hemos sido siempre tan violentos como amorosos y las dos cosas han ido siempre a la par. Si no me crees, ve y lee La Íliada para que te enteres o recuerdes que había guerras sangrientas desde los griegos, donde los carruajes patinaban en escombros de seres humanos desmembrados y los baches rellenados por su sangre. Lee cualquier tragedia griega, donde hijos se clavaban a su mai y luego se sacaban los ojos. ¡Qué carajos! Lee La Biblia misma, donde no solo se masacran al “hijo de dios” (tremendos valores familiares en el librito ese), pero donde el mismo dios mandaba a masacrar razas enteras, haciendo hincapié en mujeres y niños (para que no se reproduzcan). Recuerden la guerra milenaria de las cruzadas donde miles de humanos se masacraban por la religión, o las cacerías de brujas donde gente era acusada de serlo y eran enviadas a la hoguera. Recuerden el famoso holocausto, la guerra civil española y la bomba nuclear en Japón, donde millones murieron sin razón aparente, y sí, millones de inocentes: niños, madres, padres….no fue hasta Vietnam que empezaron a salir nuestros horrores como humanos y la mal llamada civilización en la comodidad de nuestra sala, y desde entonces, a muchos les gusta decir que esto de va de mal en peor.
Y no es que yo sea de los que diga que la tecnología, desde la TV hasta el media interactivo, nos va a liberar de algo y nos va a salvar como en novela de ciencia ficción. Al contrario, creo que nos incapacita en cierto punto, al ser bombardeados de tanta información. De hecho, ya la acción (el hacer algo) parece lejana, tan lejana como Homero, y es más fácil decir que el fin se acerca y no hay nada más que hacer gracias a eso (y por eso).
Sin embargo, dentro de eso, nos olvidamos que dentro de nuestra grotesca naturaleza y lo mal que hemos dejado al mundo por salvar el capricho de dos o tres millonarios. No se trata de algo nuevo sino de que ahora muchos sabemos de ello, cosa que antes, a menos que pudieras leer (cosa que todavía muchos no pueden) o ser entretenido en aquellos tiempos de la oralidad occidental, no era posible. Y si bien es cierto que muchos de los que pudieron cambiar algo decidieron no hacerlo, eso no significa que estamos condenados a ello o que no podemos hacer nada, o todas esas changerías del fin del mundo. Sí, el fin del mundo llegará en algún momento, pero no porque nadie viene, sino porque el planeta en que estamos tiene fecha de expiración y, o llegamos a ella, o la adelantamos, si es que nos conformamos con decir que esto está jodio.
No vivamos en un pasado que no existe ni existió. Siempre hemos sido así de dañinos, no solo para nosotros mismos como seres humanos, sino para todo ser vivo en el planeta y para el planeta mismo. Sin embargo, gracias a que muchos se dieron cuenta de ello y pusieron su grano de arena, hoy tenemos derechos civiles, negros mano a mano con blancos, presidentes aborígenes, mujeres presidentas y jefas de familia, matrimonios de personas del mismo sexo porque se aman, niños adoptados, reciclaje, productos orgánicos, y así, muchas cosas que apenas 50 años atrás no existían. Gente, hace menos de cien años la gente moría en el trabajo y no tenían compensación alguna, no habían derecho de vacaciones, no había mínimo de edad para explotar a niños. Y no digo que estas cosas no sigan pasando aun en algunas regiones del mundo, pero antes ocurría en todas. Así que, las cosas no están más jodidas que nunca, estuvieron jodidas siempre y hemos logrado ciertos avances poco a poco. Claro, lo que nos parece tan horroroso es señal de que el mundo sigue igual, dirigido por unos pocos y los demás a consumir. Pero dentro de eso hay pequeños huecos por donde empezar a cambiar las cosas para que vayamos mejorando todo, antes de que, como les encanta decir, el mundo se acabe de joder. Nada de esto cambia la realidad de que los recursos se estén acabando, pero sí podemos cambiar la realidad de que eso finalmente suceda.
Y muchos pensarán, ¿qué carajo puedo hacer yo? Claro, es un mundo tan grande que qué carajos. Pero uno hace lo que puede, desde repartir papeles, pasar info en Feisbuk, ser más activo en la comunidad, o simplemente tratando de no seguir jodiendo la cosa, de buscar más información, de leer al respecto y pasar la voz sobre las desigualdades e injusticias que todavía nos aquejan, o sea, de poder de tu parte, con eso, ya se está logrando un avance. Los cambios pueden ser pequeños, o tan pequeños como los que lograron personas como Malcolm X, Luisa Capetillo, o Simón Bolívar, pero siempre tienen sus pequeños efectos que, aunque a veces no los vemos en vida, después de un tiempo los verán otras generaciones. Al final de todo, nuestra vida es solo una cosa insignificante comparado con la historia de todos como parte de la raza humana, y esos pequeños cambios tendrán su efecto, como parte de ese vasto conglomerado de universos. Al final del día, si hay generaciones que gocen de los cambios positivos, como nosotros hoy podemos gozar de los pequeños avances de nuestros antepasados, valió la pena.
Sunday, September 19, 2010
Verano en Puerto Rico
Ha llegado el momento de sentarme en la silla y recordar las anécdotas de lo que podemos considerar como mi estadía más larga en la isla desde que me fui. Es que hay que tener un poco de separación del evento, repasar todo en la mente (tipo mini-peliculita).
Todos saben que la isla me recibió a palos, o sea, no a mí, pero el llamado motín del capitolio fue el día después que llegué a la isla. Tremenda bienvenida. La cosa es que yo ni sabía que había una manifestación así que me fui a la playa. Fue en el Minillas, escuchando la radio, que me enteré que algo había pasado, cuando una becerra hablaba de lo decepcionada que estaba con Rivera Schatz después de darle el voto y yo me preguntaba en qué planeta vivía ella si no esperaba que el fascista ese actuara como siempre ha actuado, a yeguada limpia. Fue cuando vi la tele que me dí cuenta de lo que había pasado, y cuando vi a Verónica (hola Verooo) coger palo (lo que nunca me hubiera imaginado!). No voy a entrar en detalles sobre el incidente porque lo hice en su momento. Sin embargo, subrayo que lo peor del suceso no fue lo que pasó, sino el que mucha gente lo justificara y se creyera las mentiras irrespetuosas del gobierno, desde el gobernador para abajo. Tanto que los boricuas se creen la gran cosa y estar por encima de las repúblicas latinas, y aplauden o se resignan a eventos cuasi-fascistas en su propia tierra, que de democráticos nada tienen. De igual forma, en muchos otros países latinos no dejan que el gobierno les de unas excusas tan descaradas y la mayoría se las crea. Esas pendejaces de que tenían piedras en las mochilas y “se iban a apoderar del capitolio” solo se las cree la persona que está ajena a todo y quiere estarlo, y esa persona es fácil de coger de pendejo. Mientras tanto, “al pueblo” se le falta al respeto con tal desfachatez mientras la mayoría no dice nada y no se vuelca a la calle a reclamar sus derechos de expresión como se supone pase en una verdadera democracia.
Eso sí, para comprarse las donitas hacen hasta lo impensable. Y es que digo impensable porque ni yo hubiera pensado que el tercer Krispy Kreme iba a tener una fila de carros a toda hora y un toldo para la otra fila de reces que iban a comprarlas masivamente a pie (para mí era el segundo, pero Franchesca me aclaró que el segundo está en Guaynabo, y también tiene filas kilométricas). Ya algunos sabrán que bajé la ventana y les grité eso mismo… ¡que eran y son una reses (siguiendo al rebaño)! Repasemos: hay un crimen raspante que sume a la isla en un caos social, hay un 17% de desempleados gracias al hijo de puta que se hace llamar gobernador y que acanalladamente se refugia en la mayoría de votos que sacó para aplastar a la disidencia, hay planes para seguir destruyendo los recursos naturales como el karso y de seguir desarrollando la isla para elites extranjeras (Ceiba, el viejo San Juan) y pocos se levantan a protestar, a hacer demostraciones masivas que representen el descontento colectivo, solo esperan a las elecciones para seguir en las misma disyuntiva partidista entre azules y rojos, rojos y azules, como si hubiera gran diferencia entre las políticas de ambos (solo de estilos). ¡Pero para las donas sí tienen tiempo de hacer filas y comprarlas por docenas! ¡Malditos sean! ¡Espero que se atraganten con las putas donas o las arterias se les tapen con ellas!
Pero de eso se trata la asimilación. No es casualidad que el gobe dé sus mensajes con la bandera gringa detrás de él. Tampoco es casualidad que haya un “Guaynabo City”, o la nueva, el SJPD. ¿Me preguntas qué carajo es eso? Pues yo todavía no estoy muy seguro. Si sé que se trata de la policía en San Juan, que ahora quiere imitar a la fuerza de Nueva York, conocida por sus ciclas y la serie televisiva como NYPD. Sí, ahora tenemos nuestro SJPD, y tenemos donitas por doquier, cadenas extranjeras que nos venden la peor calidad de comida, y somos tan agradecidos por ello. Lo que me recuerda un comentario en la radio que hablaba sobre el tema de la presidencia en Haití y la fallida candidatura de Wyclef Jean. En el medio del meollo, la locutora comienza una oración que decía “es que tú sabes que en los países desarrollados hay un alto problema con la corrupción gubernamental…” a lo que resistí a seguir escuchando, si la premisa de la oración ya estaba mal, para qué seguir escuchándola, pero reafirmaba, de nuevo, esa falsa idea del boricua que cree 1. no es un país subdesarrollado y 2.! No estuviera sumido en la corrupción! Tenemos una versión de nuestra realidad bien jodía (o fucked up, para seguir con esta lógica que con Facebook se hace peor) si decimos una oración como esa sin estallar en una carcajada más tétrica que cómica, y no me vengan con cuentos chinos de los países que están peor que nosotros, Puerto Rico está en el segundo lugar de peor crecimiento económico por un tiempo y no se debe simplemente a los cambios de partido. Y de la corrupción, sin irnos a ejemplos pasados, podemos rápidamente pensar en cierto presidente del senado que persigue una investigación de otro legislador de su partido, los ejemplos van y no paran así que no sé de qué carajo hablaba la locutora, y tienen menos que ver con partidos que con un modelo político implantado e importado (como todo, ¿no?) que institucionaliza a la corrupción como modelo de vender candidatos, porque al final del día, la mal llamada democracia lo que hace es vender candidatos para que la gente los consuma, la verdadera política está debajo de la alfombra y la implantan dos o tres de rostros grandes e invisibles.
De la isla eso es lo más que duele ver en cada regreso, y el que la gente siga encerrada en la disyuntiva de rojos, azules y verdes, que en el 2012 gana éste u aquel, en lugar de formar propuestas ciudadanas que en realidad logren un cambio de la debacle económica y social en la que está sumergida, y no señor gobe, ese caos no es por culpa de dos o tres gatos socialistas. ¡Si uno tuviera baldes de agua fría para despertar a los millones que piensan así y que no dejan a nadie cambiar nada, o entrarles a galletas hasta que despierten! Pero con tanto calor, ¿que agua fría ni que ocho cuartos se puede conseguir?
Lo otro sigue igual. Nos dan mala calidad de comida pero se cocina rico. Así que comí hasta engordarme como unas 10 libras: lechón, quesitos, mayorcas, ternera, carne guisada, corn beef, sardinas, mofongos, tostones, amarillos, pasteles de yuca, yuca, aguacates, ostiones, empanadillas de mariscos y paro porque me está dando hambre. Mmm…yuca.
