Tuesday, December 27, 2011

Los 1,100 asesinatos

Puerto Rico lo hace mejor. No cabe duda que, si no lo hacemos mejor, estamos ahí-ahí, compitiendo cuello a cuello con otras regiones…en ser los mejores….en hacer lo peor. Finalmente hemos pasado el record de asesinatos por año. Hace rato pasamos los 1,000 en una isla que casi no se destaca en el mapa mundial, y que no tiene ni 4 millones de habitantes. Pero gente, ¡aplaudan! ¡Somos el país más violento en términos proporcionales de América Latina! ¡Lo hacemos mejor! ¡Nos cogimos por el culo a la mierda esa del cordero blanco y nos volvimos más violentos que nadie! ¡Somos locos con ver la sangre correr! Somos locos matando a hermanos boricuas, y no solo al que estaba en negocios turbios, sino a todo el que se lleve uno de por medio….y a veces, esto es hasta literal, dado que se han dado caso de personas que le han pegado un tiro a alguien solo porque te tocaron bocina cuando el asesino guiaba tan mal que hizo un corte de pastelillo. Así de grande somos que no tenemos ningún respeto por la vida humana.

Claro, estos son los resultados de años de cosecha con semillas podridas. Yo no sé si es el complejo colonial o el insularismo o la cosa del tamaño de la isla (sí, la tenemos pequeña, ¡vive con eso mijo!), pero el boricua lleva siglos de querer ser el más guapetón, el más listo, la pendejá, no del caribe, ¡sino del mundo! Eso no es nuevo. Libros hay demás que hablan del tema, lo que es nuevo desde hace unas décadas y que ha ido incrementando hasta salirse de control es mostrar esa marca de territorio a fuerza de balas o violencia en general. Basta ver a la gente empujándose y entrándose a pescozas en el viernes negro solo para ahorrarse pal’ de pesos por algo que bien pudieran encargar por Internet con el mismo descuento. Ver a la gente empujándose solo por entrar mostraba este guille bien boricua de que “el más listo soy yo”, ese mismo guille que mostró Carlos Pesquera al entrar a la cañona a la procuraduría de la mujer, ese mismo guille que se ven con los cabrones que empuja o se cuelan para llevarse 20 bolsas de hielo (que se jodan los demás) cuando no hay luz después de un huracán, esa misma desconsideración de llevarse la comida por cajas en momentos de emergencia. En fin, ese guille de que YO, YO, y YO soy el más cabrón aquí.

Ese individualismo salvaje y desmedido denota una falta de empatía con el otro. Si no es parte de tu familia, que se joda, que esto es la ley de la jungla al cuadrado, el sálvese quien pueda. Yo estoy seguro que si este chorro de cabrones asesinos que se pasan matando por joder, o tirando balas al aire porque ganó Cotto, o atropellando a gente por su borrachera, lo pensarían dos veces si se tratara de su hijo, de su madre, de su abuela, de alguien cercano. Pero la guapería y la ley del más malo traducen el todo en un “que se joda”, y en una vendetta si me tocan a mí a los míos, tipo mafia italiana pero sin el orden ni la disciplina.

Siempre está el que vincule este crecimiento en asesinatos con el gobierno de turno. No es de sorprender. De hecho, yo lo he vinculado una que otra vez. Este gobierno se ha caracterizado por insistir en un lenguaje y un estilo sumamente violento, desde los insultos del presidente del senado contra mujeres, homosexuales, y minorías, hasta el despliegue de la policía para entrarles a macanazos y gases pimienta a estudiantes desarmados. De igual forma, el crimen se les ha salido de las manos al derrumbar puntos para lucir bien ante la opinión pública sin garantizar luego la seguridad necesaria que los bichotes proveían dentro de sus territorios asignados en el bajo mundo. Y es que por supuesto, aun siendo el territorio estadounidense con más uniformada, la policía no da abasto para proteger si tienen que dividirse en derrumbar puntos de droga, proteger luego al caos consecuente, y servirle al ciudadano. Mucho menos va a dar abasto cuando los recursos policiales son malgastados en perseguir a ciudadanos que protestan contra los atropellos del gobierno, o contra los estudiantes que exigen una mejor educación a un costo limitado.

Pero el problema es mucho más complejo que eso y yo no pretendo ser quién para dar al punto con todos sus aspectos. Sin embargo, si bien es cierto que el gobierno de turno tiene que ver con la creciente ola de asesinatos y violencia, este es un país violento en el que el promedio de asesinatos no ha bajado de 700 en los últimos 25 años, lo que, nuevamente, para una isla tan pequeña, es inaceptable. De igual forma, la violencia del día a día que contrasta con eso de la “isla del Edén, Isla del encanto” también es algo que yo y mi generación vivió en carne viva y por la que muchos decidimos irnos de la isla, buscando nuevos lugares y nuevas situaciones, buscando nuevas perspectivas a las ideologías imperantes estancadas de la isla.

Por un lado, la falta de educación en la isla ha sido un problema que llevamos arrastrando por décadas. Basta con comparar la calidad de educación de las generaciones anteriores a nosotros para darse cuenta de que esto huele a fuchi. No estoy diciendo que todo tiempo pasado era mejor, pero mientras hoy en día nuestra jerga se vuelve más hacia el spanglish, las generaciones de antes del 50 batallaron una lucha campal contra la imposición del inglés en la isla, aferrándose al español boricua como fuente de identidad. De igual forma, la música popular tenía más riqueza temática y musical, especialmente a partir de los setenta, y en las mismas artes plásticas teníamos a personas haciendo las propuestas más interesantes desde Oller. Hasta el político más charro tenía cierto dominio de la oratoria como Albizu Campos, y hasta en menor medida un Luis Muñoz Marín y un Rubén Berríos. Todo esto reflejaba cierto nivel educativo, que se ha ido perdiendo poco a poco por la pereza colectiva y por una educación atada a reglamentaciones federales basadas en números y porcentajes en lugar de calidad, que no funcionan ni a nivel federal, mucho menos en un territorio. Para colmo, en la pasada década esta erosión ha sido más marcada con la cancelación de actividades culturales como las noches de galería (ahora amenazan a las fiestas de San Sebastian también), y el aumento del miedo colectivo como resultado de la ola de asesinatos, aumentando cada vez más el aislamiento y la falta de empatía con el otro. Y claro, si cuando habían ciertos estándares de calidad versus cantidad esto se reflejaba en los quehaceres culturales, ahora tenemos reguetón, Maripily, la Castro, y la Comay como el programa local número uno. ¿Dónde están los programas infantiles que me amamantaron cuando niño? ¿A dónde se ha ido la programación local? ¿Cómo es posible que mis sobrinos hablen de pastel y no de bizcocho? Ahora tenemos jóvenes que no saben que es “iba” y no “iva” o “hiba”, que es “ha” y no “a” cuando se trata del verbo “haber”, que es trabajo y no “job”, etc. No, la TV se ha mal parido de programas donde las gaznatás enlatadas son la orden del día, dónde el juzgar al otro es lo que hay que hacer (no mostrar empatía sino antipatía…a tirar la primera y todas las piedras en una isla hipócritamente cristiana), donde el sensacionalismo y la violencia hacen noticia. Y sí, esto no es único de Puerto Rico, pasa en Perú, en Estados Unidos, en México, en Chile…pero, ¿por qué tenemos que copiar siempre lo malo para luego quejarnos de los problemas que nos van asfixiando colectivamente?

Y es que el gran experimento de Puerto Rico culminó finalmente en convertirnos en la isla-ghetto. Aquí voy a usar un poco la ficción porque es lo que hago, y me voy a referir a “The Wire”, esa serie de HBO que hacía una crítica cuasi perfecta a todo el sistema norteamericano a través de la ficción televisiva por cable. En esa serie se retrata cómo el sistema norteamericano está corrompido por todas partes, desde el bajo mundo hasta la policía, la política, la educación, los sindicatos, y el media. Lo más triste de ver la serie es pensar que ese mismo sistema es el que se ha impuesto en la isla, convirtiéndola en un ghetto donde todos están atados a unas reglas de las cual es imposible salir; la educación se basa en números y no en resultados concretos (gente educada), la policía se rige por los mismos parámetros, los cuales no resuelven más que estadísticas, la política se debe a los que invierten dinero, los sindicatos viven su propia mafia, y el media….el media es el poder que hace lo que le da la gana sin que nadie lo fiscalice, persiguiendo agendas y vendiendo noticias en lugar de informar y educar sobre lo que informa. Lo peor de todo esto es que, dada nuestra relación con los Estados Unidos, estamos sujetos a esas reglamentaciones federales, que si no les funcionan a ellos, mucho menos a nosotros. Cosa que no se resuelve a menos que dejemos de estar sujetos a esas leyes, o sea, ni con la estadidad ni con el ELA….pero claro, no todo se basa en eso, y hay cosas que he mencionado antes que también tienen que ver con el tener un poquito de respeto por el otro, cosa que cada vez parece ser cosa más rara.

Mas claro es que esta violencia no se va a resolver en un futuro cercano, por más que los números bajen, y no se va a resolver a menos que se atiendan los problemas de raíz…..tardando una o dos generaciones aun. Y nunca se van a resolver si seguimos poniendo parchos y seguimos atados a las cadenas del absurdo que rigen en el norte. Y ya es hora que nos levantemos para resolverlos en lugar de seguir encerrándonos.

Monday, December 19, 2011

El capitalismo latino

“En América Latina, el capitalismo es antidemocrático, con o sin elecciones: la mayoría de la gente está presa de la necesidad y está condenada a la soledad y a la violencia.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 90)

Monday, December 12, 2011

Sin embajada

“[…] bien dicen por ahí que los Estados Unidos están a salvo de cuartelazos y dictaduras militares porque en los Estados Unidos no hay embajada de los Estados Unidos.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 89)

Tuesday, December 06, 2011

Los nueve de Calle 13 (Sin-Censurarme)

Los nueve de Calle 13


No es la primera vez que hablo de Calle 13 y sospecho que no será la última, pero recientemente se llevaron el galardón de 9 premios de Grammys Latinos, sumando a 19 los que se han llevado en tal concurso en sus seis años de formación. También han sido nominados para los Grammys de Estados Unidos en la categoría latina de música pop, rock o álbum urbano. Por un lado no debe sorprendernos. El último disco de Calle 13, “Entren los que quieran”, ha sido el trabajo más maduro y de mensaje más profundo que han sacado al mercado. La canción de “Latinoamérica”, que ganó el premio a mejor canción del año (si fuéramos a hablar de calidad y resonancia, ¿cabría duda?), no solo ha dado mucho de qué hablar, sino que se ha convertido en himno de lucha desde Puerto Rico hasta Chile y de toda Latinoamérica. En adición a eso, el disco tiene una variedad de ritmos y experimentaciones musicales como nunca antes habían hecho, aun cuando a mi entender, lo mejor del grupo es precisamente la música más que la letra, aunque en “Entren los que quieran” la letra me dio un tapaboca, justo cuando ya creía que René se había quedado un poco estancado en cuanto a rima y temática. Por el otro lado, sí es de extrañarnos que haya ganado. En primer lugar, estamos hablando de un grupo que se las ha jugado duro al criticar los valores atesorados por el status quo, desde la Iglesia católica hasta los políticos de turno. De igual forma ha sido censurado por la radio en Puerto Rico y en Colombia, hasta dónde sé, y criticados por los que se han sentido ofendidos por sus mensajes. Además, no estoy acostumbrado a que los grupos o cantantes musicales ganen en base a la calidad de su música y sí en base a ventas e influencias. El mejor ejemplo es que Calle 13 acabó de desbancar a Juanes como el más galardonado en los Grammys Latinos: Juanes 17, Calle 19. O sea, Juanes, que desde que le pide a Dios por la camisa negra yo no sé cuál es la diferencia entre las cosas que canta. ¿Otro ejemplo? Shakira, que también fue galardonada. ¿En serio que tengo que hablar al respecto?


