Monday, June 25, 2012

Threat of Nuclear War

“The threat of nuclear war is extremely serious and growing, and part of the reason is that the nuclear states, led by the United States, simply refuse to live up to their obligations, or are significantly violating them.”
-Noam Chomsky
(What we say Goes, Metropolitan, 92)


Monday, June 18, 2012

El pueblo tiene lo que se merece



En mi ensayo anterior mencioné que esperaba abundar pronto sobre el voto en la isla y lo prometido es deuda, aunque hago la salvedad que no hay tanto que abundar. ¿Qué se puede decir de un pueblo que le dio todo el poder al PNP en el 2008 solo por hacer un cambio, el que fuera (sin analizar las implicaciones del candidato por el que votaban)? Sola una cosa: NO MERECE EL VOTO. Sé que suena fuerte, especialmente cuando se toma en cuenta que la imbecilidad del electorado no es una cosa exclusiva en la isla, y que el sistema está infectado de la imbecilidad imperante del sistema gringo, pero…Come on! Entiendo que Aníbal no merecía ser reelegido y que, para colmo, no había ningún otro candidato que valiera la pena más allá del vasallo de Rubén Berríos, ¿pero eso significaba votar, no digo por Fortuño, pero por el PNP en todas las facetas? Ok, ok, la división y constante pelea en el cuatrienio anterior junto al fracasado “gobierno compartido” del 2004 (otro hijo bastardo del consenso de Sila) invitaban a votar íntegro pero, ¿votar por el PNP? O sea, ¿darle un voto de confianza al mismo partido que trazó la estrategia de impedir gobernar por todo un cuatrienio en contra de los intereses de aquellos que juraron representar con la única intención (lograda) de subirse al poder? ¡¿Votar por un Rivera Schatz!? Me reí cuando, aquel día de los macanazos frente al capitolio, una radio escucha que había votado por ese neo-nazi decía estar arrepentida y no esperar la actitud macharrana, autoritaria y homofóbica de ese tipo. ¿Y qué esperaba?! ¡¿Acaso no lo había escuchado hablar y actuar antes?! ¿Qué carajo hace la gente antes de votar? ¡¿Tin-marín-de-los-pingués?!

Entonces vuelvo, no se merecen el voto. Escoger a ese gobierno y volver a elegirlo de un color u otro (la oferta del partido que se ofrece como solución o el “voto útil” es exactamente la misma pero con un color de corbata diferente) demuestra una falta de conciencia ética a la hora de emitir el voto. Y no pare más, el fanatismo y la imbecilidad no pueden ser el norte de una comunidad. Por eso entiendo que se debiera hacer lo pertinente para reexaminar el derecho al voto. Cada persona con la intención a votar debería tomar un examen con un porcentaje mínimo de requisito para pasarlo y que solo esos tengan el derecho a escoger con conciencia a sus representantes en el gobierno. La pregunta sería, ¿qué examinar en ese examen? Pero cierta conciencia de contextualización histórica y cultural, de capacidad crítica y de libertad de pensamiento deberían ser un “must”.

Sí, sé que suena anti-democrático, elitista, extremo, cruel, etc., pero, ante un sistema como este, donde los candidatos son meros objetos de consumo y se promueve un mismo sistema bajo leves oposiciones que varían en estilo pero venden candidaturas, ante una prensa que es loca por criticar al sistema y a los elegidos para vender titulares pero fomentan el pensamiento del cambia-cambia y favorecen al que mejor negocio les traiga, ¿queda otra alternativa? Por eso es que tenemos a una gama de candidatos de las que ninguno sirve (ni siquiera los de los nuevos partidos), y la gente se tiene que conformar con “el menos malo”. El problema es que el “menos malo” nos ha cavado esta tumba. Y, ahora, ¿quién podrá defendernos?

Tuesday, June 12, 2012

Towards Freedom

“This is the first time since the Spanish conquest that Latin America has begun moves toward independence and integration. I have to qualify that-they have tried it before but were crushed.”
-Noam Chomsky
( What we say Goes, Metropolitan, 62)

Sunday, June 10, 2012

Robarse las elecciones: Ensayo #1



Un fiasco. Eso fueron las pasadas primarias de los principales partidos políticos, pero nada huele tan fuchi como el complot que se anda descubriendo día a día en “Guaynabo City”. Y es que en esa burbuja de ecosistema anormal, donde se marcaron pautas al ser pioneros en usar nombres en inglés para subrayar dos mentiras (1. que se habla inglés y 2. que Guaynabo es tal cosa como un “city”), ha perdido su caché y se ha hecho el emblema más grande del robo, la estafa, y la conspiración que mancilla al ya delicado orden electoral, ese que pretende montar la quimera de la democracia. Del mismo modo, O’Neill, alcalde que hasta ese evento tuvo mis respetos y el de la mayoría de las personas, aun cuando no militaran en ese partido, se ha embarrado hasta el cuello con su actitud y su sospechosa participación en todo eso. De ser un alcalde respetable y líder, parece haber pasado a ser autor intelectual de la conspiración. Todo apunta a eso.