Dos meses en la isla y con todo eso hubo gente que no vi, gente que ni se dignó a llamar, gente que se quedó con la ganas de volvernos a encontrar...y mucha gente que no está ya. De hecho, la mayor parte de julio la pasé en casa del viejo o de mi hermana ya que muchos se han ido…otra cosa que nos une con la realidad del caribe y no con los del norte. Estamos regaos’ por el mundo, desde Estados Unidos hasta el país porteño, y de la antigua metrópolis de Madrid (que mucho celebró el boricua cuando ganaron y yo a los españoles no les debo otra cosa que el idioma ¡y ni siquiera! ¡Que ellos hablan otra vaina ahí!)…pero la mayoría de los que se quedan siguen soñando con el mejor de dos mundos y la asimilación, con el SJPD y el progreso definido por centros comerciales y autopistas, lo que me niega el pasaporte de regreso a la isla y me deja como turista y diciéndoles “no te peques que no es bolero”. ¡Lamentando siempre que las carnes no lleguen a ese momento de ebullición donde hay que pegarse y hacer algo! Mientras esperamos se nos va la vida, a la isla por allá, y a los hijos bastardos del mundo por en algún lugar perdido.
Todos saben que la isla me recibió a palos, o sea, no a mí, pero el llamado motín del capitolio fue el día después que llegué a la isla. Tremenda bienvenida. La cosa es que yo ni sabía que había una manifestación así que me fui a la playa. Fue en el Minillas, escuchando la radio, que me enteré que algo había pasado, cuando una becerra hablaba de lo decepcionada que estaba con Rivera Schatz después de darle el voto y yo me preguntaba en qué planeta vivía ella si no esperaba que el fascista ese actuara como siempre ha actuado, a yeguada limpia. Fue cuando vi la tele que me dí cuenta de lo que había pasado, y cuando vi a Verónica (hola Verooo) coger palo (lo que nunca me hubiera imaginado!). No voy a entrar en detalles sobre el incidente porque lo hice en su momento. Sin embargo, subrayo que lo peor del suceso no fue lo que pasó, sino el que mucha gente lo justificara y se creyera las mentiras irrespetuosas del gobierno, desde el gobernador para abajo. Tanto que los boricuas se creen la gran cosa y estar por encima de las repúblicas latinas, y aplauden o se resignan a eventos cuasi-fascistas en su propia tierra, que de democráticos nada tienen. De igual forma, en muchos otros países latinos no dejan que el gobierno les de unas excusas tan descaradas y la mayoría se las crea. Esas pendejaces de que tenían piedras en las mochilas y “se iban a apoderar del capitolio” solo se las cree la persona que está ajena a todo y quiere estarlo, y esa persona es fácil de coger de pendejo. Mientras tanto, “al pueblo” se le falta al respeto con tal desfachatez mientras la mayoría no dice nada y no se vuelca a la calle a reclamar sus derechos de expresión como se supone pase en una verdadera democracia.
Eso sí, para comprarse las donitas hacen hasta lo impensable. Y es que digo impensable porque ni yo hubiera pensado que el tercer Krispy Kreme iba a tener una fila de carros a toda hora y un toldo para la otra fila de reces que iban a comprarlas masivamente a pie (para mí era el segundo, pero Franchesca me aclaró que el segundo está en Guaynabo, y también tiene filas kilométricas). Ya algunos sabrán que bajé la ventana y les grité eso mismo… ¡que eran y son una reses (siguiendo al rebaño)! Repasemos: hay un crimen raspante que sume a la isla en un caos social, hay un 17% de desempleados gracias al hijo de puta que se hace llamar gobernador y que acanalladamente se refugia en la mayoría de votos que sacó para aplastar a la disidencia, hay planes para seguir destruyendo los recursos naturales como el karso y de seguir desarrollando la isla para elites extranjeras (Ceiba, el viejo San Juan) y pocos se levantan a protestar, a hacer demostraciones masivas que representen el descontento colectivo, solo esperan a las elecciones para seguir en las misma disyuntiva partidista entre azules y rojos, rojos y azules, como si hubiera gran diferencia entre las políticas de ambos (solo de estilos). ¡Pero para las donas sí tienen tiempo de hacer filas y comprarlas por docenas! ¡Malditos sean! ¡Espero que se atraganten con las putas donas o las arterias se les tapen con ellas!
Pero de eso se trata la asimilación. No es casualidad que el gobe dé sus mensajes con la bandera gringa detrás de él. Tampoco es casualidad que haya un “Guaynabo City”, o la nueva, el SJPD. ¿Me preguntas qué carajo es eso? Pues yo todavía no estoy muy seguro. Si sé que se trata de la policía en San Juan, que ahora quiere imitar a la fuerza de Nueva York, conocida por sus ciclas y la serie televisiva como NYPD. Sí, ahora tenemos nuestro SJPD, y tenemos donitas por doquier, cadenas extranjeras que nos venden la peor calidad de comida, y somos tan agradecidos por ello. Lo que me recuerda un comentario en la radio que hablaba sobre el tema de la presidencia en Haití y la fallida candidatura de Wyclef Jean. En el medio del meollo, la locutora comienza una oración que decía “es que tú sabes que en los países desarrollados hay un alto problema con la corrupción gubernamental…” a lo que resistí a seguir escuchando, si la premisa de la oración ya estaba mal, para qué seguir escuchándola, pero reafirmaba, de nuevo, esa falsa idea del boricua que cree 1. no es un país subdesarrollado y 2.! No estuviera sumido en la corrupción! Tenemos una versión de nuestra realidad bien jodía (o fucked up, para seguir con esta lógica que con Facebook se hace peor) si decimos una oración como esa sin estallar en una carcajada más tétrica que cómica, y no me vengan con cuentos chinos de los países que están peor que nosotros, Puerto Rico está en el segundo lugar de peor crecimiento económico por un tiempo y no se debe simplemente a los cambios de partido. Y de la corrupción, sin irnos a ejemplos pasados, podemos rápidamente pensar en cierto presidente del senado que persigue una investigación de otro legislador de su partido, los ejemplos van y no paran así que no sé de qué carajo hablaba la locutora, y tienen menos que ver con partidos que con un modelo político implantado e importado (como todo, ¿no?) que institucionaliza a la corrupción como modelo de vender candidatos, porque al final del día, la mal llamada democracia lo que hace es vender candidatos para que la gente los consuma, la verdadera política está debajo de la alfombra y la implantan dos o tres de rostros grandes e invisibles.
De la isla eso es lo más que duele ver en cada regreso, y el que la gente siga encerrada en la disyuntiva de rojos, azules y verdes, que en el 2012 gana éste u aquel, en lugar de formar propuestas ciudadanas que en realidad logren un cambio de la debacle económica y social en la que está sumergida, y no señor gobe, ese caos no es por culpa de dos o tres gatos socialistas. ¡Si uno tuviera baldes de agua fría para despertar a los millones que piensan así y que no dejan a nadie cambiar nada, o entrarles a galletas hasta que despierten! Pero con tanto calor, ¿que agua fría ni que ocho cuartos se puede conseguir?
Lo otro sigue igual. Nos dan mala calidad de comida pero se cocina rico. Así que comí hasta engordarme como unas 10 libras: lechón, quesitos, mayorcas, ternera, carne guisada, corn beef, sardinas, mofongos, tostones, amarillos, pasteles de yuca, yuca, aguacates, ostiones, empanadillas de mariscos y paro porque me está dando hambre. Mmm…yuca.
Dos meses en la isla y con todo eso hubo gente que no vi, gente que ni se dignó a llamar, gente que se quedó con la ganas de volvernos a encontrar...y mucha gente que no está ya. De hecho, la mayor parte de julio la pasé en casa del viejo o de mi hermana ya que muchos se han ido…otra cosa que nos une con la realidad del caribe y no con los del norte. Estamos regaos’ por el mundo, desde Estados Unidos hasta el país porteño, y de la antigua metrópolis de Madrid (que mucho celebró el boricua cuando ganaron y yo a los españoles no les debo otra cosa que el idioma ¡y ni siquiera! ¡Que ellos hablan otra vaina ahí!)…pero la mayoría de los que se quedan siguen soñando con el mejor de dos mundos y la asimilación, con el SJPD y el progreso definido por centros comerciales y autopistas, lo que me niega el pasaporte de regreso a la isla y me deja como turista y diciéndoles “no te peques que no es bolero”. ¡Lamentando siempre que las carnes no lleguen a ese momento de ebullición donde hay que pegarse y hacer algo! Mientras esperamos se nos va la vida, a la isla por allá, y a los hijos bastardos del mundo por en algún lugar perdido.
Monday, September 13, 2010
La luna helada 2
Allí
Allí
Fría y seca
Quedó la mirada congelada
Por desobedecer al viento
Y enamorarse de la luna helada.
S.G.
Allí
Fría y seca
Quedó la mirada congelada
Por desobedecer al viento
Y enamorarse de la luna helada.
S.G.
Tuesday, September 07, 2010
Para los que dicen que "no les interesa la politica"
“El peor analfabeto es el analfabeto político. Él no ve, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. Él no sabe que el costo de la harina, del alquiler, del calzado o del remedio, dependen de decisiones políticas. El analfabeto político es tan burro que se enorgullece e hincha el pecho diciendo que odia la política. No sabe, el muy imbécil, que de su ignorancia política nace la prostituta, el menor abandonado, el asaltante y el peor de los bandidos, que es el político corrupto, locayo de las empresas nacionales y multinacionales.”
-Bertolt Brecht
-Bertolt Brecht
Tuesday, August 31, 2010
Nuevas voces, viejas dictaduras
De un pájaro las dos alas….quizás para los cubanos esta idea ya esté hueca, al igual que para muchos puertorriqueños sea un escribillo de canción de bomba, tan irreal y borrosa como la noche misma. A los primeros poco le importan las conexiones entre los dos extremos de las islas mayores, y los que conocen el escribillo se lo adjudican a José Martí. Los segundos juran que están mejores que los cubanos con aquella mentada dictadura del demonio mismo. Sin embargo, entre el desconocimiento y la arrogancia, aquella idea de Rodríguez de Tío sigue rimbombante, y no solo poéticamente, sino en un marco en el que, aun cuando las dos islas parecieron tomar extremos opuestos, parecen volverse a encontrar al final de esa borrachera de la guerra fría. Y no es que la guerra fría haya terminado (hasta el gobernador de Puerto Rico se expresa como fascista anti-comunista, o sea, propulsor de un estado totalitario en contra de cualquier indicio de comunismo, fascista, calco super charro de un Romero Barceló o Nixon, para irme light), pero ahora la dinámica del mercado global ha cambiado y solo se vuelve polarizante en el momento de engañar a las masas sobre sus claras tendencias de seguir defendiendo a unos pocos y asfixiando al resto. Mas dentro de las complejidades de eso que llaman global, las dos islas se han reencontrado cara a cara, como si se miraran dentro del reflejo de un espejo, como las idénticas banderas invertidas. No es casualidad que la bloguera Yoani Sánchez, en su ensayo publicado el 5 de agosto de 2010 en El Nuevo Día, mencione una juventud cubana con ansias de una nueva voz, de una nueva forma de administrase, que no significa abrazarse al neo-liberalismo (tendencia que al parecer empieza a considerar el gobierno de los Castro), pero sí de cambiar de forma sustantiva el cómo se hacen las cosas.