Por mi parte digo que aun cuando los Grammy latinos valen mierda, los 9 de 10 que ganó Calle 13 han sido más que merecidos, no por ventas como otros, sino por calidad, tanto musical como lírica. Pero claro, no faltó la mitad de la boricuada abochornada que puso el grito en el cielo. Hablaban de “esos cafres”, “esa gente que auspicia la violencia contra la mujer”, esos que dan “mal ejemplo”, “esos ateos”, esos representantes de “una minoría” en la isla, “la mierda está de moda”, esos que “se creen suramericanos”, “esos que a mí no me representan” sino a “esas sociedades latinoamericanas”. Luego salió el gobernador diciendo que le felicitaba pero que debía de estar agradecido de vivir en una democracia ya que en otros países no podría decir lo que dice, a lo que René le salió al encuentro con una magnífica respuesta: “él habla de la democracia como si fuera un privilegio” dado, claro, por el Tío Sam. Irónicamente, si no fuera por la conflictiva relación de Estados Unidos con Puerto Rico, el gobierno pitiyanqui de Fortuño sería el primero en acabar con los derechos de la mal llamada democracia. ¿No fue él quien censuró a la izquierda de la Universidad de Puerto Rico? ¿Acaso no fue su gobierno el que atropelló estudiantes? ¿Acaso no fue su gobierno el líder detrás del espionaje político que hace la policía en las marchas? ¿Acaso no fue su gobierno el que cerró las gradas del Capitolio a la prensa, el que censuró las expresiones de Calle 13 (que el gobernador era un hijo de puta….hijo de puta, hijo de puta, HIJO DE PUTA….que mucho me gusta repetirlo carajo…y es que hasta el “cabrón” le queda corto….o sea, Aníbal era un cabrón…es más, Rosselló era un hijo de puta, Fortuño es un cabrón hijo de puta y más), que lo censuró en la radio y le prohibió presentarse en San Juan? ¿Acaso no fueron ellos los que colgaron un proyecto de felicitación para el grupo, que entiendo es una estupidez, pero que sí fueron capaz de otorgarle al mafioso cubano Julito Labatut, quien fuera nombrado por Ernesto Abraham Arzola Martínez, ex agente de la policía de Puerto Rico y en testimonio para el FBI, como el que conspiró y dio la orden para asesinar a Carlos Muñiz Varela, cubano en la isla a favor de la revolución cubana?

¿De qué democracia habla este …..hijo de puta? ¿Me quiere decir que matar es permitido y hasta homenajeado pero criticar al gobierno es, como mucho y después de mil censuras, un “privilegio”? No en balde ya hemos pasados los 1,000 asesinatos por año. Si esa es su democracia…pues, como andan las cosas, sálvese quien pueda.

Mas después de toda esta diatriba es obvio que los que fueron heridos cuando Calle 13 ganó más premios que nadie en la historia del certamen son todos de obvia tendencia derechista, penepé y pitiyanqui, que amparados en el concepto de ser la “mayoría”, cosa que es totalmente relativa y cambiable, pretenden que se erradique cualquier otro discurso que no sea el que ellos favorecen, y hasta aplauden cuando tal acción es ejecutada (¿hasta la muerte?), diciendo que “gracias a Dios acá no se escucha eso”, “se pasaron”, “se creen suramericanos”, y/o “a mi no me representan”. Lo más cómico, por no decir patético, es que esta gente hablan del resto de los países latinoamericanos como si fueran una cosa totalmente distante y ajena, como si Puerto Rico no fuera parte de los países latinos.

Al parecer, tener esa libretita azul les confunde y les hace imaginarse blanquitos. Es de entender, a veces, que hasta en “esas sociedades latinoamericanas” (fíjese la negación a ser naciones….no, son meras sociedades) crean que esa libretita nos hace hablar perfecto inglés y que no somos parte del conglomerado de países latinos, pero los norteamericanos tienen muy claro que el inglés no es nuestro primer idioma y que somos de otra cultura (sorry). Es más, por lo general, creen que somos otro país y no su territorio, y hasta se confunden cuando uno les muestra la dichosa libretita que también hace confundir a esos boricuas que se creen estadounidenses. Son esos abochornados los que hablan de “esas sociedades latinoamericanas”, demarcando el desprecio con el uso del pronombre demostrativo (esas), tratando de profundizar que hay una diferencia.

Yo me pregunto qué cabeza tan enajenada piensa que Puerto Rico tiene más características en común con Texas o cualquier otro estado de Estados Unidos que con cualquier país latino. Quizás es que temen que si los estadounidenses entienden lo que canta Calle 13 nos darían una patada, así que necesitan pedir perdón y decir que ese grupo solo representa a una “minoría”, que su mensaje carece de ningún valor, etc. Quizás es que prefieren cantantes monótonos que no tengan ninguna propuesta meramente retante y que, mucho menos (horror de los horrores), canten de cómo los latinos andamos de jodíos. Mejor que canten de amor a que canten de “la operación cóndor invadiendo mi nido”. Mejor que canten del “Waka Waka” y que muevan las caderas antes de cuestionar la “payola”. Pensar es inaceptable, mezclar ritmos con nuevos ritmos es muy incómodo, mejor es quedarse en lo que uno conoce en estos días de mucha gente sin cojones….(pero que se están viendo amenazados por las protestas en Puerto Rico, Chile, Colombia, Estados Unidos, Grecia, Irlanda, Italia, España, Inglaterra…de gente que sí está dispuesta a poner hasta sus cuerpos para protestar en nombre de un mundo mejor).


Para esos que se molestaron, es aun mucho peor es que un grupo de Puerto Rico que ha sido reconocido a nivel mundial busque las conexiones que unen y nos unen a “esas sociedades latinoamericanas”, que promuevan la unión de Latinoamérica, aquel proyecto que todavía late en las cabezas de nosotros los utópicos, heredada desde el siglo 19 y que por personas como éstas que no se creen latinos, que se empeñan en la diferencia en lugar de construir desde ella, y que son locos con aliarse al Norte siempre y cuando ellos estén bien, ha sido imposible de alcanzar (además de por otros factores como la corrupción de los líderes, la violencia, y la traición de esas ideas por gente que se han enamorado de su rol patriarcal).

No, es mucho más fácil ampararse en la ignorancia y hablar despectivamente del grupo, haciendo a un lado la acción política que han ido llevando a cabo más allá de la tarima por todo esto tiempo (no toda va a sus bolsillos…como sí todo va a los bolsillos de los cantantes que defienden), ignorando la intención detrás de los insultos y las palabras fuertes, ignorando incluso su temática ya que no se han dado a la tarea de escuchar con detenimiento. Y no solo eso, sino descartar cualquier defensa del grupo aun cuando se le argumente en su defensa, y es que, volvemos a lo mismo, los que hablan de democracia son los primeros en descartar cualquier otro argumento que no sea parte de la fantasmagórica “mayoría”, como si la mayoría no tuviera la carga histórica de cometer errores, horrores y estupideces.

¿Saben quiénes representaron a ciertas “mayorías” en determinados momentos y contextos? Los Nazi. La gente alemana, en su “mayoría”, apoyó a Hitler. Pero no nos vayamos tan lejos, la “mayoría” también apoyó a Bush Jr. en su reelección, la “mayoría” apoyó a Rosselló y la “mayoría” cometió la estupidez más grande de poner a Fortuño y a Rivera Schatz en el poder. Esa es la sabiduría de la “mayoría”, y se vuelve peligrosa cuando esa mayoría quiere silenciar cualquier disidencia, desde Hitler hasta Pinochet, desde Franco hasta Videla. De hecho, esa “mayoría” sería mucho más poderosa si el gobernador pudiera silenciar a cualquiera que no esté de acuerdo con él, que apuesto es lo que él quisiera. ¿O acaso no es eso lo que sugiere entrelíneas cuando le responde a Calle 13? “Que dé gracias que vive en una democracia”…..porque si no….si no ¿qué? ¿Le van a dar pam-pam? Imagino se babean con la mera idea, un gobierno con guille paternalista pero con complejos de adolescente (y qué no van a adolecer si adolecen su identidad).

Sin embargo, Calle 13 es el mal ejemplo. Lo serán, quizás para aquellos que defienden cierta moral y hasta cierta religión, ¿pero eso significa que todos tienen que seguirla o creen en ella? Hay muchos que dicen pregonarla y se matan, se insultan, se traicionan…al menos el mensaje de Calle 13 siempre ha sido paródico en cuanto a la violencia y ahora solo promueve la violencia a través del arte y no de las balas. Si ese es el mal ejemplo, prefiero a mil Calle 13 que hablen mal del Vaticano pero que promuevan la paz, no solo en Puerto Rico, sino en toda Latinoamérica y más. Que vengan mil Calle 13 que se cuestionen las cosas un poco y que no repitan cosas y odien la diferencia, que aboguen por la educación y no las balas, que aboguen por los derechos del pueblo y no los gobernantes y sus amigos millonarios. Si así fuera, quizás no tendríamos más de mil asesinatos, quizás cambiaríamos las balas por palabras, por el diálogo, quizás haríamos tantas cosas juntos, como esas en que creemos nosotros los utópicos. Mientras no lo haya, yo me uno a las felicitaciones al grupo, y a todos aquellos que, como yo, tratamos de sacudir un poco las cosas que andan mal a través de las palabras, del diálogo y la educación.


*Gracias a Alfredo por incluir este artículo en su revista cibernética “Puerto Rico Indie”. Aclaro que la censura fue, irónicamente, autoimpuesta y no del editor, solo por si acaso eso de repetir el nombre del gobernador hijo de puta tantas veces pudiera ser ofensivo para los lectores en general.

En nombre de la democracia

“A lo largo de este siglo, América Latina ha sido invadida más de cien veces por los Estados Unidos. Siempre en nombre de la democracia, y siempre para imponer dictaduras militares o gobiernos títeres que han puesto a salvo el dinero amenazado. El sistema imperial de poder no quiere países democráticos. Quiere países humillados.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 88)

Cuba

“Nunca he confundido a Cuba con el paraíso. ¿Por qué voy a confundirla, ahora, con el infierno? Yo soy uno más entre los que creemos que se puede quererla sin mentir ni callar.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 75)

Tuesday, November 15, 2011

cambiar la realidad

“Y al fin y al cabo, actuar sobre la realidad y cambiarla, aunque sea poquito, es la única manera de probar que la realidad es transformable.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 75)

Tuesday, November 08, 2011

El exilio boricua

No es noticia nueva de que hay una emigración masiva de boricuas al exterior, desde los Estados Unidos hasta España y Argentina, entre otros. De acuerdo con el último censo, la población en la isla se vio reducida por primera vez gracias más que nada al constante flujo de jóvenes que buscan fuera de la isla el clichoso “futuro mejor”. Sin embargo, basta ir de visita a la isla para darse cuenta que la mayoría de los que se van son los más talentosos, los más brillantes, los que, cansados de encontrar las puertas cerradas a falta de pala, se larga pa’la mierda, fuera del calor y de los mosquitos, fuera de la humedad y los polvos del Sahara, fuera del mantengo y el fanatismo religioso y político, fuera de la corrupción socializada y la mediocridad. También es notable que los que se van, los que nos fuimos, somos los más que queremos a la isla, y aun cuando detestemos lo que pasa en ella, guardamos vínculos con la misma porque, a fin de cuentas, es nuestro lugar de procedencia. Contrario a la mayoría de los que se quedan, que lo que buscan son repeticiones, comodidades, estereotipos…y los peores, consagrarse a los partidos de poder para guisar o para mamar de la teta del mantengo, los que nos vamos somos los que podríamos aportar algo para que las cosas cambien, y sin embargo, encontramos las puertas cerradas tantas veces, que somos condenados a un exilio del que no hay regreso. ¿Por qué? Porque no encontramos cabida en ningún lugar dentro de esa sociedad enajenada, el laboratorio del Norte.

Así, he visto a 98% de mis amistades abandonar la isla en la pasada década. De hecho, solo me quedan unos tres amigos, y mi familia. Los demás andan esparcidos por los países antes mencionados y sin ninguna intención de regresar ya que no encuentran las mismas oportunidades que en Argentina, que en Estados Unidos, que en España. Y con la mayoría de los boricuas esparcidos ahora por el mundo, y volviendo a esas estúpidas estadísticas del último censo, los boricuas nos hemos convertido en los nuevos judíos, esparcidos por el desierto del mundo y merodeando de lugar en lugar solo por sobrevivir, sin ninguna tierra ya que el Puerto Rico del que vinimos no existe, y no tenemos patria u hogar en ningún lugar que no sea en el constante ir y venir, en el constante movimiento de andar 40 días en el desierto.

Irónicamente, este exilio sitúa a Puerto Rico en el mismo lugar del resto de Latinoamérica, y digo irónicamente porque mira que está el puertorriqueño tierra que se cree superior o diferente a los latinos por dis que la gran relación que tenemos con Estados Unidos, o esa libretita azul que tenemos que enseñar si nos vamos de viaje. El tener a la mitad de la familia y las amistades esparcidas por el mundo nos pone en el mismo lugar que los imbéciles de la isla temen, en el lugar de la isla mayor, Cuba. De igual forma nos pone en el lugar de México, de Colombia, de Nicaragua, de Guatemala, de Perú, de Bolivia, de República Dominicana y de Paraguay. Si no me creen, busquen en el tema más resonante en las películas de estos países, en su nueva literatura, y entonces me dicen. Tanta come mierdería de los que se sienten orgullosos de su ciudadanía americana y al final del día la emigración nos subraya como lo que somos; latinos. No hay forma que te borres la mancha de plátano mijo.