El caso: Dos representantes enfrentados en primarias. En una esquina, Antonio “Tony” Soto, en la otra, Ángel Pérez. El primero apoyado por el alcalde de Guaynabo y la maquinaria del partido, el segundo, al parecer, por la presidenta de la Cámara de representantes. Ambos usaron a electores falsos para sumarse votos. El ganador, específicamente, logró movilizar a empleados para decir que vivían en direcciones falsas de hogares vacantes que al parecer fueron identificadas y separadas por el gobierno municipal.

Esto parece demostrar que hubo un esquema para burlar el ejercicio del voto. Todo orquestado por la mano del partido que jura defender los principios democráticos inspirados en los valuarles estadounidenses (que sean aquellos ciertos o no es otro tema). Parece mentira que ante tanta gente guardando silencio, el informe tardó tanto en ser remetido a justicia, pero ahora que el proceso va en marcha, pobres de los policías y empleados que se jugaron el todo por el todo a cambio de favores políticos en algún futuro, poco a poco deben estarse dando cuenta que el pago de todo esto va a ser la espalda de aquellos que prometieron villas y castillas (empezando por el acalde, que dudo que vaya preso), y la cárcel. Parece que no aprendieron de Rosselló y como éste dejó hasta a su mano derecha pudrirse solita sin ningún cargo de conciencia, aun cuando, al fin y al cabo, ella rompía la ley para mantener contento a su jefe.

Que quede claro, lo que ha pasado en Guaynabo no es nada nuevo. De hecho, es un robo calcado de los Estados Unidos, donde presidentes de alta reputación como JFK lograron la presidencia con sospechas de nombres fatulos llenando votos que debieron ser invisibles.

Y sin embargo, me temo que este caso de Guaynabo no es más que el principio, un ensayo del partido en el poder para tratar de robarse las elecciones. Si las elecciones son cerradas, como me doy el todo por el todo de que van a serlo, ya el PNP sabe cómo darse el pequeño empuje que necesitan. Fíjense que el ejercicio fraudulento fue probado por ambos candidatos y por distintas facciones del mismo partido. Claro, llegadas las elecciones será más difícil, dado que se supone que hayan representantes de los otros partidos velando la cosa, pero aun así, cuando el pulseo se va de parte y parte, suena a que alguien va probando las aguas. A mi me importa tres carajos que le afecte al PPD u a otro partido, lo que me importa es que se burle al electorado y que luego sean tan descarados de ponerse guapos en cámara, mientras mascan palabras como democracia, libertad, progreso… ¡un asco!

Eso es lo que pasa cuando se gana tan abrumadoramente como ganó ese partido en el 2008. El partido que, históricamente (no, no es de ahora, el PNP siempre ha estado lleno de guapetones de barrio que implementan su voluntad a fuerza de cojón, desde Romero Barceló y sus presuntos balazos ordenados a domicilio, hasta Rosselló y su “Frankly my dear, I don’t give a damn”), ha demostrado que se pasa la voluntad del pueblo por donde no le da el sol una vez se sienten validados por los votos, recibió un cheque en blanco sin que mediara ninguna oposición para balancear la cosa.* Pero la gente quería un cambio, sin detenerse a pensar por qué cambiaban. ¿El resultado? El peor gobierno que hemos tenido…el más corrupto, el más incompetente, el más anti-democrático. Punto. El que diga lo contrario, olvida la historia reciente.

Hay muchos que ya han olvidado, como si alguno de los “Men in Black” le hubiera borrado la memoria, y repiten lo que dicen los que viven borrachos de poder: todo es culpa de la pasada administración (que de hecho fue dominada por el PNP, algo que la gente ha olvidado) y nosotros hemos salvado esto. Con un electorado así, es fácil seguir engañando, seguir robando. Con un electorado así, no me cabe duda que este ejercicio fue un ensayo para robarse las elecciones en noviembre (y en las otras consultas este año), y nadie dirá mucho, aunque mucho penepé vendrá con su “¿y qué?” guapetón de siempre, y todo el mundo pa’ su número.

*Abundaré pronto sobre el voto en la isla