En Puerto Rico pasa de forma similar. De hecho, el grupo que dirigió la última huelga y que sigue atento, no solo a los eventos que transcurren en el país, pero al futuro de la universidad del pueblo, es también la esperanza de una nueva voz que no se aferra a la misma mierda de siempre, que están cansados de la forma en que se han hecho las cosas, y están buscando nuevas formas de manejar al país. Esto, ante un gobierno cada vez más totalitario, corrupto y abusivo. De hecho, en la huelga de julio 18 vi una pancarta que leía una realidad interesante y que subrayaba el vínculo entre las dos islas: Cuba dictadura de los pobres, Puerto Rico dictadura de los ricos. …o para los ricos, digo yo. Y es hora de acabar con eso….bueno, pasada la hora.
Es por eso que las nuevas voces en ambas islas, cansadas de la opresión gubernamental, claman por una nueva forma integradora de hacer las cosas, en lugar de las viejas formulas excluyentes, las mismas retóricas, el mismo sandungueo’...y para eso se han abrazado al nuevo contexto político mundial y a la tecnología como parte de la forma de expresión y como arma de lucha (Dos ejemplos fugaces: Radio Huelga y Sánchez misma, entre muchos más ejemplos a considerar). Ya eso de por sí es un avance.
Cuan realista o cuan lejos pueda llegar esa insatisfacción y esa acción ante la vieja guardia está por verse. Cuan cerca esté el tedio para rendirnos y sucumbir a lo mismo, o cuánto la vieja guardia pese sobre esas nuevas voces a resignarse a lo que hay (son especialistas en eso) es también una amenaza real, histórica y latente. Nos toca seguir pasando la idea de no conformarnos, de pensar en nuevas formas de hacer y deshacer, de comunicarnos, de hacer una realidad social en la que cada uno forme parte. Nos toca a nosotros no solo creer en la esperanza de esas nuevas voces, sino de mantenerlas vivas y poner nuestro grano de arena para que finalmente logremos enderezar a las dos alas y hacerlas tierras de la innovación, la conciencia, la lucha, y más allá de eso, tierras en donde cada voz cuente, no solo las de aquellos que están en el poder.
En Puerto Rico pasa de forma similar. De hecho, el grupo que dirigió la última huelga y que sigue atento, no solo a los eventos que transcurren en el país, pero al futuro de la universidad del pueblo, es también la esperanza de una nueva voz que no se aferra a la misma mierda de siempre, que están cansados de la forma en que se han hecho las cosas, y están buscando nuevas formas de manejar al país. Esto, ante un gobierno cada vez más totalitario, corrupto y abusivo. De hecho, en la huelga de julio 18 vi una pancarta que leía una realidad interesante y que subrayaba el vínculo entre las dos islas: Cuba dictadura de los pobres, Puerto Rico dictadura de los ricos. …o para los ricos, digo yo. Y es hora de acabar con eso….bueno, pasada la hora.
Es por eso que las nuevas voces en ambas islas, cansadas de la opresión gubernamental, claman por una nueva forma integradora de hacer las cosas, en lugar de las viejas formulas excluyentes, las mismas retóricas, el mismo sandungueo’...y para eso se han abrazado al nuevo contexto político mundial y a la tecnología como parte de la forma de expresión y como arma de lucha (Dos ejemplos fugaces: Radio Huelga y Sánchez misma, entre muchos más ejemplos a considerar). Ya eso de por sí es un avance.
Cuan realista o cuan lejos pueda llegar esa insatisfacción y esa acción ante la vieja guardia está por verse. Cuan cerca esté el tedio para rendirnos y sucumbir a lo mismo, o cuánto la vieja guardia pese sobre esas nuevas voces a resignarse a lo que hay (son especialistas en eso) es también una amenaza real, histórica y latente. Nos toca seguir pasando la idea de no conformarnos, de pensar en nuevas formas de hacer y deshacer, de comunicarnos, de hacer una realidad social en la que cada uno forme parte. Nos toca a nosotros no solo creer en la esperanza de esas nuevas voces, sino de mantenerlas vivas y poner nuestro grano de arena para que finalmente logremos enderezar a las dos alas y hacerlas tierras de la innovación, la conciencia, la lucha, y más allá de eso, tierras en donde cada voz cuente, no solo las de aquellos que están en el poder.
Monday, August 16, 2010
suena familiar...
“La escritura necesita dos elementos fundamentales: el primero es la experimentación y el segundo el riesgo. No la prisa.”
-Carlos Vázquez
-Carlos Vázquez
Sunday, August 08, 2010
on paper...
“It is possible to be wiser on the page than you are in life? I’m hoping so.”
-Walter Kirn
(Up in the Air, Anchor, 67)
-Walter Kirn
(Up in the Air, Anchor, 67)
Monday, August 02, 2010
Anarquistas wannnabí
Estas son apenas mis pequeñas impresiones sobre los-ehem!-anarquistas en la isla. Y es que hace unas semanas el grupo formó parte de la marcha en contra de la política gubernamental y salió desde la UIPI, al igual que yo -igualitito a mí- para citar una canción de Victor Manuelle. Los mentados “anarquistas” dejaron las pistas de su presencia a lo largo del trayecto, cual migajas de pan en "Hansel y Gretel", pero sin pájaro alguno capaz de comerse el rastro. Vimos sus primeros mensajes en un Walgreens, junto al gerente encabronao’ por demás. Entre los mensajes dejados se clamaba por farmacias locales en lugar de cadenas. Mas luego vimos mensajes en contra del gobierno en locales pequeños que para nada eran cadenas, u en oficinas gubernamentales ajenas a la protesta (no forman parte de la administración o sus atropellados intentos de gobernar). Cada vez que pasábamos los mensajes, se notaba que estaban recién hechos ya que todavía merodeaba en el aire el olor a pintura de spray. Finalmente nos movimos de sitio en la marcha y los vimos. Enmascarados, pintando cuanta mierda se les ocurría. Desde invitaciones a la “revolución”, hasta invitaciones a muerte.
Si esos son los anarquistas en esta isla, mucho dejan que desear, cayendo en la representación caricaturesca y popular del “anarquista”, que suena más a adolescente ponko que a una persona con cierta ideología. Contrario a lo que se cree, son muchos los tipos de anarquismo, de los cuales, el que me simpatiza es el proyecto realizado en España durante la década del 30, antes de Franco. En ese proyecto, el anarquismo no era sinónimo de caos, sino de un rechazo a la estructura gubernamental como ente fundador y definitorio de la sociedad. En lugar de esa estructura, la misma comunidad se repartía las funciones a ejecutar dentro de ella, sin jerarquías o posiciones. Así mismo hay ciertas variaciones de este proyecto, del cual yo mismo no estoy al corriente de todas. Sin embargo, a juzgar por los actos de los llamados anarquistas en la marcha, ellos prefieren la definición popular de anarquismo, donde la ausencia de gobierno es sinónimo de caos. Es esa vertiente del anarquismo la que se usa para atemorizar a la gente en contra del proyecto y a defender las decisiones que hacen los gobiernos en nombre de la “ley”, el “control” y el “orden”.
Pero al parecer el grupo vandalizador no tiene estas consideraciones en mente. Tampoco consideran que la libertad de expresión no es una mera libre expresión sin responsabilidad sobre los actos o sin tener en cuenta al otro. Entiendo que si el daño a la propiedad es a una empresa grande como Walgreens, no se afecta a nadie (más allá del mal rato del gerente y el tener que sacar del pety-cash para volver a pintar la dichosa pared). Sin embargo, ¿vandalizar casas vacías? ¿a las oficinas del AELA? Por otro lado, al parecer los mentados “anarquistas” no entienden que tales actos dan las herramientas al gobierno para pormenorizar las manifestaciones en su contra y apelar al status quo a repelerla(s). Es fácil para los gobernantes, a los que se les quiere ejercer presión mediante la manifestación pública, decir entonces que “ese grupo” encapuchado lo que quiere es “sembrar el caos” y “no lo vamos a permitir”. Es fácil decir que son gente que no obedece la ley y la democracia, palabras claves para apelar a sectores más amplios.
No sé, quizás es que ellos no se han dado cuenta que para lograr propuestas que sobrepasen el conformismo gubernamental hay que apelar a la masa, al “pueblo”, conciliar en lugar de alienarse, formar un grupo tan grande que en realidad represente una amenaza al gobierno. Quizás ni siquiera llegan a tales reflexiones en nombre del “anarquismo” y de su “libertad de expresión”. Y, ¿de qué vale la libre expresión cuando no se sabe utilizar? Si estas preguntas no han pasado por su mente, como parece el caso, huele entonces a anarquismo adolescente, de ese del que todos pasamos alguna vez en nuestra vida y cuyo norte es rebelarse por joder, sin razón y siguiendo solo impulsos pasionales. De ser así, no deberían llamarse anarquistas y sí adolescentes, rebeldes sin causa, sentirse cool porque pintaron sus mensajes “rabiosos” en las paredes, y hasta conseguir historias para llevarse amantes anónimos a la cama. De anarquistas nada, porque el anarquismo es un proyecto político y lo de ellos es un descojón o una rabieta que jode al intento realmente político por retar a un gobierno que ha dejado de representar a su pueblo. O quizás es que desde donde yo estaba parado no se podía definir con claridad su patético proyecto político, tan tenue como la rebeldía de una canción de Slipknot. Quizás si dejaran de actuar tras bastidores y se unieran en voz unísona nos podrían explicar ese proyecto político y cómo sus mensajes de graffiti adelantaban su causa. Mientras eso pase les llamo anarquistas wanabí, y todavía estoy esperando por la madre de los niños para que los vayan a buscar.
Si esos son los anarquistas en esta isla, mucho dejan que desear, cayendo en la representación caricaturesca y popular del “anarquista”, que suena más a adolescente ponko que a una persona con cierta ideología. Contrario a lo que se cree, son muchos los tipos de anarquismo, de los cuales, el que me simpatiza es el proyecto realizado en España durante la década del 30, antes de Franco. En ese proyecto, el anarquismo no era sinónimo de caos, sino de un rechazo a la estructura gubernamental como ente fundador y definitorio de la sociedad. En lugar de esa estructura, la misma comunidad se repartía las funciones a ejecutar dentro de ella, sin jerarquías o posiciones. Así mismo hay ciertas variaciones de este proyecto, del cual yo mismo no estoy al corriente de todas. Sin embargo, a juzgar por los actos de los llamados anarquistas en la marcha, ellos prefieren la definición popular de anarquismo, donde la ausencia de gobierno es sinónimo de caos. Es esa vertiente del anarquismo la que se usa para atemorizar a la gente en contra del proyecto y a defender las decisiones que hacen los gobiernos en nombre de la “ley”, el “control” y el “orden”.
Pero al parecer el grupo vandalizador no tiene estas consideraciones en mente. Tampoco consideran que la libertad de expresión no es una mera libre expresión sin responsabilidad sobre los actos o sin tener en cuenta al otro. Entiendo que si el daño a la propiedad es a una empresa grande como Walgreens, no se afecta a nadie (más allá del mal rato del gerente y el tener que sacar del pety-cash para volver a pintar la dichosa pared). Sin embargo, ¿vandalizar casas vacías? ¿a las oficinas del AELA? Por otro lado, al parecer los mentados “anarquistas” no entienden que tales actos dan las herramientas al gobierno para pormenorizar las manifestaciones en su contra y apelar al status quo a repelerla(s). Es fácil para los gobernantes, a los que se les quiere ejercer presión mediante la manifestación pública, decir entonces que “ese grupo” encapuchado lo que quiere es “sembrar el caos” y “no lo vamos a permitir”. Es fácil decir que son gente que no obedece la ley y la democracia, palabras claves para apelar a sectores más amplios.