Sí, tenemos que partir a caminar regados por el mundo, como todos los latinos, siendo parte de una nacionalidad que se cuenta fuera del país de procedencia. Y no hay regreso, ya que desde el exterior vemos como gobiernos de extrema derecha siguen cerrando las puertas para los que no son parte de su mafia y mucho más para los que tienen materia gris, peligrosos porque son capaces de cuestionar. Por ende la guerra contra los departamentos de Ciencias Sociales, de Humanidades, de Artes plástica….la guerra y el boleto de ida sin vuelta, que se vayan porque en el proyecto de vender lo que queda de la isla a los grandes intereses, puedo citar irónicamente a un Fidel y decir lo que los gobernantes neoliberales nos dicen y les dicen a esos que no estén de acuerdo….”no los queremos, no los necesitamos”. Ajá, el gran temor de la derecha boricua de convertirse en Cuba se logró desde los gobiernos asimilistas y no desde ninguna izquierda, prácticamente inexistente en la isla gracias al deseo protagonista de las pequeñas elites.

Y es por que tenemos que partir…cantando quizás un viejo San Juan pero sin el “un día volveré”…..a menos que sea de visita porque en el caribe siempre se pasa bien, siempre y cuando no se viva allí. Esa es nuestra realidad, ese es nuestro día, esa la historia del exilio de los que quieren a la isla.

Monday, November 07, 2011

Cosa para pensar sobre USA e Israel en estos dias de amenaza a Iran

“IMPUNIDAD. Recompensa que se otorga al terrorismo, cuando es de Estado.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 53)

Monday, October 31, 2011

Cops

“Una nueva era: los Estados Unidos pueden ejercer impunemente su función de policías del mundo. Y ya se sabe que este país, que nunca fue invadido por nadie, tiene la vieja costumbre de invadir a los demás. En un par de siglos de vida independiente, más de doscientas agresiones armadas contra otros países independientes.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 47)

Tuesday, October 25, 2011

Las dictaduras

“Para obligar a los adultos a pensar derechamente, las dictaduras militares usan terapias de sangre y fuego y las democráticas usan la televisión.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 43)

Tuesday, October 11, 2011

A little thing called difference

I want to continue on that note and make an important distinction: is not about exoticism, is about plain difference and understanding of that difference. Every one of us shares similar needs, fears, feelings, while we blend our own receipt of understanding the world with that which we call “self”. That receipt inherits a bunch of stuff that we experience, as well as parts and bits of family, friends, the culture that surrounds us, and so on. They become part of who we are.

However, one thing is to like and be proud of his own inherence and another is to be packed along with the sack of stereotypes people understand of your culture (and other aspects too like gender, sexual orientation, etc.). While stereotypes help us approach difference faster, that is just the cover of a book, and if you have the experience of meeting that person, you should go beyond the package and forget about them. I mean, you need to really understand or try to understand that person, go pass the curtain. That is difficult, that is hard for each one of us to understand others with similar background, or even oneself, imagine a person of another culture then. In my case, while I am very proud of my background and my variety of tastes, and while I would defend Latin music and culture any day, it does not mean that I am your puppet of “puertorricanness”. I will laugh about it, I will mock myself about it, but you need to know where the joke lays. I won’t dance a-la-“West Side Story”, nor I’m a good salsa dancer, nor I would be your latin lover symbol. I will not sing just Latin crap because that’s the role you expect me to play, I’m not your toy (Latino Barbie model?). I’m a person …just like you.

Tuesday, October 04, 2011

PD.

Some of the groups I forgot: I didn’t mentioned anyone in the Anglo world so here it goes….Nirvana (their boom was in the 90’s, sorry), The Cranberries, Sublime, NIN (same as Nirvana), Dookie of Green Day, Red Hot Chilli Peppers, Manson, Eminem, Tool, Garbage, No Doubt, Portishead, Massive Attack, Prodigy….in Latin America I forgot about Mano Negra, Manu Chao, Bohemia Suburbana, Café Tacuba, Aterciopelados, Extremoduro, Mago de Oz….in Germany Rammstein, Subsonica in Italia….fill the blank with the French, Asians, Africans and Portuguese….

Monday, September 19, 2011

A 90’s boy

I’m a 90’s boy…or at least that is something I repeat a lot. Why? Because I hate the 80’s and the whole fascination with what it’s just a myth. It’s all fashion, I know, and thank God we are about to turn the page and start remembering the 90’s, because the 80’s were pure crap! Politically, it meant propaganda, a USA President who used to be an actor and it was going to be the first in line of a succession of morons, a lot of invasions to Latin America, the support to Osama Bin Laden and Saddam Hussein (seeds for pain to pay later), the end of counter-culture and the beginning of enslavement with a tie. In music it meant a lot of rock stars who looked like women and the excess of music as an industry. In fashion, a bunch of…well, bad taste, there’s no other word for it, (well, those were actually two words). Period. And of course there were some cool shit going on, but I was too little to even care. I had toys and old cartoons. That was about it. It was in the 90’s where I began to be more aware of it all and I became a fan of music, saw the CD’s and Internet becoming popular (remember ICQ? And chat rooms?) and affordable, saw an American President who played Sax (while he got his d*ck sucked) and saw a bunch of artists that were all about the attempt to recover a shock long gone in the industry. Movies went a little shittier as well as pop music, and there was Vainilla Ice but hey! I never said it was perfect! Those were my teenager years (as if I have escaped them).

It is funny however how some people have called me a bluff just because I don’t know some music or some Anglo reference of that decade. “And you call yourself a 90’s boy??”. Fucking idiots seem to forget that there is a whole world out there who doesn’t speak English and that have their own culture, their own events. As a 90’s boy in the Caribbean I saw other things besides the things I just mentioned; I saw 440, the rise and fall of merengue music, Chevy, El general, Vico-C on the top, Soda Stereo, the good times (were they any?) of Maná, The cup of life, Draco Rosa, Bunbury, Bersuit, Manjar de los dioses, oh and there was Daddy Yankee with a mustache…I mean, a hole of other shit going besides the Anglo world. But of course, to be a 90’s boy means to fit under the limited definition of the people who dared to say that I don’t have a fucking clue of the 90’s …and God forbids I don’t know any reference that didn’t make it to the island, even though they know shit about the 90’s in other parts of the world. It is the same arrogant ignorance (an oxymoron I know) of thinking that the whole world needs to know and follow your culture while you know shit about the other cultures. Or is it just plain old-fashioned colonialism? The mentality of the colonizer but without assuming any responsibility in the world of fake happiness?

So I am sorry, beyond your limited expectations I am a 90’s guy….I was too little in the 80’s and it was in the 90’s when I developed my tastes and personality….just a different 90’s from the one you know…just a bit. So, I’m glad we are about to forget about the 80’s and celebrate the 90’s…which means different things along the different latitudes.

Monday, September 12, 2011

Puppets of Identification

Motherfucking media….If there is a thing that characterizes us as human beings –if we are indeed–it’s our capacity to connect with others, to empathize. There are many ways we connect with the pain of another person, from a tear to a story, but there is a click (a thing) that appeals to us, to our sensitivity. Media, however, has learned to use this human trait in their advantage. It has become a technological machine that builds ideas for us, images, words and their definitions. It is the complex used to invalidate us from any action, to try to makes us feel comfortable at home and be entertained, and repeat what they say. Of course, media is a broad word right now. It is also used to manipulate people to think that “media is all bad”. It’s not. But take film for instance. You do want the good guy to get the girl at the end. That is Film 101, unless you think you are more sophisticated than that and that it’s just bull-shit, life is not like that, and that it’s just Hollywood crap (we teenagers). Fine, then he won’t get it and it will appeal to you, the snob who thinks is beyond all of that or the guy who doesn’t get the girl at the end. You choose. And I don’t know about you, but back when I was a kid, most of the games were “I am Luke and you are Darth Vader”, or you wanted to be the Raphael Ninja Turtle, or Leono, or even Ryu in a game. It was all about role playing because we all want to be something else, don’t we? As long as we are the heroes (or villains, not secondary characters, in other words, we want to be special).

We still play those role playing games. Why do we want to escape our reality? I don’t know, maybe just to underline our own sense of identity. However, we do play those games, and media uses that to build us heroes like Elvis or JFK, villains like Chávez and Gaddafi, or why we like this or that candidate instead of another. We will vote for the one we like at the end and make out a villain out of the other. Of course it is more complicated than that but media wants to keep it simple, to keep our brains at the same level of a kid, thinking in Manichean terms of good versus evil, either/or.

Hollywood is a product of the media construction of fantasies. I mean, Hollywood was meant to be the “blue blood” of America for fuck’s sake! Hell, not only America, most of the world has incorporated this model and has their own brand of celebrities to serve as our heroes and villains. We see in them our new frustrated gods to play “I am”, the ones we envy, the ones we imitate, the one were we see our own frustrated desires, the ones we like to see fall and condemn. It isn’t by chance that we treat them as if we knew them. We get happy when they marry, we cry their deaths. Don’t believe me? Remember the crying multitudes mourning for Michael, that’s all, I’m not even going to challenge that with previous examples like Lennon, Elvis or Monroe, but go and watch “Madmen” to see a representation of what happened when she died (season 2). Of course, it is not only them who die, but the icon on where we rested our own fantasies. Every single tear were a symbolic death of us.

The sad thing about it is that sometimes they cried more the life of these models more than their own friends or relatives. I mean, Winehouse is more important that your neighbor? MJ? Really? What about the real people who die from OD, from crime, from diseases? Are they just statistics? The ones with names in CDS and DVDS end up having their own films, museums, statues, improve sales and hall of fames, the everyday Joe ends in the long archive of numbers. STORED.

I know, I know, I do sound above all this shit. I’m not. I’m also a junkie of the fake gods (aren’t they all?) and like to play the role plays too. On the contraire, I have a lot of fallen heroes thanks to the ready-made models for the eye, ear and mouth. Lennon, Morrison, Cobain (I which I died at 27!), I was surprised by Whinehouse’s death, remember where I was when I learned about Brando’s death, and I know that I will see others fall, which I will mourn (heroes) or could care less (villains). My point is that it shouldn’t be like that. I should care more about my motherfucking neighbor (which I have just saw….but I don’t know), the one that I see in the street without food to eat, the person that gets shot in the street, the junkie…all of these people should have faces, should have names, and don’t just be mere numbers. They aren’t numbers, they aren’t statistics; they are human beings, each one with their own stories to tell but without the fame, all of them building the face of the human race. I hope that one day we get to see all of them and that we price them as much as those strangers sold by the media. Life should not just be a thing to buy, life is more than that.

Monday, September 05, 2011

La condena

“Para nadie es un misterio que los escritores tenemos el alma condenada al infierno de la angustia incesante: en el centro de ese hervidero, nuevas dudas responden a cada certeza y nuevas preguntas responden a cada pregunta.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 42)

Sunday, August 28, 2011

El despedazo


Ella era
la quimera de mis sueños,
orgía de mis pesadillas.
Espejismo al que me adhería
solo por abrirme heridas
por la posibilidad de abrirlas.

Así,
un buen día
me compró boleto de ida
hacia el país de las despedidas
para pasar una estadía,
una temporada en el infierno.

Sin despedidas,
sin lágrimas ni gestos,
mi femme fatale
y con hombre nuevo,
quien me empujó al umbral.

El desencanto
que más bien fue

El despedazo.

Así, en pedazos
abrí las botellas de whisky
para inyectármelas por vena.

Así, despedazado
Parte
Por parte
Fui deshilando
Cada verso
Cada palabra,
Cada sobra
para usarla de vestido
Antes de mi viaje.

Y vi que no quedaba nada
más que vacío,
Así que me abrí yo mismo
y me saqué cada rinconcito
de mis adentros
para mimetizarme.

….
Han pasado los días
Uno,
Dos,
Ceros

Y me he olvidado
de cuánto me queda
al igual que de mis pedazos.

Mas el dolor del corazón sigue
Latiendo los pasos del desentierro.

DS Gregory

Monday, August 22, 2011

Sobre arteobre


En una isla donde hay cada vez menos empleos, donde cada vez hay menos gente ya que o son asesinados o se ven forzados a irse, donde se siguen cerrando puertas y espacios de expresión pública, especialmente aquellos que sean gratuitos y del disfrute de la comunidad, resalta cuando dos o tres quieren jugar el papel de David versus el Goliat de la represión, la censura, la apatía e indiferencia que corroe a la isla. Son pocos, pero sus voces son fuertes e intentan insistir en las expresiones culturales, en el talento individual y colectivo que sale de gente originales de la isla, y en hacer arte por encima de los intentos de callar sus voces y de cerrarle todo espacio a ese tipo de manifestaciones (la importancia es para la ciencia y los que traen o se llevan el blin-blin). Ante esa oposición, es difícil encontrar sus voces. De hecho, parte de la estrategia del Goliat es esa división e insistencia en el individualismo, para que ninguna de esas voces se convierta en parte de una manifestación entre manifestaciones de arte. Los pluralismos heterogéneos representan siempre una amenaza para los que quieren extirparlos del espacio público con una agenda homogénea.