No sé, quizás es que ellos no se han dado cuenta que para lograr propuestas que sobrepasen el conformismo gubernamental hay que apelar a la masa, al “pueblo”, conciliar en lugar de alienarse, formar un grupo tan grande que en realidad represente una amenaza al gobierno. Quizás ni siquiera llegan a tales reflexiones en nombre del “anarquismo” y de su “libertad de expresión”. Y, ¿de qué vale la libre expresión cuando no se sabe utilizar? Si estas preguntas no han pasado por su mente, como parece el caso, huele entonces a anarquismo adolescente, de ese del que todos pasamos alguna vez en nuestra vida y cuyo norte es rebelarse por joder, sin razón y siguiendo solo impulsos pasionales. De ser así, no deberían llamarse anarquistas y sí adolescentes, rebeldes sin causa, sentirse cool porque pintaron sus mensajes “rabiosos” en las paredes, y hasta conseguir historias para llevarse amantes anónimos a la cama. De anarquistas nada, porque el anarquismo es un proyecto político y lo de ellos es un descojón o una rabieta que jode al intento realmente político por retar a un gobierno que ha dejado de representar a su pueblo. O quizás es que desde donde yo estaba parado no se podía definir con claridad su patético proyecto político, tan tenue como la rebeldía de una canción de Slipknot. Quizás si dejaran de actuar tras bastidores y se unieran en voz unísona nos podrían explicar ese proyecto político y cómo sus mensajes de graffiti adelantaban su causa. Mientras eso pase les llamo anarquistas wanabí, y todavía estoy esperando por la madre de los niños para que los vayan a buscar.
Monday, July 26, 2010
La loca “cómica”
La verdad es que en Puerto Rico las cosas se dan más lento que una tortuga. No todas, pero la gran mayoría. Y no es que eso no pase en otros lados, ya que a la gente, por lo general, no le gustan los cambios. De hecho, yo soy de los que cree en poner un grano de arena y esperar que se den los cambios que queremos para las generaciones venideras, aun cuando nosotros no las veamos en vida. Así es que se han dado los grandes cambios de justicia social en la historia. La independencia de los pueblos (en general y no la de uno en específico), el sufragio femenino y el cambio del rol de la mujer (que todavía necesita seguir cambiando hasta lograr la igualdad), la abolición de la esclavitud y el fin de la segregación, el reconocimiento de los derechos humanos de los homosexuales (que también tiene un largo trecho por recorrer), son algunos ejemplos de cambios que se han dado poco a poco y con mucha sangre de por medio, pero gracias a esas luchas hoy hay un presidente mulato en Estados Unidos, matrimonio homosexual legal en países como Argentina y España, y así, muchos otros logros que, contrariando a los gritos de protesta por parte de los sectores conservadores, han logrado que seamos más libres, más justos, y más respetuosos de la diferencia (o tratemos de serlo).
Por esto fue con sorpresa y desagrado que mientras cambiaba canales de televisión los otros días, me topé con un personaje que, aun sin saber su nombre, conozco su ofensa. Era una “loca”, como le dicen acá a los homosexuales, entre broma y nombre que raya en lo peyorativo. El personaje tenía un pañuelo en la cabeza como si fuera Minga o Petraca, chanclas, una camiseta hecha un nudo y que subía más allá de la barriga, y unos pantalones cortos. Sus gestos era exageradamente amanerados, y era en eso que pretendía provocar risa. Hacía cosas como pegarles las nalgas a un “bandido” que los asaltaba, y darle bofetadas mientras gritaba “¡atrevido!” (en voz exageradamente afeminada) una vez se dio cuenta era un vecino (si entendí la “temática”). La idea del “sketch” (si podemos llamarle como tal) era el reírnos de la loca, subrayado con el peso (¿?) de las usuales risas forzadas que dan la señal al público de cuándo reírse, que esto o aquello es chistoso.
Me pregunto yo -y creo que es hora de todos preguntarnos- ¿qué es exactamente lo chistoso? Y es que a todas luces este tipo de comedia no se basa en reírse de los eventos, sino del personaje, y ya que el personaje es loca, pues reírse de la loca o su sucesiva comuna de adjetivos (pato, maricón, mariposa…en una sociedad macharrana las palabras para denigrar o mofarse del homosexual no son agua en el desierto). Se supone que aun ese miembro de nuestra sociedad (hermanos, primos, hijos, amigos) sea objeto de moja, de caricatura, de humillación, y al ver que todavía los programas locales usan ese tipo de comedia imagino que son muchos los seguidores. Mientras en muchos países el homosexual es un personaje serio, miembro de la comunidad, en perfecta calibración con la realidad y con la idea de aceptar y no odiar la diferencia, nosotros estamos estancados todavía con Guille, la loca de la televisión puertorriqueña de los 80 que tenia una radio rosa, bailaba “Ese ritmo se baila así” de Chayanne, y se hacía el playboy cuando llegaba el macho heterosexual a la casa. Es también el mismo modelo de un Vitín, también de los 80, quien, aunque no era famoso por ser afeminado, si estaba loco por “enseñar la espalda.” Sí, ese sigue siendo el modelo a seguir en Puerto Rico, treinta años después. Da mucho que desear cuando comparamos con programación televisiva de otros lugares o en sus filmes. En Estados Unidos un personaje gay ya es tan de uso común que a veces resulta cliché, en Argentina se tratan los romances con la mayor seriedad (el programa con mayor éxito ahora mismo, Botineras, cuenta con dos protagonistas futboleros gay), y en otros países de occidente el personaje homosexual no es objeto de broma, pero símbolo de lo que todos somos, seres humanos. Se trata de otro personaje más del cual nos podemos hasta reír, pero no por ser loca, sino por lo que le pase o lo que diga, ya no tanto como caricatura, sino porque lo que dice es cómico, como igual podría ser cómico en cualquier otro personaje. Sin embargo, aquí seguimos estancados con el mofarnos de la loca, o sea, seguimos en las mismas. ¿Qué nos dice esto como pueblo?
Y no es que yo quiera entrar en la diatriba de que en Puerto Rico somos lo peor y el complejo de que en otros lugares se hace mejor. De hecho, muchos otros países, por no decir la mayoría, siguen en esa línea. Sin embargo, ya es hora de empezar a madurar. Cada uno de nosotros, o conoce o quiere a un homosexual. Son nuestros amigos, antiguos compañeros de clase, nuestros vecinos, nuestros hermanos o hermanas, nuestros primos, nuestros hijos, nuestros tíos, son gente que tienen rostro, que sienten y padecen, que se enamoran y se desenamoran, que ríen y lloran, como todo el mundo. Entonces, ¿por qué reírnos? ¿O acaso los macharranes y conservadores (no solo hombres caen en esta categoría), locos por alzar su dedo, no conocen a nadie que sea homosexual, o en términos generales, diferentes? El que diga eso, o se miente, o le mienten, o quiere mentirse. Y, ¿quién les da derecho a juzgar y/o mofarse? ¿Sus creencias? ¿Su dios? ¿Acaso ellas definen a quién se debe odiar y rechazar (y subrayo que el rechazo es unn forma de odiar la diferencia, para aquellos que quieran citar algún pasaje de la Biblia. A esos les pregunto, ¿no se basa su religión en amar al prójimo?)? Yo estoy seguro que en algún momento cada uno de ellos ha sido objeto de moja y burla, por más normal que se crea. Entonces, ¿quieres extender ese sentimiento de rechazo cuando hasta cuando en tus comportamientos más “normales” has sido objeto de moja? Recuerden eso cuando quieran mofarse de alguien por que es “raro”.
Todas estas preguntas pretenden comenzar una discusión seria del tema y dejar la mofa atrás. No se trata de que seamos anormales o machistas en esta isla, sino de que tenemos que aceptarnos como comunidad, y eso incluye a todos nuestros miembros. Apliquemos eso que dicen de amar al prójimo y comencemos a hacerlo. Quizás entonces, la loca no sea más objeto de burla sino, como ya es en muchos programas y filmes, uno más en el grupo, con sus particularidades que le hacen singulares, como cada uno de nosotros tenemos las nuestras.
Por esto fue con sorpresa y desagrado que mientras cambiaba canales de televisión los otros días, me topé con un personaje que, aun sin saber su nombre, conozco su ofensa. Era una “loca”, como le dicen acá a los homosexuales, entre broma y nombre que raya en lo peyorativo. El personaje tenía un pañuelo en la cabeza como si fuera Minga o Petraca, chanclas, una camiseta hecha un nudo y que subía más allá de la barriga, y unos pantalones cortos. Sus gestos era exageradamente amanerados, y era en eso que pretendía provocar risa. Hacía cosas como pegarles las nalgas a un “bandido” que los asaltaba, y darle bofetadas mientras gritaba “¡atrevido!” (en voz exageradamente afeminada) una vez se dio cuenta era un vecino (si entendí la “temática”). La idea del “sketch” (si podemos llamarle como tal) era el reírnos de la loca, subrayado con el peso (¿?) de las usuales risas forzadas que dan la señal al público de cuándo reírse, que esto o aquello es chistoso.
Me pregunto yo -y creo que es hora de todos preguntarnos- ¿qué es exactamente lo chistoso? Y es que a todas luces este tipo de comedia no se basa en reírse de los eventos, sino del personaje, y ya que el personaje es loca, pues reírse de la loca o su sucesiva comuna de adjetivos (pato, maricón, mariposa…en una sociedad macharrana las palabras para denigrar o mofarse del homosexual no son agua en el desierto). Se supone que aun ese miembro de nuestra sociedad (hermanos, primos, hijos, amigos) sea objeto de moja, de caricatura, de humillación, y al ver que todavía los programas locales usan ese tipo de comedia imagino que son muchos los seguidores. Mientras en muchos países el homosexual es un personaje serio, miembro de la comunidad, en perfecta calibración con la realidad y con la idea de aceptar y no odiar la diferencia, nosotros estamos estancados todavía con Guille, la loca de la televisión puertorriqueña de los 80 que tenia una radio rosa, bailaba “Ese ritmo se baila así” de Chayanne, y se hacía el playboy cuando llegaba el macho heterosexual a la casa. Es también el mismo modelo de un Vitín, también de los 80, quien, aunque no era famoso por ser afeminado, si estaba loco por “enseñar la espalda.” Sí, ese sigue siendo el modelo a seguir en Puerto Rico, treinta años después. Da mucho que desear cuando comparamos con programación televisiva de otros lugares o en sus filmes. En Estados Unidos un personaje gay ya es tan de uso común que a veces resulta cliché, en Argentina se tratan los romances con la mayor seriedad (el programa con mayor éxito ahora mismo, Botineras, cuenta con dos protagonistas futboleros gay), y en otros países de occidente el personaje homosexual no es objeto de broma, pero símbolo de lo que todos somos, seres humanos. Se trata de otro personaje más del cual nos podemos hasta reír, pero no por ser loca, sino por lo que le pase o lo que diga, ya no tanto como caricatura, sino porque lo que dice es cómico, como igual podría ser cómico en cualquier otro personaje. Sin embargo, aquí seguimos estancados con el mofarnos de la loca, o sea, seguimos en las mismas. ¿Qué nos dice esto como pueblo?