Es por eso que hace poco más de un año se levantó la página web de Arteorbe. Este portal supone ser algo así como un mejunje, una mezcla de todos los ingredientes que se cosechan en la isla a través del arte. Según Pedromiguel Pagán, quien desarrolló el portal, se trata de “ArteOrbe es un portal de apoyo a todas y cada una de las manifestaciones artísticas existentes, desde la plástica hasta la culinaria. Nuestro proyecto se vale de la tecnología y su arraigo social, cultural y económico para establecer un mecanismo multisectorial que convoca, reúne, expone, facilita, produce y difunde arte emergente local e internacional.” En otras palabras, se trata de una forma creativa de usar el medio cibernético, no solo para exponer arte (en el sentido amplio de la palabra), sino de conocer de y sobre otros artistas, mostrar la cría, reunir las nuevas voces que claman por su merecido espacio.

Ya era hora de que alguien tuviera los cojones para usar el Internet a favor de la creatividad isleña. Invito, pues, a todos los que crean (y creen) de una u otra forma, he aquí una ventana, he aquí una puerta, he aquí Arteobre.


Monday, August 15, 2011

Siempre escribo lo que pienso


En los últimos meses he sido criticado por algunas personas por mi supuesto “estilo violento”, mayormente en Facebook, pero la crítica se expande a algunas de las reacciones que he comentado en este blog y en lo que escribo en general. Al parecer y según esto, hay dos personas, la que aparento ser detrás de la conveniente letra (cibernética) y la que soy en persona. Se trata de un desfase de tal magnitud que han llegado a decir que aunque yo “soy un amor en persona”, el David de Facebook merece “un puño en la nariz”, en caso de que yo fuera así en vida real. Demás está decir que la crítica, al igual que el eco de la misma por otras personas, me tomó por sorpresa y, cómo no, me molestó un poco, podría decir que hasta me dolió. Sin embargo, al darle cabeza al asunto, me pregunto, ¿de qué carajo hablan? En primer lugar, yo soy tanto el David que conocen en persona (“el amor”) como el David que leen (el que quieren golpear en la nariz). Este último, que se expande desde las pendejadas en Facebook, al blog, y hasta cosas más serias, intenta mover un poco las cosas, cuestionar, criticar, mover el Jenga, y cómo no, joder, ¿no es para eso que se escribe? ¿No es para eso que se crea? ¿No es para mover los cimentos, cambiar las piezas desde realidades alternas? O sea, en el día a día vivimos la creación del performance que nos gusta jugar, más es en la creación, el arte, la palabra escrita o lo que sea, se esconde la intención de reaccionar a lo que vemos mal en el día a día y hacer algo al respecto desde ese lugar indirecto del arte en su más amplio sentido. En esos casos, no es nada personal, se trata de un ejercicio estético…y sin embargo, es totalmente personal para las personas que sean el blanco, pero ya no por ellos, sino por la idea en que representan en X o Y. Si no fuera así, ¿para qué se crea? ¿Para qué se escribe? Desde la estupidez más básica (de las que estoy preñado de ellas), hasta la cosa pequeña y genial que se escape en cierto momento, se intenta re-presentar para que se vea la hipocresía en la que nadamos día a día (no como instrumento de enajenación como la religión, sino como instrumento de enlace entre la imaginación de un mundo mejor y la presión para que nuestro mundo sea mejor). Los días de mimetizar pasaron hace rato. Hace ya más de dos siglos que vivimos en los tiempos del “shock”, del usar el arte para destruir la imagen estática de un mundo que antes nuestras cortas existencias parece que no se mueve, y aunque ya el “shock” es un cliché también, todavía es parte de nuestro código estético. ¿O porque sea un cliché debemos conformarnos y portarnos bien?

En mi caso hay también algo de válvula de escape, por más anticuado que ya esté eso del shock y de usar válvulas de escape, y si bien dirán que un lugar como Facebook no es el lugar para alguien que crea, todo lugar es un lugar, y para alguien que escribe, toda letra es un ensayo, una posible oración que haga sentido. Ahí podemos estar abriendo puertas en donde no se supone (el media no es creado para crear sino para enajenar, perdonen entonces los inconvenientes).

Lo cómico de todo esto es que yo no tengo el status para ser criticado de tal forma por lo que escribo, pero me temo que es precisamente por eso que se me critica. También es cómico el hecho de que esté escribiendo para defenderme cuando en nada importa. Los que me conocen no lo toman personal. Los que no me conocen no les importa. A los otros que sean ofendidos en interín, ¿qué me importa? ¿O acaso vivimos en los tiempos de las etiquetas o regresamos a ellos? ¿Por qué andar uno con ciertos modales y auto-censurarse, no decir las cosas para no herir los delicados egos de algunos que les gustan los malos modales siempre y cuando sean consumibles y no los de alguien que está comiendo en su misma mesa, digo, si es que llega a comer algo? Y ya hablando de arte y con toda la intensión de ponerme en esos lugares, ¿de qué sirve escribir algo si no es violento? Independientemente de que ya se haya hecho, si no sigue atentando contra los buenos modales, si no sigue invitando a golpear la nariz, ¿qué se logra? Para secarle las babas a la gente no se necesita escribir. De hecho, los grandes llegaron a ser grandes por su irreverencia. Baudelaire, Rimbaud, Arenas, Sade, Kafka, son algunos ejemplos. Zurita, Lemebel, Montecinos nuevos ejemplos, y en la música, todos amamos a un Lennon, a un Dylan, Waitts, Morrison, Draco, Bunbury, García, Cerati, un Silvio y un Cabral, no por ser “polite”, sino por ser abruptos, mal educados, violentos. De hecho, hace poco hablé sobre los que lloraban la muerte de Cabral en tono de mofa y me criticaron, a lo que tuve que responder que entre todos los que le lloraron, mis palabras violentas fueron el homenaje más cercano a su obra y, por ende, a su persona, porque no hay diferencia entre los dos. Pero claro, a ellos se les permite porque ya son validados, pero como yo no tengo validación mediática ni crítica, y me temo que ni tengo validación de muchos de estos que me conocen en persona, pues ¿cómo me atrevo a ver tan violento? No: debo callarme, censurarme, comportarme y ser el David amoroso que dicen que soy, lo que también es debatible. Me pregunto entonces, ¿acaso estas personas me prohíben mi derecho a crear, a reaccionar desde la palabra? ¿Acaso no me lo merezco? ¿Acaso lo que escribo no merece lugar alguno? ¿Acaso esos que me critican tienen la batuta para decidir?

Imagino que esto es lo que pasa cuando alguien se atreve a decir las cosas como las ve, sin ser nadie ni tener ningún sitial….va a ser largo el camino, pero no me pienso callar.

Sunday, August 07, 2011

El espejo del otro

Una de las cosas que nos caracteriza como humanos –si es que lo somos- es el identificarse con el otro. Puede ser la lágrima de alguien, la miseria, un mendigo, en fin, algo que nos mueva. Y hablo de extraños, no de seres queridos ya que por ellos actuamos por amor, interés o porque nos obligan. Sin embargo, con los extraños se desenmascara esa necesidad de identificarse en el otro para encontrar nuestra propia humanidad (que, sin embargo, tiene que conectar con nosotros a nivel personal de todos modos).

El media juega con esto y nos construye imágenes de fácil acceso con las que nos podamos sentir interpelados, no para movernos a la acción, sino por el contrario, para ser entretenidos. Es bien sabido para todos los que hemos tomado cursos de guión que uno de los objetivos cuando uno escribe para cine y especialmente para televisión es que se logre una identificación con la audiencia. Así, queremos que el chico enamore a la chica porque nos “sentimos como él”, o nos ponemos a llorar por tal o cual final de un personaje porque sentimos que lo conocemos de alguna forma. Sabemos que es una película pero igual estamos llorando como sendos pendejos. En ese sentido no solo somos manipulados, sino que somos infantilizados. Recuerdo cuando era niño como nos peleábamos por ser Leono, Luke Skywalker, Darth Vader, o Rafael de los Ninja Turtles. “Yo soy tal….tú eres tal”….incluso había algo de eso en los videojuegos y el escoger a Ryu sobre Ken en “Street Fighter 2”(y más vale que un nene no escogiera demasiado a Chung Lee). Así, hoy por hoy, todavía jugamos a ese “yo soy”, pero esta vez sin decirlo en voz alta para no sonar ridículos, para no ser expuestos como individuos manipulados por la ficción del pop-corn. Mas esa manipulación no se queda en las ficciones sino que se traducen en las ficciones que nos construyen el media, desde las noticias y la forma de presentarlas, hasta la farándula. Así, nos identificamos con tal o cual líder y despreciamos a otro sin indagar mucho más allá. O nos construimos héroes basados o la ficción.

Es por esto que Hollywood terminó creando al sustituto de la realeza en Norteamérica para luego empacarla al resto del mundo. Dentro de esa lógica se ha aplicado el modelo en los diferentes mercados nacionales y así, el cantante o artista X o Y nos sirve de conejillo para idolatrar, imitar, criticar, amar u odiar. Vemos en las imágenes de estos dioses construidos por el media el reflejo torcido de nuestros propios deseos frustrados. No es de sorprendernos entonces que para muchos los eventos de su vida sean tan importantes como los eventos de la vida de algún familiar, aunque nunca los hayamos ni visto en la calle. Muchos lloraron con la muerte de Monroe, Lennon, Elvis, Jackson, Cabral, y en su lloriqueo, se secaban las esperanzas de verse reflejados en los logros de unos extraños que fueron consagrados por haber logrado los sueños con los que nos amamantaron. Lo triste del caso es que muchos los lloran más a ellos que a la gente que muere en el día a día, a los vecinos, a los primos, incluso a veces hasta más que a familiares cercanos. Se llora la muerte de Winehouse, la de Cerati, la de Cabral, pero no les esperan las mismas lágrimas para los que no tenían nombres de neón en nuestros CD, en nuestras revistas, en la pantalla chica. Para esos anónimos les reservamos solo números y etiquetas: otra drogadicta, otra víctima de derrame, otra víctima del crimen. Los primeros terminan en películas, museos, mejores ventas y salones de la fama, los segundos terminan siendo estadísticas.

No pretendo estar inmune a la inyección de fantasías que nos proporciona Hollywood y el media en general, al contrario, son muchos los héroes caídos que tengo y envidio gracias a los sueños facsímiles proporcionados por ojo, oído y boca. Lennon, Morrison, Cobain, me dio pena el colapso de Cerati y la muerte de Winehouse, y de seguro viviré, celebraré y lloraré a otros tantos. No debería ser así. Debería importarme más el que tengo al lado, el que muere en la calle, el que pasa hambre, el que no puede salir de sus vicios, todos ellos deberían tener nombres, todos deberían tener rostros porque los tienen, no son meros números, no son estadísticas, son humanos con historias que sin fama, forman parte de este colectivo que hacemos pasar por humanidad. Invoco al subjuntivo del ojalá y con él espero que algún día nos miremos ante el espejo del otro sin los lentes discriminatorios que nos hacen valorar a una vida extraña más que a otra solo por el mero hecho de que son productos a consumir.

Thursday, August 04, 2011

La hipocrecia de la politica anti-droga

*“[…] no me entra en la cabeza por qué son malos los países que producen drogas, y malas las personas que consumen drogas y en cambio es bueno el modo de vida que genera la necesidad de consumirlas.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 41)

Tuesday, July 26, 2011

Un dios posible

“Yo sólo podría creer en un dios que sepa danzar.”
-Friedrich Nietzsche

Tuesday, July 19, 2011

La mamaera a Europa

“La memoria de América ha sido mutilada por el racismo. Seguimos actuando como si fuéramos hijos de Europa, y de nadie más.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 32)

Sunday, July 10, 2011

Sobre Facundo Cabral

(o por qué lo Facundo no quita lo Cabral pero las balas sí)

Ayer asesinaron al cantante Facundo Cabral y hay quienes no dejan de lamentarse, indignarse, llorar, encabronarse y etc., como si el tipo fuera eterno. Lo que más molesta, claro está, no es que muriera de viejo, sino que lo asesinaron. Es por eso que muchos claman por su beatificación. ¿Y por qué no? Tenemos algunos en la lista musical. Sin embargo, no entiendo la gran sorpresa con lo de Cabral y por qué muchos actúan como si se hubiera acabado el mundo. Gente mucho más importante que él y verdaderos luchadores de causas sociales han sido asesinados para callarlos, cosa que no parece ser el caso del cantante. Lo siento Rigoberta, Facundo ya no era una amenaza con sus letras como para ser asesinado “por su ideología”, de hecho, antes te asesinan a ti por eso. Del mismo modo, son muchos los anónimos que mueren día a día como resultado de balaceras en un mundo donde violencia y civilización van de la mano. Si una de las dos teorías resultan ser ciertas (1. que fue asesinado como resultado de matar al magnate de negocios y no a él 2. que fue un intento de robo), la lista de asesinados es larga, y muchos de ellos con la vida por delante. A ellos nadie los llora a tan viva voz excepto, quizás, los familiares. No estoy justificando los hechos o los asesinatos, ni abogo por nuestra insensibilidad por los asesinatos de este o de ningún tipo, pero debemos entender, por un lado, que ha sido parte de lo que somos, y por otro, que si vamos a poner en pie las letras de Facundo y muchos que piensan y hacen como él, se trata de una lucha que no requiere de personalismos y sí de muchas voces unidas para clamar, no por el fin de los asesinatos, sino por cambios radicales en las causas que han desembocado en este tipo de violencia. Si hablar de personas y del cantante vamos, las balas hicieron lo que el tiempo iba a hacer pronto. Cabral tenía 74 años y vivió su vida dignamente, ¿Cuál es la indignación entonces?

Monday, June 27, 2011

Los intelectuales racistas

“El más feroz racismo de la historia latinoamericana se encuentra en las palabras de los intelectuales más célebres y celebrados de fines del siglo XIX y en los actos de los políticos liberales que fundaron el estado moderno.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 28)

Monday, June 20, 2011

Las cosas cambian

“[…] la jerarquía de los bienes no es estable ni idéntica en todo momento. El que un hombre prefiera la venganza a la justicia se consideraba moral según la escala de valores de una civilización anterior, y se considera inmoral según la escala actual. ‘Inmoral’ significa, entonces, que un individuo no siente todavía lo bastante, los motivos intelectuales superiores y sutiles que la nueva civilización ha introducido: designa a un individuo atrasado, pero siempre según una diferencia exclusivamente relativa. La propia jerarquía de los bienes no se elabora ni se modifica según puntos de vistas morales; por el contrario, sólo después de fijada se determina si un acto es moral o inmoral.”
-Friedrich Nietzsche
(Humano, Gradifco, 51)

Tuesday, June 14, 2011

afirmaciones equivocadas...yo ya he dicho tantas

“La brevedad de la vida humana lleva a muchas afirmaciones equivocadas sobre las cualidades del hombre.”
-Friedrich Nietzsche
(Humano, Gradifco, 50)

Monday, June 06, 2011

Lagrimas del Caribe...

Hace unos meses hablaba con un amigo que me dijo que pasaba por días tan melancólicos que escuchaba a Victor Manuelle. No recuerdo la canción pero su comentario me hizo recordar un poco el tipo de música que le gusta cantar al cantante de salsa. Si bien es cierto que Victor Manuelle comenzó como una versión “juvenil” (o infantil) de Gilberto Santa Rosa (“el caballero de la salsa” o el Tito Rodríguez wannabí), y tratando de seguir en esa onda, luego se tornó más deprimente – ¡ehem! – triste…hmm, clichósamente triste, como esas canciones de balada moderna que siempre son de lo mismo o como una canción de Maná (si escuchaste una las escuchaste todas). Claro, mis recuerdos de la música de Victor Manuelle se basan en mis momentos en escuela superior y, luego, en los momentos posteriores en que alguien puso la radio en Puerto Rico y dieron alguna canción que para mí era nueva, aunque bien pudo haber tenido par de años y yo no hubiera podido diferenciar si era material nuevo o no. Lo era para mí.

Sin embargo, recuerdo que muchas veces sus canciones me llamaron la atención por ser sumamente tristes, o sea, al borde del suicidio de deprimentes, mega corta venas (aunque la versión pop…no tanto como las corta venas de un Lavoe o Tito Rodríguez), pero todo con el ritmo ahora enlatado de la salsa isleña (más enlatado aun es el estilo de él que siempre suena igual, al menos en cuanto a percusión se trata). Recuerdo que pensaba, “carajo, no sé si llorar o bailar”. Ese contraste me volaba la cabeza en aquel entonces, pero ahora que repensaba esas canciones, entiendo totalmente el porqué Victor Manuelle ha sido exitoso en Puerto Rico.

Y es que esa doble nota es la que caracteriza a Puerto Rico. Nuestra isla es una alegremente deprimida en donde la gente, ante la realidad que vive y respira a Caribe, queda atrapada en esa dicotomía; entre las ganas de llorar y las ganas de bailar, o viceversa. De hecho, la isla ha sido puesta en una minoría de listas que la ubican entre los lugares “más felices” del planeta, mas sin embargo, los ves malcríaos, apestao’s, haciendo cortes de pastelillo, asfixiaos porque no saben cómo sobrevivir la quincena (la clase media trabajadora), y recurriendo en todo momento a la violencia. Dicen por ahí que la nueva moda en la isla es pegarte un tiro si miras a “la mujer” del tipo…o sea, ¡eso sí que es propiedad privada! ¿Quién puede ser feliz con esa neura? ¿Y cuántos no andan con depresivos? Y por favor Señor periodista, ¿me puedes pasar los últimos numeritos de suicidios en lo que va de año? Dale que eso es lo tuyo y te pone más bellaco que a pedófilo en Chucky Cheese. Y que si el crimen, los tapones, los apagones, los malos gobiernos, ¡la Comay!….no hay playa ni Medalla que mantenga feliz a nadie con esa ganga, al menos no todo el tiempo.

Victor Manuelle y su salsa de personajes patéticos pega por ese tener ganas de ir llorando y cantando, por ser una versión facsímil razonable de esa cultura que vive conforme con su realidad siempre y cuando sea bailable. Cualquier respuesta o sugerencia para esa indecisión entre el llorar y bailar queda tan lejos como una estrella.

Monday, May 30, 2011

El fin de las humanidades

La semana pasada el ex-presidente de la UPR, José Ramón de la Torre, detalló en entrevista para “El nuevo día” cómo obtuvo la presidencia con la condición de ser un sello de goma para el gobierno y la Junta de Síndicos. Muchos se expresaron luego negando tales acusaciones o con la indiferencia del que acaba de escuchar algo que ya sabía. Tan reciente como hoy la Dra. Elsa Luciano Feal, profesora del recinto de Arecibo, expresó por carta que las “confesiones” no tomaron a nadie por sorpresa, especialmente a los que son parte de la UPR. Tampoco a mi me tomaron por sorpresa el “MEA-culpa” y me parece más un chiste que otra cosa. Cualquier persona con dos dedos en la frente podía darse cuenta…aunque en Puerto Rico muchos parecen tener los veinte dedos, no digo en la frente, sino clavados severamente en el cerebro, impidiéndoles siquiera intentar una leve excusa de pensamiento.

Lo que me llamó la atención de esa entrevista es algo de lo que no se ha hablado mucho desde que aquel decidiera cantarlas todo à-la Castro Font, y es que hubieron unas palabritas sueltas que decían que lo que se pretendía hacer en la universidad era convertirla en una especie de colegio vocacional donde reinen las ciencias naturales y la ingeniería, para pasar al restante de los fondos a las otras disciplinas, figurando las ciencias sociales como penúltima y las humanidades “si sobra algo”. ¿Y qué digo? Esto tampoco nos toma por sorpresa a todos los que hemos visto los cambios de la pasada década en esa universidad. Sin embargo, el hecho de que a las humanidades le toca “lo que sobra” y si es que sobra confirma todas aquellas teorías de conspiración de antaño. No, no eran mojigangas de los de izquierda sino que eran realidades y planes estructurales en nombre del progreso y del siglo 21…pero el que dice que viene el lobo por joder termina dejado por loco cuando llega el lobo de verdad.
A lo largo de su historia la Universidad de Puerto Rico se ha distinguido, no solo por graduar a una larga gala de médicos, científicos e ingenieros, pero sociólogos, sicólogos y humanistas, desde escritores y poetas, hasta historiadores y académicos cuyo trabajo ha sido importante dentro y fuera de la universidad. No obstante, el “plan de futuro” excluye a los últimos (esos no son los que traen el blin-blin). Las humanidades son vistas como plagas por estos gobiernos que prefieren empleados obedientes y sumisos antes que a profesionales críticos. Es más, de las humanidades solo sale gente que se dedican a cuestionar, o sea, a crear dolores de cabeza…como yo. Esto no es cosa de ahora, sino que es “el plan de futuro” tanto por los rojos como por los azules. La cosa es que ahora está escrito en blanco y negro…a las humanidades “lo que sobre”.

Si a ese sector de la UPR se le va a marginar y tirarle sobras, me parece que estamos en el umbral de eso que melodramáticamente podemos llamar como el fin de las humanidades en la isla. Sé que las universidades privadas tienen cursos básicos de humanidades y hasta ciencias sociales en sus currículos, pero no son tomados en serio y más bien son para satisfacer las exigencias de las agencias acreditadotas de los Estados Unidos. Para esa gente lo que importa es que esté el curso y que sea aprobado por el estudiante, la calidad del curso y la seriedad del mismo es irrelevante. Esa es la dirección a la que llevan a la universidad. Ese es el “plan de futuro”.

PD. ¿Y qué?-pensarán muchos. Todos aquellos que odiaron tener que leer un libro de literatura, filosofía o historia alguna vez por culpa de aquellos requisitos de la UPR que “de nada sirven” (si todavía piensas así de nada te sirvieron) deben saltar de alegría y escupir en la tumba de las humanidades. Mi respuesta es el presente: una isla ahogada en asesinatos, con políticos arrogantes e incompetentes, con una corrupción institucionalizada que va más allá de partidos y de la política, con una policía que prefiere entrarle a palos a un estudiante desarmado que a un criminal armado, con una población indiferente, con una emigración cada vez más grande….eso es ahora, imaginen ese brillante futuro que nos espera en una isla con gente menos educada, gente que solo saben de lo de su profesión y le pueden mentir de cualquier otra cosa, con más gente que no conoce su historia, sin arte y con la solidificación de una cultura que son más eventos de distracción que las expresiones culturales de un pueblo, en fin, y para cerrar con una mezcla pop de humanidades, imaginen a un pueblo sin alma.

Tuesday, May 24, 2011

Crónicas de Buenos Aires: El final

Las primeras crónicas que escribí sobre Buenos Aires fueron basadas en los primeros meses de mi estadía por el Sur. Es por eso que en estas crónicas me baso solamente en los días finales, en aquellos días en donde el frío se venía como ola a las costas de la ciudad portenna, en aquellos días en donde el gris nos arropaba como una frisa y el sol se acostaba más temprano. Escribir todo lo que pasó entre medio sería kilométrico y lo dejo para historias remotas y cafés en esquinas.

Me asusté en esos últimos días. Era, ¿qué? ¿Principios de mayo? ¿Finales de abril? Y yo tiritando de frío dentro de la casa. ¿Por qué? Porque no tenía calefacción. Claro, pude haber comprado uno de esos que venden en las esquinas o pude haberme ido en el verdadero viaje de pobre y encender el horno de la estufa pero pensaba que con la bata se arreglaba el mundo y con la frisa se calentaba el cuerpo. Demás está decir que esa frisa no la usaba desde la primavera pasada y que me dio una alergia del carajo pero a esas alturas mis opciones eran pocas, o estornudaba, o me cagaba en la madre del frío. Así que saqué cojones y entre medio de estornudos se me escondieron y soporté el frío, que ni tanto era y que, como dije antes, era como una ola, iba y venía, ya que luego vinieron días más templados. Tampoco es que el frío fuera tanto. Habiendo vivido en el norte y por el área de Chicago lo de Buenos Aires es un chiste. De hecho, todavía me cago de la risa al recordar aquellos cuerpos que iban con abrigos de lana en 50 grados F (15C). Los pobrecitos no soportarían una brisita de esas de las que llegan hasta los huesos en 0F pero por algo sus ancestros escogieron el mundo al revés antes de emigrar el despiadado frío norteño. Eso, señoras y señores, se llama sabiduría. Con todo y eso, yo puedo soportar el frío descomunal del norte con un buen abrigo, siempre y cuando sea AFUERA y no ¡DENTRO de la casa!

Fue por esos días que vinieron los de Estopa. Siempre es divertido ir a un concierto en Baires, especialmente porque la energía es otra, algo que se recoge en el álbum en vivo de Bersuit pero que se pierde en el de Bunbury en el Gran Rex. De hecho, fue en el Gran Rex donde cantaron los de Estopa y aunque estuvo bueno, no me pareció tan genial como el de Bunbury, pero claro, yo soy más fanático del último. Lo de Estopa fue más una noche de recuerdos y de flamenco que me recordó la última cena en un restaurante gallego de Baires. Era cerca de mi casa y servían pulpo gallego, o eso decía en el letrero de afuera. Ya yo había ido en verano al mismo lugar a comer una paella que no me mató, pero la idea del pulpo me hacía recordar aquel pulpo que comí una vez en Madrid en una calle que ya no puedo recordar. Demás está decir que aquel pulpo de Madrid se quedó en mis recuerdos y que el pulpo porteño….bueno, no debieron bajarlo del puerto. No culpo a “la ciudad de la furia”, sino al restaurante que, como con la paella, cagó al pulpo con un aceite de oliva que nada que ver. Y es que en el sur hay que escoger bien el aceite de oliva porque puede ser muy fuerte, tan fuerte que si no eres fan de la oliva, te puede cagar el sabor de la comida. Voilá.