Y no es que yo quiera entrar en la diatriba de que en Puerto Rico somos lo peor y el complejo de que en otros lugares se hace mejor. De hecho, muchos otros países, por no decir la mayoría, siguen en esa línea. Sin embargo, ya es hora de empezar a madurar. Cada uno de nosotros, o conoce o quiere a un homosexual. Son nuestros amigos, antiguos compañeros de clase, nuestros vecinos, nuestros hermanos o hermanas, nuestros primos, nuestros hijos, nuestros tíos, son gente que tienen rostro, que sienten y padecen, que se enamoran y se desenamoran, que ríen y lloran, como todo el mundo. Entonces, ¿por qué reírnos? ¿O acaso los macharranes y conservadores (no solo hombres caen en esta categoría), locos por alzar su dedo, no conocen a nadie que sea homosexual, o en términos generales, diferentes? El que diga eso, o se miente, o le mienten, o quiere mentirse. Y, ¿quién les da derecho a juzgar y/o mofarse? ¿Sus creencias? ¿Su dios? ¿Acaso ellas definen a quién se debe odiar y rechazar (y subrayo que el rechazo es unn forma de odiar la diferencia, para aquellos que quieran citar algún pasaje de la Biblia. A esos les pregunto, ¿no se basa su religión en amar al prójimo?)? Yo estoy seguro que en algún momento cada uno de ellos ha sido objeto de moja y burla, por más normal que se crea. Entonces, ¿quieres extender ese sentimiento de rechazo cuando hasta cuando en tus comportamientos más “normales” has sido objeto de moja? Recuerden eso cuando quieran mofarse de alguien por que es “raro”.
Todas estas preguntas pretenden comenzar una discusión seria del tema y dejar la mofa atrás. No se trata de que seamos anormales o machistas en esta isla, sino de que tenemos que aceptarnos como comunidad, y eso incluye a todos nuestros miembros. Apliquemos eso que dicen de amar al prójimo y comencemos a hacerlo. Quizás entonces, la loca no sea más objeto de burla sino, como ya es en muchos programas y filmes, uno más en el grupo, con sus particularidades que le hacen singulares, como cada uno de nosotros tenemos las nuestras.
Saturday, July 17, 2010
Los juegos…
¡Pero que clase de cojones! El simulacro de gobierno ha llamado y pretendido que se respete una tregua a la protesta en contra de las políticas del gobierno mientras transcurren los juegos centroamericanos (sin Cuba). Según ellos, se trata de un evento deportivo, de respetar a los atletas y sus esfuerzos por representarnos, y de mostrar al mundo lo “civilizados que somos”. Los medios, que han sido críticos del gobierno en el pasado motín y en el momento que les cerraron las gradas en el capitolio, repentinamente, se han hecho eco de ese llamado del gobierno. El nuevo día dijo en editorial que no es hora de protestas. Santini dijo que la insistencia en manifestarse es politiquera y terca (lo dice uno de los más politiqueros y tercos del país… ¡él sabe!) Los medios televisivos han puesto la noticia del evento por encima de cualquier otra noticia que pase en el país. Dentro de esa lógica se pretende silenciar al clamor de la gente porque “es hora del deporte”, como si todo lo que sucede en la isla también pausara por los eventos deportivos.
La excusa del gobierno y los medios es “el respeto por el esfuerzo atlético”. ¿En serio? O sea, ¿en serio?? No me jodan. ¿De cuándo acá el gobierno en esta isla apoya a los deportes o, a los deportistas? Todo el mundo sabe que aquí el deporte, como las artes, son considerados un hobby. Y ahora, de la nada, ¿apoyan a los deportistas? No me jodan. Aquí lo que hay por parte del gobierno es un intento por tirar una bomba de humo que distraiga a la gente del motín en el capitolio, la huelga de la UPR, el 17% de desempleo, el despilfarro de dinero de los legisladores, el abuso de poder de los mismos, los casos de corrupción que el presidente del senado quiere encubrir, el alza en el crimen, el querer reescribir la ley para acabar con los karsos, los soldados con rifles largos en Mayaguez, las cámaras donde loes estudiantes protestan, etc. De nuevo el gobierno traza paralelos con dictadores del pasado. En Argentina se usó la copa mundial del 78 para entretener a un país y al mundo mientras gente era torturada en las cloacas del país. En Alemania se usaron las olimpiadas del 36 como símbolo de orgullo nacional y de levantar ese espíritu nazi de que eran ellos la raza superior con derecho a reconstruir a Europa. En Estados Unidos, América latina y Europa, los deportes son utilizados para entretener y alejar a la gente de las duras realidades de las que son parte. En otras palabras, usar el deporte como cortina de humo es de uso común. Ahora, mandar a callar en nombre del deporte cuando un país entero vive uno de sus peores momentos, eso es otra cosa.
El interés de la media no necesariamente coincide con el interés del gobierno, aunque sí intenta silenciar las protestas, como bien indica ese editorial del periódico de mayor rotación. Y es que, pues, hay que tratar de asegurar la inversión privada en el evento y que recuperen su inversión con ganancia. No se trata de que “no es momento”, digan las cosas como son. ¿Cómo era momento la semana pasada y ahora tenemos que hacer chitón? Sé que mucha gente está loca y/o prefiere ver si ganamos algo antes de seguir hablando lo mismo de siempre, pero el descontento de un pueblo no se puede tapar solo por eso y asumir una actitud de “aquí no pasa nada”. De hecho, las manifestaciones, en un momento en que los ojos de muchos países están enfocados en la isla, son tremenda oportunidad para ejercer presión al gobierno y hacernos escuchar. De igual forma, la protesta y manifestación pueden ser utilizados como instrumentos de presión al gobierno cuando hay tanto interés privado envuelto. ¿De qué vale protestar si la protesta no ejerce presión alguna al gobierno? ¿Cómo van a escucharnos si solo nos quejamos y usamos la democracia cuando a ellos no les afecta? De hecho, me preocupa que hay tanta regla establecida con la policía y tanta gente encargada de “mantener el orden” (como si en este país existiera tal cosa….. ¿por cuánto van los asesinatos ya?).
Si queremos que nos escuchen, este domingo y a lo largo del evento deportivo, hay que dejar saber al gobierno que aquí sí pasa algo, y que no vamos a callarnos hasta que comiencen a respetar al pueblo que los eligió. Al final del día, si eso pasa, podremos sumar otra victoria a las que hayan logrado los deportistas del país, que sudarán por representarnos en el único momento que el gobierno les presta atención.
La excusa del gobierno y los medios es “el respeto por el esfuerzo atlético”. ¿En serio? O sea, ¿en serio?? No me jodan. ¿De cuándo acá el gobierno en esta isla apoya a los deportes o, a los deportistas? Todo el mundo sabe que aquí el deporte, como las artes, son considerados un hobby. Y ahora, de la nada, ¿apoyan a los deportistas? No me jodan. Aquí lo que hay por parte del gobierno es un intento por tirar una bomba de humo que distraiga a la gente del motín en el capitolio, la huelga de la UPR, el 17% de desempleo, el despilfarro de dinero de los legisladores, el abuso de poder de los mismos, los casos de corrupción que el presidente del senado quiere encubrir, el alza en el crimen, el querer reescribir la ley para acabar con los karsos, los soldados con rifles largos en Mayaguez, las cámaras donde loes estudiantes protestan, etc. De nuevo el gobierno traza paralelos con dictadores del pasado. En Argentina se usó la copa mundial del 78 para entretener a un país y al mundo mientras gente era torturada en las cloacas del país. En Alemania se usaron las olimpiadas del 36 como símbolo de orgullo nacional y de levantar ese espíritu nazi de que eran ellos la raza superior con derecho a reconstruir a Europa. En Estados Unidos, América latina y Europa, los deportes son utilizados para entretener y alejar a la gente de las duras realidades de las que son parte. En otras palabras, usar el deporte como cortina de humo es de uso común. Ahora, mandar a callar en nombre del deporte cuando un país entero vive uno de sus peores momentos, eso es otra cosa.
El interés de la media no necesariamente coincide con el interés del gobierno, aunque sí intenta silenciar las protestas, como bien indica ese editorial del periódico de mayor rotación. Y es que, pues, hay que tratar de asegurar la inversión privada en el evento y que recuperen su inversión con ganancia. No se trata de que “no es momento”, digan las cosas como son. ¿Cómo era momento la semana pasada y ahora tenemos que hacer chitón? Sé que mucha gente está loca y/o prefiere ver si ganamos algo antes de seguir hablando lo mismo de siempre, pero el descontento de un pueblo no se puede tapar solo por eso y asumir una actitud de “aquí no pasa nada”. De hecho, las manifestaciones, en un momento en que los ojos de muchos países están enfocados en la isla, son tremenda oportunidad para ejercer presión al gobierno y hacernos escuchar. De igual forma, la protesta y manifestación pueden ser utilizados como instrumentos de presión al gobierno cuando hay tanto interés privado envuelto. ¿De qué vale protestar si la protesta no ejerce presión alguna al gobierno? ¿Cómo van a escucharnos si solo nos quejamos y usamos la democracia cuando a ellos no les afecta? De hecho, me preocupa que hay tanta regla establecida con la policía y tanta gente encargada de “mantener el orden” (como si en este país existiera tal cosa….. ¿por cuánto van los asesinatos ya?).
Si queremos que nos escuchen, este domingo y a lo largo del evento deportivo, hay que dejar saber al gobierno que aquí sí pasa algo, y que no vamos a callarnos hasta que comiencen a respetar al pueblo que los eligió. Al final del día, si eso pasa, podremos sumar otra victoria a las que hayan logrado los deportistas del país, que sudarán por representarnos en el único momento que el gobierno les presta atención.
Tuesday, July 13, 2010
Morder la mano que te da de comer
Qué bonito es regresar a la tierra que me vio nacer y encontrar que, cuatro años más tarde, la gente sigue repitiendo la misma ñoña. Los otros días me di de frente con un comentario que intentaba desafiarme y poner en ridículo mis posturas en contra de la política estadounidense. Vamos a ver, yo mencionaba que la universidad a la que pertenezco me pagaba mi próxima sabática en Argentina cuando mi querida tía me cuestionó el por qué criticaba tanto a Estados Unidos, que eso era morder la mano que me daba de comer…esto, mientras mi padre instigaba a que me dijera más (de cheerleader para “ponerme en mi sitio”). A esta pregunta contesté un desafiante “y lo seguiré haciendo”, y traté entonces de explicar los pormenores de mi situación, en específico, que yo no le debo dinero a los Estados Unidos y que yo estaba allí por ciertas situaciones y condiciones. Pero eso no es lo que me molesta del comentario sino más bien la idea que uno, en el nombre de ser agradecido, debe bajar la cabeza, decir gracias, y hacerse el ciego de cualquier cosa que de el que otorga. Sabemos que cuando hablamos de esta situación sería el amo, ¿no? Y su servidor…bueno, así tenían que hacer los esclavos, ¿no? Bajar la cabeza, decir gracias, y servir porque uno es agradecido. Hacerse ciego de que ellos vivían en la gran casa y los esclavos en la parte de atrás, donde nadie los viera. Ahora el “amo”, nuestro dueño y señor, es el Tío Sam, a los que la mayoría en esta isla postran sus rodillas, y a él debemos agradecer nuestra bendecida existencia (menos el 17% de desempleo, la violencia, el crimen, las drogas…esas se las achacamos a los populares). Siguiendo esa lógica, debemos ser ciegos al que nos da algo y “no morder la mano del que nos da de comer”, o al menos eso parecía ser el mensaje. ¡Que malagradecido yo que me atrevo a cuestionar a los Estados Unidos! Y eso sigue la vieja lógica de siempre; ¡Qué malagradecidos aquellos boricuas que critican la benefactora bondad de los Estados Unidos! Así de colonizados estamos.