Fue también por esos días que se dio la feria del libro y el festival de cine BAFICI. De la primera no voy a opinar gran cosa, de hecho, no voy a decir nada. Del festival voy a decir que tuve tres experiencias: en una no llegué al filme a tiempo, en otra el filme fue tan y tan pretencioso con una historia metaficcional tan gastada que estaba loco por salir corriendo al bar del frente y bajarme una botella de vino, y la tercera, el documental “La muerte de Pinochet”. Este último fue genial aunque las tomas de acercamiento extremas (Extreme Close Up) daban un poco de repugnancia. O sea, yo no quería ver tan de cerca los dientes jodios del viejo ni las lagañas de uno de los personajes. Sin embargo, perdí mi sentido de orientación al salir de la película. Después de ver una hora y media de cine chileno me costó reubicarme en Baires. En otras palabras, por un momento pensaba que estaba en Santiago….y luego esa sensación interna de “pero huevón, si estás en X, no en Y” me mareó como llanero en altamar.

Pero era en Buenos Aires en que estaba y era por sus calles donde caminaba. Nada como esa sensación. Debe ser la mitología que cubre a la ciudad la que la hace fascinante. Claro, como toda mitología, es falsa…pero eso no es lo que nos maravilla de los mitos sino ese mundo alterno que nos hace ver aquello que en realidad no podemos ver ni en pintura, historias que deben inspirarnos. Buenos Aires es esa ciudad del tango que no pude dominar, esa ciudad de la histeria colectiva y del “che”, de Gardel y de Maradona, de Eva y de Cristina, de las marchas y huelgas y huelgas y huelgas bañadas de batucadas. Esa ciudad de calles en las que el sol se esconde en un blanco desgastado que cubre a los edificios, calles que se bifurcan como laberinto ahogado por el río. Esas calles, las venas de una ciudad apretada en ese espacio, como si todo tuviera que apiñarse para quedarse en el mismo sitio, para que no se escape.

Ya en los últimos días me tocó ser más práctico y consumir un poco, pero vestimentas que me saldrían mucho más caras en Puerto Rico o Estados Unidos, cosas formales que raramente uso y raramente usaré pero que hay que tener para esos 29 de febrero. Y tenis o zapatillas de cuero…y, y, y…. ¿Dónde? Pues mija’ allá por Pueyrredón. ¡Una ganga! ¡Todo como a unos 60 dólares! Si te digo que para comprarse cosas no hay que gastar tanto…y hasta en la misma Corrientes consigues algunas cosaaas…¡muchacha! ¡Que te quedas boba! Y de Pueyrredón tengo que decir que no hay ciudad más argentina que esa. Antes de que salten, veamos la lógica de esa afirmación. ¡Es una calle de emigrantes! Punto. Y Argentina, por más puristas que quieran hacerse algunos, se forma a partir de los emigrantes. Claro, en un tiempo eran todos europeos, pero en Pueyrredón el emigrante es peruano, boliviano, paraguayo, esos que no son tan bienvenidos porque tienen otros acentos, otros rasgos, otros colores diferentes del europeo. Por eso es una calle tan extranjera como argentina y viceversa…muy agobiante, muy caótica, muy tercer mundo…muy Perse en Santiago, muy Río Piedras en San Juan.

Finalmente me tocó empacar hasta un futuro no muy lejano, despidiéndome de amigos que se encargaron de emborracharse y cagarme el apartamento (yo tratando de recogerlo y ¡fuá! ¡Una botella de vino devuelta en el Bidet!), otros que se llevaron lo que no cabía en las maletas preñadas de cosas, otros que nunca pudimos cuadrar una última reunión en persona…en fin. Gardel me acompañó con sus canciones de despedidas que llegué a subir en un Facebook donde me acusaron de cursi y yo respondí con el “me gusta” tan mecánico en mí (es como un tic nervioso). Así, y cargando con cuatro maletas (sí, porque al parecer yo me creía Aschenbach en Venecia cuando llegué, trayendo tanta ropa demás que, a fin de cuentas, paseé), me fui a lo que fue un maratónico viaje al aeropuerto, dejando mi viejo sombrero en el ínterin. Sin embargo, voy a ir un poco más allá y me voy a poner más cursi todavía diciendo que….hay parte de mí que todavía no se ha ido.

Al Sur….nos vemos pronto.

Monday, May 16, 2011

Antes del invierno

Me voy con el invierno,
caminante viajero,
le huyo al frío entre los huesos,
le huyo al frío de tu cuerpo.

Me voy, porque tengo que hacerlo,
porque se han ido con el viento
los días de este calendario
y entre nosotros solo queda este silencio.

Y verás,
quizás,
otra primavera,
otro sol, otros colores,
el olor a fruta nueva.

Y veré,
tal vez,
otra primavera
que florezca en mi
como alguna vez lo hicieras.

Mas me iré nuevamente
cuando sienta el frío del invierno,
cuando se nos acabe el tiempo,
cuando todo sea silencio.

Iré en busca de nuevos cielos,
caminante viajero,
siempre en busca del calor,
siempre escapando del invierno.

S. Gregory

Monday, May 09, 2011

+Galeano

“América Latina trata a sus indios como las grandes potencias tratan a América Latina.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 27)

Wednesday, May 04, 2011

las dos memorias

“Los esclavos también trajeron, desde al África, la antigua certeza de que todos tenemos dos memorias. Una memoria, la memoria individual, vulnerable al tiempo y a la pasión, condenada, como nosotros a morir; y otra memoria colectiva, destinada, como nosotros, a sobrevivir.”
-Eduardo Galeano

(Ser como ellos, siglo XXI, 18)

Friday, April 22, 2011

Viernes Santo: Todos queremos creer en Santa

Hoy es viernes santo. Lo tenía presente porque muchas cosas iban a estar cerradas. Sin embargo, escribo una breve reflección ya que me puse a ver que supuestamente va a llover hoy. Va a llover en viernes santo. Recordé todas esas películas de semana santa en donde el cielo lloraba porque habían matado a Cristo. Recordé cómo, por mucho tiempo, esperaba que lloviera en viernes santo. Era la forma del cielo llorar la muerte de su hijo, o eso pensaba. Y déjenme decirles que ¡casi todo viernes santo llueve! Incluso si sobrepasas fronteras geográficas. ¡Pareciera que en casi todo el planeta llueve! Y así, hoy va a llover en Buenos Aires Argentina. Supuestamente. Va a llover porque el cielo conmemora la fecha en que murió “el hijo de Dios”.

Recuerdo también ese primer viernes santo que no llovió. Fue cómo si Santa no trajera sus regalos…..Ahora me río de los pronósticos de lluvia en viernes santo, me entretienen, me recuerdan a aquella inocencia ya perdida, aquellos tiempos cuando uno creía toda mentira que le dijeran a uno, para luego pensar que el cielo lloraba por el hijo de un dios que mandó a sacrificarlo por el pecado del hombre que se inventó. Y es que eso que llaman el “pecado original” es un invento del hombre para hacernos sentir culpable, un contrato para establecer una deuda con un dios y con algo que ni entendemos. Porque, ¿cuál es el gran pecado? ¿Alguien comió de una fruta? ¿! En serio?! No será que alguien (el ser humano) nació? …luego tuvo conciencia (se dio cuenta que estaba desnudo). Al parecer ese es el gran pecado que nos expulsó del gran Edén de la ignorancia. ¿No será que es mejor que haya un pecado original que nos ate de por vida a deberle algo a una autoridad invisible? ¿No? ¿No es eso? ¡Pero si por milenios ha funcionado para dominar a las masas que no quieren pensar! Es técnica probada. Hoy en día hasta los líderes más violentos se hacen valer por estas ideas y las de este dios para manipular a sus seguidores…..pero no los culpo, todos queremos creer en Santa.


Hoy es viernes santo. Casi todo está cerrado. Quizás llueva, quizás no. Yo solo espero que no llueva, para que no hayan niños que, como yo, un día se sintieron culpables del horror de la muerte del hijo de un dios que fue matado por el hombre y mandado a matar por su padre. ¿Quién puede pensarse bueno ante esa herencia?

Pero los niños apenas entienden matemáticas. Solo niños que no saben que 1+1=2 pueden creer, más por miedo que por entender, que un dios dejó que mataran a su hijo, que era humano pero que resucitaba como ningún humano puede, y solo para que sus panas lo vieran vivo (Si yo resucito voy a la plaza, frente a Pilato…y le grito… ¡Crucifícate a éste canto de cabroooooooooón!). Solo un niño puede creer más por miedo y fantasía que ese hijo nacía de una virgen y se sacrificaba por un pecado que nadie entiende. Solo un niño puede creer que un dios que exige como perdón el mandar a matar a su hijo, que supuestamente también es él (sí porque yo soy igualito a mi pai), es bueno, justo y pelea contra las fuerzas de un supuesto demonio que es “malo”, pero que no es dios, pero que al parecer a la gente la gusta más seguir, aun cuando no tiene los mismos poderes de dios. Solo un niño que no sabe de los otros dioses cree que este dios tiene algo de dios, cuando no tiene poder alguno (ah, y los niños también creen que no está en nosotros entender los “designios del Señor”). Pero, esos son los niños que hoy se van a sentir culpables si ven la lluvia caer. Le deben todo a esa autoridad invisible y a los que usan su nombre para que uno haga caso a esa autoridad.

Si llueve mañana, me voy a sentir, no culpable, pero triste por ellos. Ojalá no llueva y empiecen a darse cuenta que hay fantasías que son mejores dejar atrás.