Sí mi gente, este es el dolor que siempre me da desde que mis estadías en la isla se basan en ires y venires. Y es que el colonialismo no se queda en la estúpida situación del status, sino que va más allá. La colonización de Estados Unidos con Puerto Rico es la peor de todas: la colonización de su espíritu (escencia, alma, etc.). La gente quiere imitar a los gringos, los consideran un modelo a seguir, se sienten agradecidos de las migajas que nos tiran, y critican al que se atreva a criticarlos, como es mi caso. ¿Cómo es que somos tan mal agradecidos si gracias a Estados Unidos…? ¡Gracias a Estados Unidos qué!? Vamos a dejar de repetir cosas y regresemos a la historia. Estados Unidos nos invadió, tal como hizo España antes de ellos. Botines de guerra o no, y más allá del pajazo de “Seva”, no hubo mucha resistencia. ¿Por qué? Porque mucha gente pensaba que, como se trataba del “land of the free”, olvídate que nos daban la libertad a nosotros, al igual que a Cuba. A ellos, los cubanos, se la dieron entre comillas, como al resto de Latinoamérica. Y es que entre los acuerdos logrados estaba claro que si los cubanos elegían a un gobierno que a los gringos no le gustara, pues nacarile del oriente porque ellos se reservaban el derecho de invasión. La isla grande quedó de alfombra de los gringos, específicamente de las empresas y la inversión privada. Y hasta de la mafia, cosa que los amantes de Hollywood pueden corroborar en la secuela de “Godfather”. Y luego la gente se pregunta cómo muchos favorecieron a la revolución cubana y al ascenso de Fidel al poder. El derecho a invasión lo retuvieron e intentaron invadir tras bastidores durante la administración de Kennedy, pero me estoy desviando. En Puerto Rico, el país de la libertad nos dejó 50 años en la miseria. Si no me creen, refiéranse al “Lamento borincano” de Rafael Hernández y toda esa cultura. Lean los periódicos de la época y vean cuantos murieron de hambre. De hecho, la lucha por la libertad, que había cesado por pensarse que el país de la libertad nos la daría, retornó de forma convincente y con facciones violentas como Albizu. ¿Para qué hundirnos en ese barco? No fue hasta que un puertorriqueño diseñó un plan de desarrollo bajo el estatus colonial que ese engendro llamado Estado Libre Asociado dio ciertos frutos. En otras palabras, no fue la obra y gracia gringa, y tampoco fue que nos colmaron de riquezas. Y es que a la gente se le olvida que la idea de la colonización no es dar al colonizado, sino explotarlo. Tampoco entienden que la forma de Estados Unidos lograrlo es tratar de pintar la capota, como quien dice, maquillarla. Así, bajo ese engendro, se construyó una economía basada en inversiones privadas que reducirían la isla a ese ciclo mientras pareciera que éramos un país tan desarrollado. Detrás de eso estaba también el contexto de la guerra fría. Habiendo perdido a Cuba, era imprescindible que se viera a Puerto Rico como la isla “del progreso”, para evitar que otros países siguieran a Cuba en la absurda idea del Comunismo-leninista. No obstante, en ese maquillaje, se nos hizo creer que dependemos de ellos y que debemos ser agradecidos. Se nos olvida que todo el capital engendrado por las empresas privadas no es repartido en la isla, sino que lo regresan a los Estados Unidos, y luego, el colmo de la desfachatez, tenemos que comprarlas nuevamente. Y es mucho más complicado que eso, pero algunos, tan creyentes en ser agradecidos, olvidan que si Estados Unidos es una potencia no es por ser pendejos. Si fuéramos nosotros los que les quitamos tanto sin ellos quitarnos nada, hace rato que nos hubieran dejado solitos. Pero, no les interesa la anexión, como tampoco han hecho mucho por separarnos de su “gracia divina”.
Entonces, ¿qué es lo que se encuentra detrás del maquillaje? ¿Y qué detrás del maquillaje con el resto de los países latinos, con los que compartimos mucho más que con el país que queremos seguir de modelo? Pues, un modelo económico que garantiza la riqueza a dos o tres y mantiene al resto en la pobreza, a los indígenas en la marginación, al sistema sumido en corrupción. Un modelo del que todos deben estar de acuerdo, y hasta permitir bases en su tierra como pasa en Panamá y Colombia, entre otros. Un modelo que no permite disidencia, desde la censura a Venezuela, Ecuador y Bolivia, la crítica a Brazil por aliarse a estos países disidentes (how dare them?), hasta permitir dictaduras en Honduras, auspiciar golpes en Chile, Argentina, Brazil, Bolivia, y Uruguay, todo en nombre, no de la libertad, sino de los mejores intereses de ellos. Sí, de ellos, no de nosotros. A fin de cuenta, para ellos está reservado el nombre de “Americanos”, los demás somos su alfombrita.
¿Y cómo ser agradecido entonces? ¿Agradecido a qué? ¿A las migajas, si es que ese fuera el caso, si es que yo dependiera en realidad del dinero de los estadounidenses (y no de empresarios y empresas privadas que me pagan por ciertos acuerdos entre ellos)? Yo no puedo ser agradecido y taparme los ojos. No puedo renunciar a la crítica porque de eso se trata la libertad que tanto ellos pregonan pero no nos quieren dar, ni a nosotros ni al resto de los países latinos. Sería antiético dejar pasar por alto todos los atropellos en nombre de cualquier beneficio que yo goce, que dejo claro no los considero como tal. Es por eso que mi deber, como colonizado, como puertorriqueño, como latino, como humano y como creyente de la libertad de cada persona, es el de “morder la mano que me da de comer”, como se creen algunos. No será hasta que esa mano deje de morder, que yo deje de morder también….y ojalá que ellos mordieran tan solo con peras palabras como hago yo. Si así fuera, no habría tanta sangre de por medio.
Sí mi gente, este es el dolor que siempre me da desde que mis estadías en la isla se basan en ires y venires. Y es que el colonialismo no se queda en la estúpida situación del status, sino que va más allá. La colonización de Estados Unidos con Puerto Rico es la peor de todas: la colonización de su espíritu (escencia, alma, etc.). La gente quiere imitar a los gringos, los consideran un modelo a seguir, se sienten agradecidos de las migajas que nos tiran, y critican al que se atreva a criticarlos, como es mi caso. ¿Cómo es que somos tan mal agradecidos si gracias a Estados Unidos…? ¡Gracias a Estados Unidos qué!? Vamos a dejar de repetir cosas y regresemos a la historia. Estados Unidos nos invadió, tal como hizo España antes de ellos. Botines de guerra o no, y más allá del pajazo de “Seva”, no hubo mucha resistencia. ¿Por qué? Porque mucha gente pensaba que, como se trataba del “land of the free”, olvídate que nos daban la libertad a nosotros, al igual que a Cuba. A ellos, los cubanos, se la dieron entre comillas, como al resto de Latinoamérica. Y es que entre los acuerdos logrados estaba claro que si los cubanos elegían a un gobierno que a los gringos no le gustara, pues nacarile del oriente porque ellos se reservaban el derecho de invasión. La isla grande quedó de alfombra de los gringos, específicamente de las empresas y la inversión privada. Y hasta de la mafia, cosa que los amantes de Hollywood pueden corroborar en la secuela de “Godfather”. Y luego la gente se pregunta cómo muchos favorecieron a la revolución cubana y al ascenso de Fidel al poder. El derecho a invasión lo retuvieron e intentaron invadir tras bastidores durante la administración de Kennedy, pero me estoy desviando. En Puerto Rico, el país de la libertad nos dejó 50 años en la miseria. Si no me creen, refiéranse al “Lamento borincano” de Rafael Hernández y toda esa cultura. Lean los periódicos de la época y vean cuantos murieron de hambre. De hecho, la lucha por la libertad, que había cesado por pensarse que el país de la libertad nos la daría, retornó de forma convincente y con facciones violentas como Albizu. ¿Para qué hundirnos en ese barco? No fue hasta que un puertorriqueño diseñó un plan de desarrollo bajo el estatus colonial que ese engendro llamado Estado Libre Asociado dio ciertos frutos. En otras palabras, no fue la obra y gracia gringa, y tampoco fue que nos colmaron de riquezas. Y es que a la gente se le olvida que la idea de la colonización no es dar al colonizado, sino explotarlo. Tampoco entienden que la forma de Estados Unidos lograrlo es tratar de pintar la capota, como quien dice, maquillarla. Así, bajo ese engendro, se construyó una economía basada en inversiones privadas que reducirían la isla a ese ciclo mientras pareciera que éramos un país tan desarrollado. Detrás de eso estaba también el contexto de la guerra fría. Habiendo perdido a Cuba, era imprescindible que se viera a Puerto Rico como la isla “del progreso”, para evitar que otros países siguieran a Cuba en la absurda idea del Comunismo-leninista. No obstante, en ese maquillaje, se nos hizo creer que dependemos de ellos y que debemos ser agradecidos. Se nos olvida que todo el capital engendrado por las empresas privadas no es repartido en la isla, sino que lo regresan a los Estados Unidos, y luego, el colmo de la desfachatez, tenemos que comprarlas nuevamente. Y es mucho más complicado que eso, pero algunos, tan creyentes en ser agradecidos, olvidan que si Estados Unidos es una potencia no es por ser pendejos. Si fuéramos nosotros los que les quitamos tanto sin ellos quitarnos nada, hace rato que nos hubieran dejado solitos. Pero, no les interesa la anexión, como tampoco han hecho mucho por separarnos de su “gracia divina”.
Entonces, ¿qué es lo que se encuentra detrás del maquillaje? ¿Y qué detrás del maquillaje con el resto de los países latinos, con los que compartimos mucho más que con el país que queremos seguir de modelo? Pues, un modelo económico que garantiza la riqueza a dos o tres y mantiene al resto en la pobreza, a los indígenas en la marginación, al sistema sumido en corrupción. Un modelo del que todos deben estar de acuerdo, y hasta permitir bases en su tierra como pasa en Panamá y Colombia, entre otros. Un modelo que no permite disidencia, desde la censura a Venezuela, Ecuador y Bolivia, la crítica a Brazil por aliarse a estos países disidentes (how dare them?), hasta permitir dictaduras en Honduras, auspiciar golpes en Chile, Argentina, Brazil, Bolivia, y Uruguay, todo en nombre, no de la libertad, sino de los mejores intereses de ellos. Sí, de ellos, no de nosotros. A fin de cuenta, para ellos está reservado el nombre de “Americanos”, los demás somos su alfombrita.
¿Y cómo ser agradecido entonces? ¿Agradecido a qué? ¿A las migajas, si es que ese fuera el caso, si es que yo dependiera en realidad del dinero de los estadounidenses (y no de empresarios y empresas privadas que me pagan por ciertos acuerdos entre ellos)? Yo no puedo ser agradecido y taparme los ojos. No puedo renunciar a la crítica porque de eso se trata la libertad que tanto ellos pregonan pero no nos quieren dar, ni a nosotros ni al resto de los países latinos. Sería antiético dejar pasar por alto todos los atropellos en nombre de cualquier beneficio que yo goce, que dejo claro no los considero como tal. Es por eso que mi deber, como colonizado, como puertorriqueño, como latino, como humano y como creyente de la libertad de cada persona, es el de “morder la mano que me da de comer”, como se creen algunos. No será hasta que esa mano deje de morder, que yo deje de morder también….y ojalá que ellos mordieran tan solo con peras palabras como hago yo. Si así fuera, no habría tanta sangre de por medio.
Monday, July 05, 2010
Y al palo! Al palo es que ej…
Y al palo! Al palo es que ej…
Viendo las imágenes sobre el motín en el capitolio una y otra vez, recordaba aquella frase que cantaban Los sabrosos del merengue en los 90: Y al palo! Al palo es que ej! Y es que fácilmente podíamos hacer un mix de aquella muletilla entre el solo de la música merengue y las imágenes del pasado miércoles ya que al palo es que nos tienen y, cada vez que se le pregunta a la mayoría de los líderes del gobierno (excepto dos o tres con criterio propio como Vega Borges), pareciera que responden “al palo es que ej!”. Esa es su formula mágica para gobernar. Y a palo limpio vi como sacaron a la fuerza antiguos colegas y continuos amigos, mientras los legisladores miraban desde las ventanas y se reían, como se reía Rivera Schatz cuando regresó, alegando que “ya se fueron los revoltosos”.
No es de extrañar entonces que muchos ya colmen sus adjetivos para el gobierno y sus líderes como fascistas, dictadores, antidemocráticos. Tampoco es de extrañar que se asocie al gobernador con el dictador derechista de Chile Augusto Pinochet (esperemos que no llegue a eso o pronto dejaré de poder escribir estas líneas) o con la fácil y recurrente imagen de Hitler. Y es que la política del gobierno ha sido la de utilizar la fuerza en contra de la disidencia, o, el palo. Más asco no podía sentir al ver a Fortuño justificar los actos violentos porque dis que los manifestantes querían apoderarse del capitolio a la fuerza, que tenían piedras y gases pimientas en las mochilas, y que él tenía que defender la democracia. El gobernador fue más allá al decir que la gente de allí eran “socialistas”, una minoría que, aunque tiene derecho a manifestarse, tiene que respetar la ley. Dejando por el lado de que esto son mentiras, ya que la toma del capitolio era simbólica y, por tanto, pacífica, al igual que los gases y las piedras solo fueron utilizadas una vez comenzó la represión por parte del gobierno (el empleado del capitolio) y la policía, las inconsistencias del discurso del gobernador me hacen preguntar; ¿qué clase de democracia se defiende con uso de fuerza bruta y excesiva en contra de aquellos que se oponen o critican al gobierno? ¿Cómo se define la democracia cuando se niega el paso a la casa de la leyes y en donde las mismas se hacen a puertas cerradas? ¿Qué es la ley y cómo respetarla en un país democrático cuando las mismas son aprobadas por los mismos que nos roban a puertas cerradas y palo para el que no le guste?
La insistencia en “respetar la ley” es la que ha hecho que mucha gente defienda la postura del gobierno. He escuchado a muchos justificar el motín porque, supuestamente, los estudiantes provocaron a los policías. Entre las justificaciones de la gente, y que son parte de lo que ha dicho el gobernador, el presidente del senado, y Roberto Arango, quien nos recordó los tiempos del cerro maravilla cuando tildó de “héroes” a los policías que abusaron de su poder, se encuentran las de que los estudiantes habían anunciado de antemano apoderarse del capitolio (que ya mencioné era simbólico y se basaba en leer unos reclamos sentados pacíficamente en el suelo), que provocaron con insultos e improperios, que lo que querían era obstaculizar los procesos legislativos, y que no representan a la mayoría del pueblo. De hecho, es este concepto de “la mayoría” del que se amparan los miembros del PNP cada vez que son cuestionados, como si la abrumadora victoria electoral diera permiso a pisotear toda crítica y disidencia. De ser así, ¿cuál es la supuesta democracia que supuestamente defiende Fortuño? ¿La de los que piensan como ellos? ¿Y qué con los demás? ¿Al palo? Eso apesta a dictadura y no a democracia. De hecho, el mentado Hitler llegó al poder por el apoyo de “la mayoría”, al igual que otros dictadores que fueron impuestos mediante golpes de estado. Tanto Pinochet como Videla en Argentina, tenían en apoyo substancial de una gran parte de la población y, como el gobernador ahora, se amparaban en mantener la ley, el control y dispersar los agentes del caos. De hecho, Fortuño reafirmó su postura días más tardes, al decir que iba a ser más fuerte contra sectores socialistas que quieren sembrar el caos, entiéndase, van a usar más palo y fuerza contra los disidentes en nombre de la “paz”, la ley y el orden (al igual que los últimos dos dictadores mencionados). Tampoco se aleja mucho de esa visión cuando pide asesoría a la policía de Nueva York, cuyo esfuerzo mantiene una línea de ofensiva contra la insatisfacción del pueblo y un intento por limpiarse la cara con una estrategia de relaciones públicas para que parezca que lo que sucedió el miércoles no va a volver a ocurrir. Este es un cuerpo policíaco con un historial de violaciones de derechos civiles y que forma parte de un país (Estados Unidos) donde las protestas son raras y las luchas son también suprimidas por fuerzas policíacas embriagadas de poder. No obstante, cualquiera que recuerde los pasos del gobierno desde el día número uno debe tener muy claro que ese llamado fue una estrategia de última hora para atender el mal sabor que dejó en la boca a los seguidores del PNP que no se tragaron las excusas para usar la fuerza.
Que quede claro, es un aguaje. Desde el primer día el gobernador ha sido enfático en su política violenta y represiva. Escudándose con su carita de nene bueno (por la que la gente sigue diciéndole Flojuño aun cuando ha demostrado ser tan hijo de puta como los gobernadores más violentos de nuestra historia), nombró a Figueroa Sancha de superintendente, cuyo historial de uso de la fuerza contra protestas y la prensa era su más notable mancha. Desde ese momento, se dictó que la política iba a ser impuesta y respetada (en nombre de la ley) y si no, al palo. Al palo trataron a estudiantes en la Avenida Universidad, al palo se trató a los manifestantes en la huelga de la Universidad de Puerto Rico, al palo (y tasers) a los que querían irrumpir en su actividad de millonarios en Plaza las Américas, al palo cuando se utilizó a la guardia nacional en algunos de estos excesos de fuerza (imágenes de soldados con armas largas supervisando, como en las dictaduras militares). De igual forma, se firmó aquella ley que daba al gobernador autoridad para utilizar a dicho cuerpo en caso de disturbios, tal como hacen los dictadores, augurando que iba a haber resistencia del pueblo para una agenda que sigue dejando a la gente en la calle mientras los desarrolladores, políticos y millonarios siguen derrochando nuestros recursos. Esa postura va a continuar y el hecho de que Fortuño no se haya retractado de lo que dijo la pasada semana subraya que la “asesoría” del cuerpo policiaco neoyorquino no se trata de una forma de atender de manera civilizada a las futuras protestas. Para el gobernador nada ha cambiado, todo disidente es un agente del caos y la colaboración de la policía exterior es solo un instrumento más para lidiar con ella, no para escucharla ni atenderla, como se debe hacer en una democracia. La forma en que el mandatario insiste en aminorar el descontento popular amparándose en el concepto de “mayoría”, y de acusar de populares y/o socialistas al que no le guste, es también un intento por desacreditar la voz de un sector que forma parte del pueblo y que en una democracia debe ser escuchado y atendido, más allá de victorias electorales. De igual manera, todo aquel que compare lo que ocurrió en el capitolio con el motín en el juego de baloncesto de Arecibo (toma oído prensa…haz las preguntas pertinentes y deja de mear fuera del hoyo) minoriza el descontento de un pueblo contra su gobierno y lo equipara con unos malos perdedores, que es lo mismo que decir que cualquiera que proteste “no es parte de la mayoría” (los que ganaron).
Esa reducción de la crítica y la protesta no es aceptable en una democracia. Los líderes elegidos por la vía electoral en una democracia representativa (obviando aquí cuan real es esto en el sistema electoral imperante) se hacen líderes del pueblo entero y no solo de aquellos que prestaron su voto, y para ese pueblo entero debe gobernar. De lo contario, el gobierno deja de representar a su pueblo y, por tanto y en una verdadera democracia, debe ser revocado como representante del mismo. Es precisamente esa idea la que atemoriza al gobierno de turno y la que los obliga a disminuir la validez de cualquier protesta mientras siguen su agenda de favorecerse entre ellos y sus amigachos. Es ese miedo el que estimula a usar el palo (cualquier metáfora de doble sentido también puede ser utilizada, es la misma idea…la de un pueblo que nos va clavando) para aquel que proteste; dejar claro quién tiene la fuerza y que aquel que pretenda cuestionarla va a ser sujeto a la misma.
Sin embargo, si el gobierno insiste, como deja claro que pretende hacerlo, en dicha política, ese miedo debe hacerse realidad de una forma u otra. Y es que si no se toman en cuenta a las voces que componen una sociedad, el gobierno deja de ser democrático, punto. Si permitimos que eso suceda y lo justificamos, estamos dejando que esto se torne descaradamente en una dictadura (que conste, mucha gente apoya a los dictadores en la misma, no crean que se trata de gente que tiene que decir que sí y ya…todavía hay muchos que apoyan a las dictaduras en Grecia, España, Chile y Argentina). Si en realidad creemos en una sociedad democrática, cada voz debe ser respetada. De lo contrario, los gobiernos deben ser sustituidos, ya sea mediante instrumentos judiciales que defiendan la constitución, la revocación electoral (que requiere de una madurez política que supere el partidismo tradicional de rojos, azules y verdes), u otras vías que reten al palo y dejen claro que por más que traten de silenciarnos, vamos a seguir clamando por los derechos que nos otorga el imaginario de la democracia. Solo así, los gobernantes dejarán de servirse del pueblo y comenzarán a servir al pueblo. Solo así, podremos tener fe en nuestro gobierno y en nosotros mismos, como parte de ese otro imaginario que se llama Puerto Rico y del que TODOS formamos parte.
Viendo las imágenes sobre el motín en el capitolio una y otra vez, recordaba aquella frase que cantaban Los sabrosos del merengue en los 90: Y al palo! Al palo es que ej! Y es que fácilmente podíamos hacer un mix de aquella muletilla entre el solo de la música merengue y las imágenes del pasado miércoles ya que al palo es que nos tienen y, cada vez que se le pregunta a la mayoría de los líderes del gobierno (excepto dos o tres con criterio propio como Vega Borges), pareciera que responden “al palo es que ej!”. Esa es su formula mágica para gobernar. Y a palo limpio vi como sacaron a la fuerza antiguos colegas y continuos amigos, mientras los legisladores miraban desde las ventanas y se reían, como se reía Rivera Schatz cuando regresó, alegando que “ya se fueron los revoltosos”.
No es de extrañar entonces que muchos ya colmen sus adjetivos para el gobierno y sus líderes como fascistas, dictadores, antidemocráticos. Tampoco es de extrañar que se asocie al gobernador con el dictador derechista de Chile Augusto Pinochet (esperemos que no llegue a eso o pronto dejaré de poder escribir estas líneas) o con la fácil y recurrente imagen de Hitler. Y es que la política del gobierno ha sido la de utilizar la fuerza en contra de la disidencia, o, el palo. Más asco no podía sentir al ver a Fortuño justificar los actos violentos porque dis que los manifestantes querían apoderarse del capitolio a la fuerza, que tenían piedras y gases pimientas en las mochilas, y que él tenía que defender la democracia. El gobernador fue más allá al decir que la gente de allí eran “socialistas”, una minoría que, aunque tiene derecho a manifestarse, tiene que respetar la ley. Dejando por el lado de que esto son mentiras, ya que la toma del capitolio era simbólica y, por tanto, pacífica, al igual que los gases y las piedras solo fueron utilizadas una vez comenzó la represión por parte del gobierno (el empleado del capitolio) y la policía, las inconsistencias del discurso del gobernador me hacen preguntar; ¿qué clase de democracia se defiende con uso de fuerza bruta y excesiva en contra de aquellos que se oponen o critican al gobierno? ¿Cómo se define la democracia cuando se niega el paso a la casa de la leyes y en donde las mismas se hacen a puertas cerradas? ¿Qué es la ley y cómo respetarla en un país democrático cuando las mismas son aprobadas por los mismos que nos roban a puertas cerradas y palo para el que no le guste?