Monday, April 18, 2011

Cronicas de Chile

Si bien ahora la guardo un cariño muy especial a Chile, mi relación con ese país y especialmente su capital de Santiago no se puede considerar como eso que llaman amor a primera vista. De hecho, el día que llegué tuve ganas de salirme corriendo de regreso a Buenos Aires. En retrospectiva, era lo de siempre, o sea, necesitaba acoplarme: no podía sacar dinero en los cajeros porque no entendía cómo funcionaban, los bancos estaban cerrados (que cierren a las 3pm no es algo de lo que uno se acostumbra jamás), los lugares de hacer llamadas brillaban por su ausencia,…en fin, yo en medio de un valle y sin nada más que un mapa que me dieron y que no quería mirar mucho para no subrayar lo obvio, que soy extranjero y estaba más perdido que un juey bizco. Pero en menos de un día todo comenzó a resolverse y ya me fui acoplando. Acá agradezco a José por toda su ayuda y por mandarme a Josefina, que me dio una gira compendio por todo Santiago en unas tres horas, para luego sentirse culpable por el exceso de información. Sin embargo, mi mente se ajustó a la nueva realidad y se trazó un mapa para orientarme (sin tener que leer uno). Fue así como pude caminar sabiendo a dónde iba. No me tomen a mal, normalmente encuentro calles sin un mapa, y, por esas cosas de la vida, llego a los lugares que quiero llegar sin tener puta idea de cómo, pero es mejor si tienes al menos una idea, aunque no sea tan puta. De hecho, ese instinto medio raro y exagerado fue el que me llevó a encontrar la tumba de Allende. O sea, sin saber dónde estaba, lo encontré por casualidad al desviarme y meterme entre medio de las tumbas, medio a la deriva y sin saber a dónde iba. ¡Y el cementerio general de Santiago es grande con cojones! No se crean que es el cementerio del viejo San Juan. Por esos días llegó también Silvana, la dueña de apartamento donde me quedé y que ya no existe para esta fecha o más bien cambió de dueño. En esos días ella fue de Virgilio y me llevó por el Persa (mercado de pulgas), y de discoteca y de perder las neuronas. Me tomó dos días recuperarme del vodka y pisco en una de esas noches. Definitivamente el vodka es mi enemigo silencioso. De Chile o de Santiago me llamó la atención el parecido cultural con Puerto Rico. No, no me he vuelto loco. Obvio que son culturas diferentes (caribe y cono sur). Sin embargo, lugares tan lejanos geográficamente comparten una fascinación con el consumismo yanqui, una pleitesía al orden y un entendimiento de que hay que resignarse con lo que hay sin quejarse mucho ya que eso “no lleva a nada”. Uno se calla y a pagar las deudas y votar por las mismas opciones cada cierto tiempo, aunque para ellos solo signifique un solo término por candidato. También se comparte un aparente silencio con el saqueo de las tierras por las empresas con el blin-blin, una aparente indiferencia ante la privatización de todo, hasta las nalgas de la abuela (no tanto porque la abuela ocupa un lugar importante en el imaginario de la familia, muy bien construido por Pinocho y que en Puerto Rico, más agringados aun, no existe tan marcadamente). En el arte comparten el reguetón, que se ha regado desde Puerto Rico, se burló a la revolución cubana, se le pasó en las nalgas a los el norte y marcó sus ecos tanto en el Sur como en España. También comparten un desgano por los artistas de su país, aun cuando son, como me dijo otro amigo chileno, tierra de poetas. Sin embargo, solo les importan cuando son exitosos, cosas que se mide con el éxito que se tenga en España o en otro lugar de mejor prestigio (¡fue reconocido por el primer mundo!). Los artistas de la calle apenas reciben atención fuera de sus pequeños círculos. ¿Suena familiar? Estas son cosas que contrastan con el país vecino de Argentina, aunque en el Sur comparten la misma paranoia del robo y el crimen que parece risible para alguien que viene de una isla en que asesinan casi 1,000 personas por año. Eso sí, nadie tiene palabras más únicas que el chileno, desde “pucha” a “culicagao’”, desde “po” a “huevo’”(se come la n tan marcada en Colombia), desde “cachai” hasta toda terminación con “ai” (“¿Cómo estai?” es uno de los muchos ejemplos), y no olvidemos “gásfiter”, que es nombre exclusivo para el fontanero...pero mi favorita es “pololo”, que significa novio y que nadie más usa en el mundo, confirmando lo que se dice en “Los detectives salvajes” de que Chile entero es la Isla de Pascua, totalmente separados del resto del continente (océano, Andes, el desierto y el hielo en el fin del mundo se encargan de esta “separación”) y por eso consta de un lenguaje único. Sí, lo de “pololo” también es verbo….”pololear”…y se puede conjugar: “estamos pololeando”. ¡Genial! Claro, yo no entendía nada al principio, pero al final era yo el que tenía que traducir a argentinos que vinieron de visita. Parece mentira que tenga que venir un caribeño del carajo a explicarle a un argentino lo que alguien de su país vecino dijo. Y hablando de mentiras hay muchas cosas que parecen mentira en Chile, como tener a un presidente idiota que traspasa tierras de las víctimas del terremoto a empresas con la excusa de reubicarlos, o que parece apuntar a hacer lo que ni siquiera Pinochet se atrevió, privatizar o al menos vender algo de las empresas del cobre. ¿Será que a los chilenos les ha llegado su Menem (otro vínculo con la isla, donde un millonario neoliberal se reparte a la isla entre sus amigos millonarios…cabe señalar que ambos fueron electos con el lema de “cambio”)? Igual el tipo tiene carisma y me fijé que el chileno presta atención de lo que dice el presidente, aun si están en una barra, cosa que me pareció curiosa. Digo, al menos hacen que miran la TV. Tampoco dejan de asombrar las incongruencias en las mismas calles de la ciudad. Una Plaza de armas que enterró a un santuario mapuche cerca de la misma, un cerro Santa Lucía que fue posmoderno antes de que existiera el posmodernismo (las mezclas arquitectónicas en el cerro, tan kitsch como diferentes y fuera de contexto, son las que me llevaron a esa conclusión) y la mejor de todas, ¡la casa de la moneda! Allí está, entera, para que Obama la visite….y hace unas décadas fue el único ejemplo de un golpe de estado en donde se atacó a bombas y a balazos al emblema simbólico de la nación. Para cerrar con broche de oro, detrás de ese palacio yace ahora la estatua de Allende, al mismo que bombardearon estando adentro del palacio, y debajo de la estatua unas palabras de unidad para Chile sacadas totalmente fuera de contexto dado que son parte de su último discurso en pleno golpe de estado y que hablaba de un Chile socialista y soberano, cosa que hoy en día más lejano no puede estar. Hablando de Allende o el corpus por resucitar, fuera de esa estatua, es una figura mascada entre dientes. O sea, gústele al que le guste, se trata de una de las figuras políticas claves del siglo 20 y del socialismo latinoamericano. Sin albergo, fuera de una que otra imagen, pareciera que el huevón no era chileno. En Argentina el Che está en todas las esquinas aunque sea para engranaje turístico y al Che le valió pinga su país natal. Sin embargo, Allende murió por su país y lo más que me encontré de él fue una taza en Valparaíso, algo tan kitsch que ahora me lamento no haberlo comprado. Para colmo, ¡la taza estaba debajo del general Pinochet! ¡Hasta en eso al pobre Salvador le toca estar aplastado por el que fuera su militar de confianza! Pero más que nada le fui guardando un cariño a Chile por lo lindo que es el país. De bus en bus y de parada en parada, pude ver una manada de paisajes, de montañas, de vegetación tan linda, que hago mal en resumirla en un párrafo. Allí vi nuevamente al Pacífico, al mar, y a sus frutos. Allí pisé las huellas que dieran desde Neruda, frente al mar (¡yo quiero ese socialismo de tres casas!) y las que diera, sorpresa de sorpresas, ¡Darwin! Allí vi las colinas y las montañas y el verde que hace falta en la pampa argentina. Allí me sentí mucho más bienvenido con los grupos de chilenos que tuve la oportunidad de compartir que en Argentina. No lo tomen a mal amigos argentinos, pero los chilenos son más amistosos. Aun así estuve muy contento de regresar a Baires. Pero ahora, estando acá, hay algo que hace falta de Chile…..y más que sus hermosos paisajes, creo que es su gente.

Tuesday, April 12, 2011

...del capitalismo

“Nunca una discordancia o un disfuncionamiento anunciaron la muerte de una máquina social que, por el contrario, tiene la costumbre de alimentarse de las contradicciones que levanta, de las crisis que suscita, de las antiguas que engendra y de las operaciones infernales que la revigorizan; el capitalismo lo ha aprendido y ha dejado de dudar de sí mismo, mientras que incluso los socialistas renuncian a creer en la posibilidad de su muerte natural por desgaste. Nunca se ha muerto nadie de contradicciones. Y cuanto más ello se estropea, más esquizofreniza, mejor marcha, a la americana. ” -Gilles Deleuze y Félix Guatari (El Antiedipo)

Sunday, April 03, 2011

sobre la multitud....

“Si colocamos la multitud como un concepto de clases, la noción de explotación será definida como explotación de la cooperación: cooperación no de los individuos sino de las singularidades, explotación del conjunto de las singularidades, de las redes que componen el conjunto y del conjunto que envuelve las redes, etcétera.” -Antonio Negri (Diálogo sobre la globalización, Paidós, 48)

Monday, March 28, 2011

comenzemos cada uno pues...

“La acción del súbdito, o mejor, la subjetividad del súbdito puede modificar la forma de gobierno.” -Antonio Negri (Diálogo sobre la globalización, Paidós, 48)

Monday, March 21, 2011

del silencio...

“A veces lo mejor es el silencio.”
-Roberto Bolaño
(Detectives, Anagrama, 359)

Tuesday, March 08, 2011

El decreto del dictador

Había una vez una isla remota y olvidaba en donde habitaba gente hipnotizada por mentiras. Gracias a las mentiras vestidas de sirena aquella gente proclamó a un mandatario que se encargó de pisotearlos, reducir sus derechos, usar el miedo y la violencia para que no se atrevieran a cuestionarle, y derrochar todo su poder amparado en el espaldo popular que una vez tuvo. No. Comencemos de nuevo. Había una vez un líder que no era líder pero que debía muchos favores a gente de dinero, a la elite millonaria que le ayudó con su propaganda para engañar a eso que llaman pueblo, pero que es la suma del uno a uno de gente de carne y hueso. Tampoco. A ver, érase una vez una isla con un mandatario que aplastó la democracia usando sus poderes para poner a gente que le aplaudieran dentro de todas las instituciones de la forma republicana de gobierno, dando entonces un golpe de estado en la tierra que gobernaba sin que muchos se dieran cuenta, y utilizando sus poderes para entregar el reinado a los condes verdes, los condes que sólo buscan los verdes y desecan ese color en la tierra.

Ninguno de los falsos comienzos anteriores tratan sobre fábulas o cuentos de fantasía, sino que cada uno de ellos puede ser aplicado a la situación que vivimos en la isla con el gobernador Fortuño. A los que han leído algunas de mis reacciones a sus decisiones en lo que lleva de gobierno conocerán que no soy su mejor fanático. De hecho, no recuerdo tener tanto antagonismo con un gobierno en Puerto Rico, lo más comparable sería con el gobierno de Bush en los Estados Unidos pero eso es, como quien dice, un bombo al pitcher. Dah. Y es que ningún otro gobernador ha violentado tan descaradamente a los supuestos de la democracia, desde el asalto al Tribunal Supremo cuando sumó el número de miembros y los puso a todos de su ideología y partido, hasta el incrementar el número de miembros de la junta de síndicos en la UPR y, ermm, la misma cosa, denle copy/paste. Siguiendo ese patrón, la semana pasada el gobernador golpear logró una vez más a la democracia e, imitando nuevamente modelos dictatoriales (y es que no queda otra forma de llamarlo), logró que el senado pasara una ley (Proyecto del senado 1953) que le da poderes especiales para declarar a la isla en estado de crisis energética y, como resultado, poder saltar las regulaciones que existen para proteger los recursos naturales. Con la excusa de la crisis, que es lo que siempre usa este hijo de puta cada vez que va a arremeter nuevamente contra la gente que lo puso en el poder, esta ley le da poderes para apurar sus proyectos del gasoducto y la autopista hacia el oeste por encima del terreno de los karsos, “no questions asked”.

Alguna gente pensará que eso no tiene nada de malo. Sin embargo, el proyecto del gasoducto, que él mismo negó en la campaña del 2008 como uno viable, sustituye una fuente de energía que no se produce en la isla (petróleo) por otra que tampoco se produce en la isla y que hay que importar (el gas). La solución es entonces otro parcho que nos sigue sumergiendo en los ciclos de dependencia que nos mantienen hundidos en los lazos de improductividad y esclavitud. En lugar de proponer soluciones energéticas que se pueden producir en la isla, como sistemas que generen energía a través del viento o el mar (que existen), se implementa a la fuerza un sistema que, además de ser peligroso, depende de que unos terceros lo traigan a la isla. ¿Por qué? Porque genera contratos jugosos a los panitas del gobernador, nada más. Puede poner las subastas que quiera, y todos los que entren en la lista son parte de unos negociantes ajenos que en nada le importa el bienestar de la isla ni de su gente, solo quieren explotarla y sacarle todo el dinero que puedan. Por otro lado, no hay mucho que decir del proyecto de la autopista a Aguadilla, que afectaría la fuente de agua natural en la isla a cambio de una autopista que no hace falta. Punto. No hay más nada que decir, excepto de que desde los noventa hay un proyecto propuesto por la escuela de ingeniería en la Universidad de Puerto Rico para convertir a la carretera #2 en autopista, sin tener que malgastar otro terreno verde en la isla. Pero claro, ese proyecto ha sido ignorado por administraciones azules y rojas porque no deja…verdes.

Como ese es lo único que le importa al gobernador y a sus panitas, impusieron esa ley que inventa una crisis para pasarse a las leyes existentes por donde no les da el sol. Si esos no son estilos dictatoriales yo me quedo sin definiciones. De hecho, me recuerda esa película de Star Wars en donde se daba todos los poderes al Canciller con tal de solucionar “la crisis”, el mismo Canciller que en la trilogía clásica hiciera de emperador. La diferencia es que esto no es una galaxia lejana ni una película mala de Hollywood, esto es nuestro hoy, nuestro ahora, y nuestro mañana vendido -¡ehem!- subastado al mejor postor.

Monday, February 21, 2011

Borders: la crónica de una muerte anunciada

En las últimas semanas se ha venido comentando sobre la quiebra de Borders y he leído a varias personas lamentándose de la “gran pérdida”, específicamente en Puerto Rico. Unos han llorado, otros se han lamentado por viejos amigos, otros han dicho que van a perder las ‘alternativas’ de café, que van a perder “una buena librería”, y muchos otros réquiem más. Por mi parte, he reaccionado con algunas respuestas fugaces que han despertado la crítica a mis comentarios que, en su mayoría, son infantilmente reaccionarios, dada la mala experiencia que tuve cuando trabajé en esa empresa. Sin embargo, al ver que el tema sigue y sigue, me veo obligado a comentar más pausadamente y de manera un poco más seria.