La insistencia en “respetar la ley” es la que ha hecho que mucha gente defienda la postura del gobierno. He escuchado a muchos justificar el motín porque, supuestamente, los estudiantes provocaron a los policías. Entre las justificaciones de la gente, y que son parte de lo que ha dicho el gobernador, el presidente del senado, y Roberto Arango, quien nos recordó los tiempos del cerro maravilla cuando tildó de “héroes” a los policías que abusaron de su poder, se encuentran las de que los estudiantes habían anunciado de antemano apoderarse del capitolio (que ya mencioné era simbólico y se basaba en leer unos reclamos sentados pacíficamente en el suelo), que provocaron con insultos e improperios, que lo que querían era obstaculizar los procesos legislativos, y que no representan a la mayoría del pueblo. De hecho, es este concepto de “la mayoría” del que se amparan los miembros del PNP cada vez que son cuestionados, como si la abrumadora victoria electoral diera permiso a pisotear toda crítica y disidencia. De ser así, ¿cuál es la supuesta democracia que supuestamente defiende Fortuño? ¿La de los que piensan como ellos? ¿Y qué con los demás? ¿Al palo? Eso apesta a dictadura y no a democracia. De hecho, el mentado Hitler llegó al poder por el apoyo de “la mayoría”, al igual que otros dictadores que fueron impuestos mediante golpes de estado. Tanto Pinochet como Videla en Argentina, tenían en apoyo substancial de una gran parte de la población y, como el gobernador ahora, se amparaban en mantener la ley, el control y dispersar los agentes del caos. De hecho, Fortuño reafirmó su postura días más tardes, al decir que iba a ser más fuerte contra sectores socialistas que quieren sembrar el caos, entiéndase, van a usar más palo y fuerza contra los disidentes en nombre de la “paz”, la ley y el orden (al igual que los últimos dos dictadores mencionados). Tampoco se aleja mucho de esa visión cuando pide asesoría a la policía de Nueva York, cuyo esfuerzo mantiene una línea de ofensiva contra la insatisfacción del pueblo y un intento por limpiarse la cara con una estrategia de relaciones públicas para que parezca que lo que sucedió el miércoles no va a volver a ocurrir. Este es un cuerpo policíaco con un historial de violaciones de derechos civiles y que forma parte de un país (Estados Unidos) donde las protestas son raras y las luchas son también suprimidas por fuerzas policíacas embriagadas de poder. No obstante, cualquiera que recuerde los pasos del gobierno desde el día número uno debe tener muy claro que ese llamado fue una estrategia de última hora para atender el mal sabor que dejó en la boca a los seguidores del PNP que no se tragaron las excusas para usar la fuerza.
Que quede claro, es un aguaje. Desde el primer día el gobernador ha sido enfático en su política violenta y represiva. Escudándose con su carita de nene bueno (por la que la gente sigue diciéndole Flojuño aun cuando ha demostrado ser tan hijo de puta como los gobernadores más violentos de nuestra historia), nombró a Figueroa Sancha de superintendente, cuyo historial de uso de la fuerza contra protestas y la prensa era su más notable mancha. Desde ese momento, se dictó que la política iba a ser impuesta y respetada (en nombre de la ley) y si no, al palo. Al palo trataron a estudiantes en la Avenida Universidad, al palo se trató a los manifestantes en la huelga de la Universidad de Puerto Rico, al palo (y tasers) a los que querían irrumpir en su actividad de millonarios en Plaza las Américas, al palo cuando se utilizó a la guardia nacional en algunos de estos excesos de fuerza (imágenes de soldados con armas largas supervisando, como en las dictaduras militares). De igual forma, se firmó aquella ley que daba al gobernador autoridad para utilizar a dicho cuerpo en caso de disturbios, tal como hacen los dictadores, augurando que iba a haber resistencia del pueblo para una agenda que sigue dejando a la gente en la calle mientras los desarrolladores, políticos y millonarios siguen derrochando nuestros recursos. Esa postura va a continuar y el hecho de que Fortuño no se haya retractado de lo que dijo la pasada semana subraya que la “asesoría” del cuerpo policiaco neoyorquino no se trata de una forma de atender de manera civilizada a las futuras protestas. Para el gobernador nada ha cambiado, todo disidente es un agente del caos y la colaboración de la policía exterior es solo un instrumento más para lidiar con ella, no para escucharla ni atenderla, como se debe hacer en una democracia. La forma en que el mandatario insiste en aminorar el descontento popular amparándose en el concepto de “mayoría”, y de acusar de populares y/o socialistas al que no le guste, es también un intento por desacreditar la voz de un sector que forma parte del pueblo y que en una democracia debe ser escuchado y atendido, más allá de victorias electorales. De igual manera, todo aquel que compare lo que ocurrió en el capitolio con el motín en el juego de baloncesto de Arecibo (toma oído prensa…haz las preguntas pertinentes y deja de mear fuera del hoyo) minoriza el descontento de un pueblo contra su gobierno y lo equipara con unos malos perdedores, que es lo mismo que decir que cualquiera que proteste “no es parte de la mayoría” (los que ganaron).
Esa reducción de la crítica y la protesta no es aceptable en una democracia. Los líderes elegidos por la vía electoral en una democracia representativa (obviando aquí cuan real es esto en el sistema electoral imperante) se hacen líderes del pueblo entero y no solo de aquellos que prestaron su voto, y para ese pueblo entero debe gobernar. De lo contario, el gobierno deja de representar a su pueblo y, por tanto y en una verdadera democracia, debe ser revocado como representante del mismo. Es precisamente esa idea la que atemoriza al gobierno de turno y la que los obliga a disminuir la validez de cualquier protesta mientras siguen su agenda de favorecerse entre ellos y sus amigachos. Es ese miedo el que estimula a usar el palo (cualquier metáfora de doble sentido también puede ser utilizada, es la misma idea…la de un pueblo que nos va clavando) para aquel que proteste; dejar claro quién tiene la fuerza y que aquel que pretenda cuestionarla va a ser sujeto a la misma.
Sin embargo, si el gobierno insiste, como deja claro que pretende hacerlo, en dicha política, ese miedo debe hacerse realidad de una forma u otra. Y es que si no se toman en cuenta a las voces que componen una sociedad, el gobierno deja de ser democrático, punto. Si permitimos que eso suceda y lo justificamos, estamos dejando que esto se torne descaradamente en una dictadura (que conste, mucha gente apoya a los dictadores en la misma, no crean que se trata de gente que tiene que decir que sí y ya…todavía hay muchos que apoyan a las dictaduras en Grecia, España, Chile y Argentina). Si en realidad creemos en una sociedad democrática, cada voz debe ser respetada. De lo contrario, los gobiernos deben ser sustituidos, ya sea mediante instrumentos judiciales que defiendan la constitución, la revocación electoral (que requiere de una madurez política que supere el partidismo tradicional de rojos, azules y verdes), u otras vías que reten al palo y dejen claro que por más que traten de silenciarnos, vamos a seguir clamando por los derechos que nos otorga el imaginario de la democracia. Solo así, los gobernantes dejarán de servirse del pueblo y comenzarán a servir al pueblo. Solo así, podremos tener fe en nuestro gobierno y en nosotros mismos, como parte de ese otro imaginario que se llama Puerto Rico y del que TODOS formamos parte.
Wednesday, June 30, 2010
Vela Perdida
En el medio de la noche
una sombra se llevó la vela,
aquella que cada noche se derretía
ante la desnudez de la botella.
Quién tendrá ahora esa seda
que llora lágrimas de esperma
de forma muy sutil,
de forma muy lenta.
Y, en su lugar,
quién me trajo esta melancolía
de imágenes de película panfletera
que me hacen pensar en velas
cuando nací en su funeral
prostituto de quimeras.
S.
una sombra se llevó la vela,
aquella que cada noche se derretía
ante la desnudez de la botella.
Quién tendrá ahora esa seda
que llora lágrimas de esperma
de forma muy sutil,
de forma muy lenta.
Y, en su lugar,
quién me trajo esta melancolía
de imágenes de película panfletera
que me hacen pensar en velas
cuando nací en su funeral
prostituto de quimeras.
S.
Tuesday, June 22, 2010
Mi corazón llora por Colombia
No es mucho más lo que puedo decir. Siendo Santos rectificado como presidente, quien ha sido acusado de delitos de terrorismo, quien ha violado la soberanía ecuatoriana en nombre de la guerra contra la FARC, quien es el sucesor del terrorista paramilitar llamado Álvaro Uribe, quien pudiera estar envuelto en los “falsos positivos”, no es mucho más lo que puedo decir. Dos preguntas surgen inmediatamente, ¿no? ¿Qué es eso de los “falsos positivos”? ¿Y qué me importa lo que pasa en Colombia? Para la primera, contesto rápidamente que se trata del asesinato de gente sin vínculos rastreables y desempleados por parte del gobierno de Uribe (del que Santos formó parte) que luego vestidos como miembros de la FARC para argumentar que ganaban la guerra a los terroristas (sí, terroristas ladrando su eco). Para la segunda, porque Colombia es parte de nuestra comunidad americana, que sufre y sigue sufriendo los embates de la explotación del imperialismo, que son criminalizados, que son abusados, marginados, mientras siguen siendo nuestros hermanos. De hecho, muchos de ellos están esparcidos por el mundo, desde Europa hasta Puerto Rico, en busca de huir de esa explotación, pero sin conseguirla realmente, en un exilio obligado por las circunstancias.
Juan Manuel Santos es el nuevo presidente de Colombia. Y no me vengan con que es la voluntad del pueblo cuando los medios masivos manipulan la información, cuando todo se basa en tratar de convencer a los colombianos que el capital extranjero es la semilla para el futuro del país y, por ende, hay que espatarrarse y servir de puta…. ¡y silencio! ¡Y pobres de los que quieran romper con ese silencio!
Pero, para este nuevo presidente terrorista, no le hagamos ese favor. Rompamos ese silencio en honor a las injusticias que cometen para servir de rameras al imperialismo, las injusticias que cometen contra los disidentes, contra los campesinos, contra los desempleados, contra los que no forman parte de esa elite lista para repartirse el puerco. La voz es una y clara: Colombia es de su gente. Así de sencillo. Nada más. Pero para lograrlo, hay que romper con el abuso y hacerle dejarle sentir a la gente que deben recuperar su porvenir en honor a los suyos, y eso no inmiscuye a intereses privados ni exteriores….
Mi corazón llora por Colombia, porque sus cadenas me recuerdan las lágrimas que también he derramado por Honduras, Panamá, Chile y Puerto Rico.
Juan Manuel Santos es el nuevo presidente de Colombia. Y no me vengan con que es la voluntad del pueblo cuando los medios masivos manipulan la información, cuando todo se basa en tratar de convencer a los colombianos que el capital extranjero es la semilla para el futuro del país y, por ende, hay que espatarrarse y servir de puta…. ¡y silencio! ¡Y pobres de los que quieran romper con ese silencio!
Pero, para este nuevo presidente terrorista, no le hagamos ese favor. Rompamos ese silencio en honor a las injusticias que cometen para servir de rameras al imperialismo, las injusticias que cometen contra los disidentes, contra los campesinos, contra los desempleados, contra los que no forman parte de esa elite lista para repartirse el puerco. La voz es una y clara: Colombia es de su gente. Así de sencillo. Nada más. Pero para lograrlo, hay que romper con el abuso y hacerle dejarle sentir a la gente que deben recuperar su porvenir en honor a los suyos, y eso no inmiscuye a intereses privados ni exteriores….
Mi corazón llora por Colombia, porque sus cadenas me recuerdan las lágrimas que también he derramado por Honduras, Panamá, Chile y Puerto Rico.
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