¿Qué exactamente es lo que se llora? Mas que nada se lloran ilusiones. La cadena de librerías más grande en la isla no era una buena idea desde el principio. En primer lugar, muchos de los que lloran la magnificencia de Borders ignoran que ni siquiera era la cadena de librerías más importante de Estados Unidos. Algunos se sentían tan “progresistas” o más bien modernos con saber que había siempre un Borders para ir y comprar tú regalo de último minuto en navidades, pero el gran progreso yanqui, esa similitud con el norte que muchos quieren, no se radicaba en la cadena de librerías, ya que fue y sigue siendo Barnes & Nobles la empresa más fuerte en el negocio, cadena que nunca llegó a Puerto Rico, quizás porque sospechaban que Borders se les adelantó a acaparar un mercado de lectores que son escasos de por sí en la isla (que levanten la mano los que leen un libro para relajarse después de un largo día de trabajo en lugar se leer un libro). De hecho, dicen las lenguas que hubo un intento de esa empresa, empresa que NO va a la quiebra, para entrar en la isla en la Plaza Universitaria, pero que las librerías locales ejercieron presión para impedirlo. No sé cuan cierto sea esto, especialmente cuando dudo que las pequeñas librerías tengan poder alguno para detener la llegada de una empresa de envergadura. La cosa es que no llegó, sea por lo que sea, y subrayando que el gran “progreso” de Borders era “de segunda mano”. Me pregunto cuál es el empeño y la mamabichería (no queda otra palabra) de querer que nos traigan cuantas cadenas anglosajonas hayan, pero al parcer somos dos o tres los que nos hacemos esa pregunta, dadas las grandes filas que se forman cada vez que llega una nueva cadena. Best Buy y Krispy Kreme son dos de los más recientes ejemplos.

El tema de las pequeñas librerías me lleva al segundo punto, que es la idea de que Borders era superior a las librerías existentes. Si bien Borders contaba con más variedad, su lógistica de negocios era el resultado de las monstruosidades neoliberales que vienen ocurriendo desde Reagan, en donde se manipulan los sentimientos del consumidor y luego se le lleva de la mano ante estas mega empresas con la promesa de bajos precios y variedad. Este es un punto complicado. Se entiende que, aun cuando se trate de la venta de libros (mayormente), el concepto de la tienda de libros es un negocio. Se entiende también que Borders ofrecía descuentos y precios que las librerías tradicionales, no podían ofrecer. El inventario de Borders gozaba de una maquinaria que le garantizaba el volumen suficiente para ofrecer el mejor precio al consumidor. Sin embargo, dentro de esa maquina, fluctuaban y chocaban dos culturas, la del libro y la-ehem!-cultura, esa de la literatura, las ideas, la música y el arte, con la otra cultura, la que se nos fomenta día a día y empresas como Borders favorecen: la de consumir. La tarea de Borders no era llegar al consumidor, ni siquiera tratar de llegar al cliente, al que se suponía era lector y requería cierto contacto con gente que conociera de la primera cultura y le pudiera ayudar. No, su tarea era vender miles y miles de dólares por día y superar la ganancia al año siguiente. Era la lógica del capitalismo más burda y asquerosa. No se trataba de vender y mantener el negocio, sino de vender y vender y vender, hasta llegar a quedarse con sumas exorbitantes. En otras palabras, no se trababa solo de vender, se trataba de vender e incrementar la ganancia En eso Borders sí era superior a las otras librerías y sus sumas eran exorbitantes, al punto que en un fin de semana se podía alcanzar la suma de 60,000 dólares, para que al anno siguiente, tuvieran trazado el plan de vender más que eso, quedarse en 60,000 dólares era considerado un fracaso en esta lógica del perpetuo crecimiento económico. Dentro de esta lógica, el cliente es un número más, por lo que el contacto con el mismo no valía para nada. Y como al final de cuentas lo que en realidad importaba era solo vender, y no dar un buen servicio para que el cliente estuviera satisfecho, se inventaban formulas de preguntas que insultaban la inteligencia de cualquier ser pensante como “¿encontró todo lo que buscaba?” u ofrecerles la nueva pendejada en venta.

Esta estrategia a la larga no les sirvió para nada ya que subestimaron que el nuevo juguete para vender era el libro electrónico por lo que, al parecer, no lograron crear una propia con su patente. En otras palabras, se quedaron en la logística de la mega-empresa de los noventa…y hasta ahí. Ese fue el gran talón de Aquiles. Incluso esa era una de la críticas a mis reacciones sobre la quiebra de Borders: no se trata de que un sentido de justicia sino de evolución dentro de esa cruenta cultura del negocio. Sí, al final de cuenta, la ley de Darwin puede ser tan aplicada como la de Marx al capitalismo, hay que adaptarse y sobrevive el más fuerte. Por ende, no es la culpa de Borders que muchas librerías pequeñas se vieran en la quiebra ante la llegada de Borders, ya que, como Borders ahora, no se supieron adaptar a los tiempos. Y es que cuando la mega librería llegó tenía el terreno abierto para hacer lo que le diera en gana. ¿Para qué ir a una librería más pequeña y cara cuando se pueden conseguir más cosas y a menor precio en la mega librería? Borders tuvo las de ganar y aun así perdió. Sin embargo, los que lloran el fin de Borders olvidan que la librería “bendecida” significó lo mismo para otras librerías, y significó gente despedida, negociantes (y no empresas) arruinados, y poca gente que los lloraron también. Pero esa es la gran diferencia, aquellos más débiles en la cadena evolutiva del capitalismo significaron muchas veces la desgracia personal de la misma promesa del capitalismo, aquella que como Rico Mac Pato, si trabajabas fuerte, podías montar tu negocio y hacerte de dinero. Se trataba de negociantes que quedaron en la calle y en bancarrota, no se trataba, como es el caso, de una empresa, cuya bancarrota la comparte una junta y no un Sr. Fulano. El que equipara los dos eventos y los equipara al “no poder ajustarse a los tiempos” carece de apatía con las personas que una empresa como Borders dejó en la calle. No, no es lo mismo, Borders es una empresa.

Y ahí viene el otro punto y el otro gran lamento: la gente que se deja en la calle o los antiguos compañeros. De los que se quedan en la calle no puedo más que estar de acuerdo en llorar su desempleo, especialmente ante el triste panorama laboral en la isla y más especialmente aun si se trata de alguna de las pocas personas que trabajaron conmigo y que no me desearon mal o que puedo considerar como amigos. Eso es lo más lamentable de todo esto, mucho más de que ahora tengamos que ir a otras librerías o a “Starbucks” (para los que van a extrañar el café frío …y malo). Sin embargo (y esto también va para los que piensen que una mega tienda como Borders puede ofrecer muchos más empleos que una pequeña tienda), la calidad de esos empleos dejaba mucho que desear, especialmente en la isla. En primer lugar, la mayoría de los empleos eran part-time, dejando sin derechos laborales a la mayoría de los empleados. Eso estaba bien para los que eran estudiantes, pero habían muchos que necesitaban las horas adionales de trabajo. Aquí era que la lógica de la tienda en Puerto Rico se torcía. Por ejemplo, asfixiaban con horas adicionales a los estudiantes de tiempo parcial, y dejaban sin horas extra a los empleados que necesitaban esas horas. Otro caso era el darle las horas como si fueran tiempo completo, pero dejándolos en la nómina como “tiempo parcial”, todo con tal de ahorrarse los beneficios y ahorrarle dinero a la empresa. Esa práctica era más común en navidad y en verano, y luego los regresaban a sus horas de tiempo parcial, limitando nuevamente sus ingresos. Si había quienes finalmente lograban que le cambiaran oficialmente a empleado “full-time”, pero esos eran los menos. ¿Para qué hacer eso si entonces había que darle mayores beneficios y derecho a vacaciones en adición al sueldo? Ya vemos como la avaricia de nada les sirvió. De hecho, ignoro si esta era la práctica en otras tiendas de la empresa dentro de Estados Unidos, pero sé que, por experiencia de personas que trabajaron en otras tiendas, las prácticas abusivas como ésa, la constante vigilancia y acoso a los empleados, el uso y costumbre de gerenciales de hacer lo que les venía en gana y hasta gritarles y faltarles al respeto a sus empleados, no sucedían en otras cadenas. Al parecer, la falta de educación y el complejo colonial se mezclan en la forma de hacer negocios en la isla, tornándose oscuros. Luego hacían estas reuniones pendejas cada mañana para tratar de aplicar la práctica de la empresa de “hacer sentir al empleado bien y así rinde más”. Lo que ignoraban en Estados Unidos es que en Puerto Rico, una vez se acababa la reunión, te volvían a tratar como les diera la gana y hasta se dio el caso de gerencial que decía “a mi no me importa” como contestación a las inquietudes de un empleado, al éste creer que en realidad podía expresar algo que le aquejara. En fin, que la calidad del empleo era pésima. Bien se podrá argumentar que trabajo es trabajo y mucho será el que lo hará, como también enumerar los descuentos que daban pero que en realidad eran migajas, considerando el trato al empleado. Pero los que quieran justificar a la empresa y bendecirla por ello siguen la misma lógica de pensamiento de los noventa, esa que Pedro Rosselló supo implementar tan bien: disminución de desempleo con trabajos parciales y centros comerciales que empleen números de personas pero bajo condiciones que en realidad son inaceptables para padres de familia. Trabajar sin derecho a vacaciones es más un intento desesperado por tener algo para pagar las deudas que raya en la esclavitud más que en una honrosa oportunidad de empleo, tú sabes, esa de la que te sientas orgulloso de lo que haces y produces. ¿Qué te vas a sentir orgulloso si eres uno más y te lo recuerdan día a día? ¿Si no puedes hacer una diferencia? ¿Si ponen al que sabe de libros a vender café y al que sabe de negocios a libros? Entiendo que en ese ejemplo la venta es más efectiva, pero es abstracta, no hay un logro en el empleado, más allá de un número que para él es ajeno y que solo se ve en su cheque. Ni siquiera sabe a quién se dirigen sus ganancias, como tampoco le importa poder ofrecer consejo real al cliente. En una empresa pequeña es más probable que el vendedor sí conozca el libro o al menos una ligera idea, aun cuando las prácticas de empleo a lo mejor tampoco sean las más propicias. En ambas situaciones la calidad del empleo deja mucho que desear, pero en la segunda, el empleado siente cierta satisfacción ya que se interactúa personalmente con el cliente, y pues, ve y conoce sus frutos, no se trata meramente de una venta ni de su cheque.

Con el fin de Borders en la isla dejamos todo eso atrás de una vez por todas y, con ello, el comercio impersonal tipo supermercado de las mega empresas. En ese sentido, la librería como negocio ha llegado a su fin. Sin embargo, fuera de los desempleados, esto no es necesariamente malo. Por un lado, esto abre la oportunidad de que pequeños negociantes puedan abrir librerías personalizadas para hacer contacto con un cliente que ya va en busca del libro en sí y por eso necesita de alguien que sepa del producto. Por otro lado, se acaba el monopolio que esa empresa llevaba en ese mercado por diez años, monopolizando, no solo el espacio de la librería, sino el qué se lee, el por qué, y el idioma. De hecho, entre los otros desempleados se encuentras los distribuidores, pero muchos de ellos se vieron en esa situación antes que Borders y GRACIAS a Borders, dado que les devolvían los libros no vendidos de golpe y con acumulación de años, dejando a los distribuidores con sumas de miles de dólares a pagar y obligando a tener que cerrar su negocio como suplidor. Fue por eso que de repente era más fácil y más barato conseguir un libro de García Marques o Galeano en inglés que en español. Vaya usted a cualquier otra librería de cualquier país del mundo y mire a ver si eso pasa, o sea, que la gran mayoría de los libros no estén en el idioma en que se habla en el país. En ese sentido, y porque para Borders era todo negocio, su control se tornaba cada vez más peligroso para batallas de mayor envergadura que se están llevando a cabo en la isla, como lo es la cultural.

No, al final, y sumando las cosas que se pierden, el cierre de Borders no es una mala noticia, sino algo así como karma para una empresa que quiso hacer de la cultura un negocio y solo eso (no que el libro, la música y eso no sean otro producto a consumir, pero no son solo eso), y aun así fracasaron. Con todo y eso, se mantiene la tienda de Plaza, acaparando gran parte del mercado en el área metropolitana. De hecho, eso es una consecuencia de los grandes logros que tuvieron como empresa monopolista, y quizás por eso, de todo lo que he enumerado, lo que más pese sea los pobres desempleados desesperados. Mas yo quiero apostar por nuevos comienzos para cada uno de ellos, nuevos comienzos para librerías nuevas y especializadas para al que quiera el libro (a los que extrañen el café les queda Starbucks, ese oxímoron en la isla). El que quiera el libro en formato electrónico, que lo baje por Internet y que lo baje gratis, ese será el nuevo comienzo para el nuevo lector y para que terminen los abusos de editoriales comerciales. Sé que muerdo mi propia mano, pero el que se niegue o no le guste este panorama, comete el mismo error de no acoplarse a los tiempos. Esa es la nueva realidad, con sus ventajas y desventajas. Dejemos de lamentarnos por algo a lo que nos acostumbramos pero no fue del todo bueno en realidad. Borders era y sigue siendo síntoma de un mal que nos sigue ahogando todavía hoy, el capitalismo en su fase más despiadada y cruel, nada más.